5 | Inmune.

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—Érica. ¿Estás mareada? ¿Tienes vértigo? —le preguntó el entrenador.

—El vértigo es una disfunción del sistema vestibular del oído interno. Solamente tiene miedo —explicó Lydia.

—Érica —la llamó Beca con preocupación.

—Estoy bien —contestó Érica en medio de un sollozo, evitando mirar hacia abajo por la altura.

—Entrenador, esto no es seguro. Ella es epiléptica —notificó mi hermana.

— ¿Por qué nadie me dice esas cosas? —se quejó más para sí mismo que para el resto de nosotros—. Érica, estás bien. Déjate caer del muro. Tenemos aquí abajo un colchón para atraparte. Vamos —la incitó, pero ella no cedió, aferrándose fuertemente al muro con miedo.

—Érica, escúchame. —Mi hermana dio un par de pasos adelante, buscando estar más cerca del muro y de ella—. Sé que estás asustada, pero necesito que confíes en mí, ¿sí? Vas a estar bien. Lo prometo. Solo déjate caer.

Érica dudó un par de segundos más pero al final se soltó del muro hasta que cayó en la colchoneta. Mi hermana se acercó y juntas se deshicieron del arnés.

—Estás en el suelo. Eso es, muy bien. Tranquila —dijo el entrenador parado a un lado de ellas, tratando de tranquilizarla.

De inmediato se escucharon un montón de risas molestas que me hicieron sentir mal por ella. Mi hermana no tardó en lanzarles una mala mirada para luego marcharse del gimnasio con ella, quien estaba a punto de llorar. Las seguí con la mirada y pude ver a Jackson lanzarle una mirada asesina a las personas cerca de ellas, haciendo que casi de inmediato cerraran la boca. Oí a Lydia resoplar y me reí, haciendo una mueca antes de fingir no haber notado nada.

La clase terminó no mucho después de eso y me alejé de Scott para ir a los vestidores con Allison y Lydia. Cambié mi ropa mientras conversaba con ellas de algo casual que gracias a Dios no tenía nada que ver con Jackson. Busqué a mi hermana con la mirada cuando íbamos saliendo, pero no la encontré por ningún lado. Pensé que tal vez se fue antes con Érica y no le di muchas vueltas. De repente, Allison salió corriendo detrás de Scott cuando lo vimos correr de regreso al gimnasio y todos fuimos detrás de ellos por curiosidad, viéndolo llegar a tiempo para atrapar a Érica cuando caía al suelo desde el muro. Mi hermana estaba a un costado, luciendo asustada por el casi accidente.

—Ponla de costado. De costado —pidió Beca ansiosa, arrodillándose junto a él sobre el suelo.

Scott obedeció sin rechistar, colocándola de costado y dejándola aferrarse a su mano mientras su cuerpo sufría sacudidas violentas. Mi hermana se apresuró a cubrir con su cuerpo el de Érica, evitando las miradas burlonas de la mayoría.

— ¿Cómo supiste? —le preguntó Allison a Scott con sorpresa.

—Lo sentí —respondió Scott bastante confundido igual que nosotros.

🐾

—Iré a pedir las pizzas. Tú espera aquí —me indicó Kay, mirándome mientras bajaba del auto una vez que estuvimos frente a su pizzería favorita de la ciudad. Ella siempre había amado la pizza desde que podía recordar y siempre fue la partidaria de que mis padres nos dejaran cenar pizza cuando niños.

Asentí y la vi caminar hacia la entrada del establecimiento. Bufé y me acomodé sobre mi asiento, pensando en todo lo que sucedió hoy. Primero, Érica fue llevada al hospital para una revisión médica luego de que su ataque se detuviera. Segundo, una vez que la escuela se acabó, Jackson se ofreció a llevar a mi hermana al hospital para ver a Érica y Beca aceptó, así que tuve que aguantar un rato a Lydia quejándose sobre eso antes de poder huir hasta el Jeep y regresar a casa con Stiles, quien hace como una hora avisó que hoy cenaría en la estación con papá, y eso nos dejó a Kay a mí solas en casa.

trust | #2 | teen wolfOù les histoires vivent. Découvrez maintenant