𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔 & 𝑷𝒓𝒆𝒇𝒆𝒓𝒆𝒏𝒄𝒆𝒔 || 𝑰𝑻&𝑺𝑻

10-Jack Dylan Grazer

Estaba en un mercado que estaba cerca de mi casa, comprando las cosas que me pidió mi mamá. Estaba con las peores pintas posible, mi cara de dormida y de mal humor estaba presentes, tenía ojeras que llegaban hasta el piso, de paso también estaba un poco despeinada. Tenia puesto el primer pantalón sucio que me encontré por ahí, además, agarre un buzo con una mancha de lavandina.

Vagamente camine por los pasillos, agarrando las cosas que tenía que comprar. Fui a la sección de higiene personal, mi mamá necesitaba toallas sanitarias. Y ahí es donde lo veo, estaba viendo indeciso los tampones. Con todos los nervios, cruzo ese pasillo estrecho. Me detengo en la parte de toallas sanitaria, y como soy la mala suerte andante, las tollas que usa mi mamá estaban al lado de los tampones que Jack miraba. Las agarre rápidamente, recibiendo una mirada de parte de él. Trate de irme lo más rápido posible.

—Em... Hey—Me llamo Jack antes de que me vaya de aquel pasillo. Me di la vuelta—Te quería preguntar algo. Yo no soy bueno en estas cosas y pensé que tal vez tú, al ser mujer, me podrías ayudar a elegir tampones para mi novia. —Se veía tan tierno.

—Oh, claro—Le respondí. Mi poco buen humor y mis nervios habían aumentado ¡Jack Dylan Grazer me estaba pidiendo ayuda con los tampones! Esto no pasa todos los días— ¿Qué medida usa tu novia?—Él me miro raro—Bueno, esto va a ser más difícil de lo que creí—Murmure para mí misma.

— ¿Por qué?—Pregunta Jack, sin todavía entender.

—No te voy a explicar cómo una mujer cambia la medida del tampón—Solté rápido—Dale unas toallas sanitarias y listo.

—Es que ella me pidió tampones, y, bueno, es un poco caprichosa. Y más en los días rojos.

—Okay—Agarre unos de medida media—Dale estos, si no son de su medida, tendrás que devolver.

—Muchas gracias—Dijo entusiasmadamente. Iba a decirle algo pero aparece Ellie, haciendo que me asuste.

— ¡Jack! Te dije que compres cosas, no que hables con desconocidas—La mire mal, me di la vuelta y fui para la caja pagar las cosas. No tenía ganas de discutir, ya suficiente con que mi mamá me levanto a los gritos para que le compre cosas. (PD: Mamá, sigo enojada por eso).

Había pasado como dos meses de esa situación (Al día de hoy sigo golpeándome mentalmente por no haberle pedido una foto) y había pasado un mes desde que se anunció que Jack y Ellie terminaron.

Como un día normal, fui a caminar. Mentira, mi mamá me obligo a salir de mi guarida para que vea un poco de luz natural. Camine hasta el parque, me senté bajo la sombra de un árbol, comencé a mirar como los niños jugaban o como la gente caminaba. Al pasar quince minutos, me levante, iba a regresar a mi casa. En mitad del parque, veo en frente mío a Jack. Se empezó a acercar a mí, a lo que me di vuelta para ver si había alguien atrás mío. Efectivamente, había un mini grupo de fans. Seguí mi camino.

Ya había caminado unas cuadras, cuando siento una mano en mi hombro haciendo que me sobresalte. Esa mano era de Jack. Apenas lo mire a los ojos, mis nervios aparecieron. Él me sonrió, haciendo que casi me caiga de culo mentalmente.

—Hola de nuevo—Me estaba muriendo por adentro de los nervios— ¿Me podrías decir en donde se encuentra el Starbucks más cercano? Es que tengo invitar a mi futura novia. —"Ah, mira, me interesa bastante" pensé sarcásticamente.

—Claro, seguís cuatro cuadras derecho y giras a la izquierda—Dije dándole indicaciones. Me sentía El Mapa de Dora, la Exploradora.

— ¿Me puedes acompañar? Es que no me quiero perder—Dijo algo tímido. Ahora estaba muriendo de ternura.

—Bueno, sígueme—Le dije con una sonrisa.

Estuvimos un rato charlando y llegamos a su destino. Me dolía dejarlo ahí con una chica ya que en gran parte es mi crush pero como mi mala suerte la transporto a todos lados, antes de cagarla me quedo callada y no opino del tema.

—Y dime, ¿Cómo te llamas?—Me dice Jack divertidamente.

—Me llamo _____ _____, Jack—Le respondí de la misma manera.

—Veo que me conoce, señorita _____.

—Su actuación ha estado buena en aquella película, señor Grazer. Ya llegamos a su destino, señor. Espero que haya disfrutado su viaje con esta compañía y que vuelvas a elegirnos para otro viaje turístico—Él solo se rió.

—Te invito un café.

— ¿No ibas a invitar a tu futura novia?—Pregunte extrañada.

—Es lo que estoy haciendo—Me sonrió más grande y me agarro de la mano para entrar. En ese momento me di cuenta que me estaba ligando discretamente. No sabía si reír o llorar de la emoción...

[Editado por falta de guiones de diálogos]