04.

4.2K 325 265
                                    

────────────────────────────────

Agh...me duelen los ojos.

Algo me estaba incomodando bastante. Comencé a abrir mis párpados lentamente, -cosa que me resultó bastante difícil ya que la luz brillante de la mañana me daba en toda la maldita cara- pestañeé varias veces y cubrí mi rostro, de esa maldita luz, con la palma de mi mano.

Siempre que despierto no sé ni donde estoy, tengo esa capacidad de dormir en cualquier lado, de cualquier forma y en cualquier situación. He llegado a dormir por 24 horas seguidas, y cuando me despierto, lo vuelvo a hacer porque: "dormir mucho es agotador". La gente dice que tengo un problema, pero no me importa; amo dormir, dormir es mi vida.

Cuando por fin logré acostumbrar la vista, -luego de bostezar y refregarme los ojos como 100 veces- mi cerebro comenzó a darse cuenta de que ese no era ni mi apartamento, ni mi sofá, ni mi televisor.
Los recuerdos me llegaban uno por uno a paso tortuga. Estaba haciendo un esfuerzo inimaginable para recordarlo todo, hasta que se escuchó un sonido inaguantable: un ronquido. Jin, seguía durmiendo profundamente como un oso; estaba todo despatarrado, tenía su boca abierta y su mano aún dentro del paquete de patatas sobre su pecho.

— ¡Jin, despiertaaaa...! — le grité, alargando la a, mientras lo sacudía de los hombros — ¡Dale rubia hueca! — continúe sacudiéndolo, pero aún así no despegó ni un ojo — Bien, no me queda de otra. —le di una "no tan fuerte" bofetada.

Abrió sus ojos de golpe, con una mirada entre asustada y sorprendida. Al parecer tampoco sabía dónde se encontraba ni que estaba pasando.

— ¡¿Qué te pasa idiota?! — gritó mientras se refregaba la mejilla en donde le había dado el golpe.

— Intenté de todo para despertarte, pero aún así no lo hiciste.

Se puso de pie tirando el paquete de patatas al suelo, se agachó de golpe a levantarlo mientras hacía una cara de tristeza. — Perdón, tú no tienes la culpa. — fingía llorar mientras abrazaba la bolsa y le acariciaba.

Di vuelta mis ojos. Si yo amo dormir, se podría decir, que Jin ama comer.

— ¿Y Yoongi? — me preguntó mientras mordía una patata — ¿que hicieron cuando me dormí? Pilluelos — puso una cara entre pervertida y pícara.

Continúe el esfuerzo de recordar. -ya que había sido interrumpida con un ronquido- Lo que había pasado en la noche, definitivamente no podía contárselo. Ya sé que lo que hicimos no es nada grave, -dormir- pero aún así no puedo. Sabiendo como es Jin, iba a molestarme y a tratar de emparejarme con mi vecino 24/7. No puedo, definitivamente NO PUEDO.

— Nada, hasta donde recuerdo es que estábamos viendo la película y termine cayendo dormida.        — metí mi mano dentro del paquete de papas — Por cierto, la película que elegiste era una asco.

— Pensé que iba a ser más entretenida. — dijo con su boca llena y sacó su celular — te prometo que a la próxima la eliges.

No dije nada, sólo le dediqué una media sonrisa. Realmente espero que no haya una segunda, ni tercera vez.
Guardé silencio mientras miraba por la ventana inmersa en mis pensamientos, ¿qué clase de persona deja a sus "invitados" solos y en su propia casa? ¿a dónde habrá ido qué era tan urgente?. Un picoteo en mi hombro comenzó a molestarme, Jin, estaba tratando de llamar mi atención tocándome el hombro cada vez más fuerte.

Neighbors  ☾ YoongiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora