Cap 22: Conociendo a Damián

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-Quizá sea Damián.- Dijo Edward mientras se acercaba a la puerta para abrirla.

-Dotor.- Grito el pequeño mientras se tiraba a las piernas de Ed para abrazarlas, ante aquella escena sonreí, el niño era tan tierno, todo un amor.

-Damián, cómo estas.- Pregunto mientras lo tomaba en brazos para alzarlo y hacerle jugar en los aires.

-Bien tolo vine a vititar.- Tras esa hermosas palabras rompí a reír y no sabía porque, Edward volteo a verme y yo me calle, que momento para más incómodo.

-Lo siento.- Dije realmente apenada... malditos nervios.

-Que sientes.- Me dijo él algo confundido

-El haberme reído.- Explique.- De verdad lo siento.- Estaba a punto de responderme algo pero el pequeñín le interrumpió, ambos bajamos la mirada hacia él y le oímos preguntar.

-Tien et ella?.- Se oía tan curioso el pequeñín.

- Ella es mi ayudante.- Dijo Edward calmadamente.

-Atudante?.- Replico el pequeño mientras me miraba.

-Si ella me ayudara hoy con los pacientes.- Sonrió con esa media sonrisa tan hermosa que solo el tenia.

-Ohhhh.- Dijo Damián haciendo un gesto graciosito.

-Mucho gusto Damián, me llamo Isabella.- Le regalo una sonrisa y el me la devuelve tiernamente.

-Muto guto Itabella.- Sin pensarlo me arrodille y le di un corto beso en su pequeña mejillita a lo cual el pequeñín sonrió aun más.

-Eta et linda.- Exclamo en dirección a Edward.

-Si ella es hermosa.- Dijo él mientras me miraba con aquellos ojos verdes tan intensos.

-Gracias.- fue lo único que pude decir, claro aparte de sonrojarme con un tomate, díganme quien no lo haría con aquellos ojos esmeralda mirándome como si quisieran devorarme.

-jiji patece tomate.- Dijo el pequeño riendo

-Si pero es un lindo tomate.- Me defendió Edward.- Bueno Damián muéstrame tus pequeñas heridas.-Dijo cambiando de tema por fin, si seguían así terminaría echa más que un tomate.

-Tiii.- Dijo mientras daba saltitos.

-Isabella recuéstalo en la camilla por favor.- Me indico

-Claro.- Respondí y sin más lo recosté en la pequeña camilla que tenía forro de cars.


Edward Pov:

Después de que Bella recostara a Damián en la pequeña camilla, empecé a revisar sus heridas y no encontré nada malo en ellas, estas estaban cicatrizando lo cual significaba que todo iba bien.

-Todo está perfecto, se ve que tu mami hizo un gran trabajo con las recomendaciones.-Exclame alegremente.

-Las seguí todas al pie de la letra.- Dijo Leah quien hasta el momento no se había hecho presente, Dios se habrá dado cuenta que me atrae Bella.

*Con todos los comentarios que hiciste es más que obvio que si Cullen*- Me dijo una vocecita dentro de mi cabeza.

-Hola Leah.- Dije amablemente.- Creo que con dos pomadas mas todo estará mejor.- Tome mi tabla de recetas, escribí el nombre del medicamento, firme y se la entregue. De pronto unas risitas hermosas hicieron que volteara, las risas provenían de Damián, Bella le estaba haciendo cosquillas y el pequeño no paraba de retorcerse de placer. Se veían tan tiernos juntos, apuesto a que Bella sería una gran madre, tras pensar en ello la imagen de una Bella embarazada invadió mi mente, se veía tan hermosa...

-Doctor Cullen!.- Grito Leah sacándome de mis ensoñaciones.

-Lo siento, dígame.- Aun me encontraba algo desorientado.

-Puedo dejar a Damián un momento, iré a comprar sus medicamentos.

-Claro no se preocupe.- Leah salió del consultorio y yo voltee a ver a Bella y Damián.- Así que jugaban a hacerse cosquillas eh.- Dije con un tono gracioso.- Yo también quiero jugar.- Dije como niño chiquito, Bella sonrió, se me acerco y pronto dijo....

-Todos ataquemos al Doctor Cullen.- Sin darme cuenta ellos se me tiraron encima y yo me encontraba tendido en el piso retorciéndome y riéndome descontroladamente.

-Ya basta jajaja por favor jajaja.... Bella jajaja Damian jajaja .-Rogaba yo sin obtener resultados.

-Te ve glatioto dotor.- Decía el pequeño.

-Si se ve gracioso.- Dijo Bella mientras me hacía más cosquillas.

-Basta jajaja Por favor.- Seguía rogando pero ellos no paraban.

-Creo que ya es suficiente Damián.- Dijo al fin Bella.

-Nooo .- Dijo el niño haciendo pucheros

-Siiii.- dijo ella con voz de niña

-Con que me veían gracioso eh,  ahora verán.- amenacé mientras me levantaba del piso... estuve a punto de hacerle cosquillas a Bella cuando Leah apareció en la puerta.

-Ya compre la medicina.- exclamó, pero yo no le tome mucha importancia al contrario voltee a ver a Bella y esta me saco la lengua, ese gesto suyo fue tan infantil, me hizo recordar a Alice de pequeña.- Interrumpí algo.- Pregunto Leah al darse cuenta de que Bella y yo nos comportábamos como dos niños chiquitos.

-Nada importante solo jugábamos a las cosquillas con Damián.

-Tiii fue divetido.- Agrego él.

-Okay amor mucha diversión por hoy, debemos volver a casa.- Dijo Leah

-Nooo.- Dijo el pequeñín mientras hacía tiernos pucheros.

-Siiii.- Dijo su mami de manera tierna

-Buuu.- Dijo Damián.

-Gracias por todo doctor Cullen.- Me dijo su madre

-De nada Leah, sabes que siempre estaré aquí para sevirlos.

-Chau dotor! Chau Itabella!.- Dijo el ultimo nombre de manera tierna.

-Chau Damián.- Me despedí

-Chau guapetón.- Dijo Bella, mientras le daba un beso, wow hasta el recibía besos de Bella y yo no.

-Un gusto Isabella.- Escuche decir a Leah

-Igualmente, cuide mucho del pequeño.- Respondió ella.

-Siempre.- fue lo ultimo que dijo para luego tomar a Damián en brazos y llevárselo fuera de consultorio..

-Yo también quiero un beso como el de Damián.- Ay no, díganme que no dije eso en voz alta.

*Lamento informarte querido amigo que si lo hiciste*

MIERDA.- Me regaño mentalmente, tímidamente alzo la vista y la cara de Bella era todo un poema.


Hola chicas! 

Espero les guste el capitulo de hoy, muchas gracias por los comentarios y votos en los capítulos anteriores, no se olviden de seguir dejando sus opiniones y su apoyo, muchas gracias.

Hasta el siguiente capitulo. 

Need you now  |Terminada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora