Capítulo Ocho: ¿Celos?

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Sonreí y fingí un ronquido, Patricio soltó una carcajada.


Me dormí profundamente hasta que abrí los ojos, no vi nada, ni una luz de sol ni nada, estaba en una habitación encerrada por completo. Me levanté y Patricio no estaba, traté de abrir la puerta pero estaba cerrada bajo llave.

Sheyla: Perfecto. Muero asfixiada, incendiada o de un paro y nadie se da cuenta.

Miré que la perilla giraba y me tiré a la cama fingiéndome dormida. Y Pato entró.

Patricio: ¿Media hora? Ok, yo la despierto - cerró la puerta.

Sentí el calor de Patricio sobre mí.

Patricio: Sheyla, Shey Despierta.

Sheyla: ¿Benjamín?

Poncho: ¿Benjamín? ¿Quién es Benjamín?

Sheyla: Mi no...¿Pato? - me senté en la cama.

Patricio: ¿Tu qué?

Sheyla: ¿Mi que de qué?

Patricio: Lo que me estabas diciendo.

Sheyla: No entiendo - ¿Benjamín? Buen invento Sheyla me encantaría saber si Pato es celoso.

Patricio: Me estabas diciendo de un tal Benjamín.

Sheyla: Ahh - sonreí y me levanté.

Patricio: ¿Y bien?

Sheyla: Tengo hambre ¿Qué hay de desayunar?

Patricio: Te pregunté algo.

Sheyla: Y yo también.

Patricio: Yo te pregunté primero.

Sheyla: Uy que maduro – rodeé los ojos.

Patricio: ¿Quién es Benjamín?

Sheyla: Quiero desayunar ¡O gritaré!

Patricio: ¡Contéstame!

Sheyla: ¡¡Papá tengo hambre!! ¡¡Pato no me deja comer!! - Grite a todo pulmón.

Patricio: ¡Cállate!

Sheyla: ¡¡Papá, Pato me calla!! ¡¡Muero de hambre!!

Patricio: Eres una niñita - me tomó del brazo y abrió la puerta, salimos de la habitación y nos fuimos a la cocina.


Me senté en el desayunador, Patricio me sirvió unos panes integrales con una barra dietética y fruta en trozos.


Sheyla: ¿Quién crees que soy? ¿Shakira?

Patricio: ¿Por qué?

Sheyla: No desayunaré esto. Me hago anoréxica sólo con verlo.

Patricio: Pensé que con el cuerpo que tienes te cuidabas, y me aventarías la comida si te sirvo desayuno de gente normal, cosa que tú no eres.

Sheyla: Vaya, vaya, vaya... Patricio Parodi te fijas en mi cuerpo...

Patricio: ¡Tengo ojos! ¿Qué quieres que haga? - esquivó mi mirada.

Sheyla: Te enseñaré lo que es un desayuno real - me levanté, Pato se me pegó como chicle - Tranquilo, FBI ¡Sin comer nunca huyo!

Patricio: No me arriesgo.


Tomé la mano de Patricio y lo acerqué a mi bruscamente.


Sheyla: Mejor pégate bien si no quieres que me escape de verdad.

Pato sonrió.

Patricio: Eres una chica muy mala.

Sheyla: Deja de halagarme y cocinemos.

Patricio: ¿Qué vamos a hacer?

Sheyla: Omelets de dulce.

Patricio: ¿Qué?

Sheyla: Necesitamos huevos, carne, lechuga, queso y malvaviscos.

Patricio: Me quieres envenenar.

Sheyla: ¡No seas tonto! Ven, vamos al refrigerador - lo tomé de la mano y caminé con él. Parecíamos una pareja divirtiéndonos. Abrí el refrigerador, saqué todos los ingredientes necesarios e hice que los cargara.

Sheyla: Vamos - toqué su mejilla y nos dirigimos a la mesa.

Pato puso todos los ingredientes.

Patricio: ¿Y ahora?

Sheyla: Tráeme un bol - Me miró y alzó una ceja - ¡Bien! ¡Vamos!


Le tomé la mano y fuimos a un estante, me empiné para tomar el bol pero estaba muy alto. Patricio me tomó de la cintura y me elevó hacia el bol, lo tomé.


Sheyla: ¿No era más fácil que lo bajaras tú?

Patricio: Si - sonrió.

Sheyla: Yo no me enamoro - le dije mirándolo a los ojos.

Patricio: Yo tampoco - me dio un abrazo por detrás y me dio un beso en la mejilla. Me descontroló por completo.

Sheyla: ¿Qué haces? - No podía negarlo, me puso nerviosa ¡No no no! ¡Estaba tratando de comerme el cerebro!

Patricio: ¿Quién es Benjamín?

CHICA MALA - Adaptada ROJASRODIWhere stories live. Discover now