Durmiendo con el enemigo

🌼Capítulo 32🌼

Me tiré nuevamente a sus brazos.

El amor dolía como una estaca al corazón, era un creciente agujero negro en el alma que no dejaba que vivieras sin sacar el dolor, como humo negro por tu boca.

-¿Emma? -dos voces se hicieron presentes ante nosotros.

Keiel y Oliver.

-Creo que los dejaré solos.

Jamie se paró y se fue. A mi izquierda se sentó Oliver y en el otro lado Keiel. Quise explicarles lo que pasaba, pero ellos ya lo sabían todo, Oliver había escuchado y visto todo desde nuestro balcón y llamó a Keiel para venir a hacerme compañía, también le explicó a ella que él es espía.

Le pedí explicaciones de por qué no nos dijo nada y simplemente respondió que hay muchas personas malas allí fuera que harían cualquier cosa por sacarnos información sobre la EIOXA. Y lo último que él quiere es que seamos torturadas por algo tan estúpido como información.

Fue por eso que lo disculpé.

Después de un rato de silencio, Keiel se fue al baño y luego pasaría por refrescos para todos por la cocina.

-Sufrí mucho, ¿sabes?-dijo mi amigo de la nada, captando mi atención -Me ponía muy celoso que con Keiel lo llamaras "La casualidad que entró por tu puerta",- en ese segundo comprendí que hablaba de wintters -porque yo también fui una casualidad, nuestra amistad fue una casualidad, yo también salté tu reja para ponerme a salvo del peligro, y yo, al igual que él, estaba perdidamente enamorado de ti.

Giré mi cabeza bruscamente y lo miré a los ojos, más que sorprendida por su declaración.

Oliver...él gustaba de mí y jamás me di cuenta.

¡Por eso odiaba a Nick! Bueno, los Thinny odian a Nick por muchas razones.

-Emm...Yo jamás me di...emm...es que yo...

-Tranquila, -dijo poniendo su mano en mi rodilla y por primera vez, su tacto me incomodó, pero no quité su mano- usé el término en pasado, tú me gustaBAS, Nick...sigue enamoradísimo de ti y es por eso que entendí que...que yo soy el que está de más. Mucho más lo entendí cuando lo besaste.

-Tú...emm...nos viste -afirmé, ya lo había dicho, pero me incomodaba muchísimo el hecho de imaginarlo a él parado en el balcón y viéndonos.

-Claro que sí.

-¿Pero y qué con Pepper? ¿Nunca te gustó?

-Por supuesto que sí, la amo, pero tú...eras diferente. No tienes por qué sentirte incómoda por mis sentimientos, los controlé y sé lo que sientes por Nick, así que...

-Emm...okey -digo.

Dios, qué incómodo.

-Y por favor, no me digas el típico: "Ay, es que...ya no será como antes", porque juro que...

Okey, cerremos este asunto.

-No iba a decirte eso, Oli, no soy estúpida, me dijiste tus sentimientos y sé que lo que sientes por Pepper te mata, así que si fuera tú...ya iría y le rogaría por un noviazgo.

Me abrazó y yo correspondí a su abrazo.

-Gracias por entender, te quiero.

-Yo muchísimo más, Oli.

-Okey...aquí están los refrescos -Keiel apareció con tres vasos rojos descartables llenos de coca cola -¿Cuándo pensabas decirnos que vas a ser tía?

La miré ceñuda.

-Lo escuché cuando pasaba -explicó.

-Oh bueno...no es tan importan...¿¡A quién engaño!? ¡Estoy muy feliz! -aunque mi voz salió algo cortada.