Durmiendo con el enemigo

🌼Capítulo 5🌼

La miré un momento.

No tenía nada más interesante que hacer en la noche, ¿así que por qué no escabullirse a la fiesta?
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-¿En qué me necesitan? -preguntó Oliver.

-Necesitamos que te hagas pasar por mí y no salgas del cuarto, ¿comprendes?

Los tres estábamos en mi habitación. Keiel ya estaba cambiada con su vestido puesto, maquillada y peinada. Yo todavía sigo en pijama.

-Facilícimo- dijo.

Levanté las cejas.

-Perfecto.

Se retiró para que pueda cambiarme. Me puse el vestido oscuro y...

-No, no y no, no irás con esa cosa azul- dijo mi amiga.

-¿Prefieres que vaya desnuda?

-Emma, el vestido verde agua con lentejuelas te queda precioso, además te queda ajustado al cuerpo y eso te luce la figura, te queda divino con unos zapatos color crema y un buen peinado.

-Pero mi piel es...

-Hermosa, pongas lo que le pongas a tu piel le va a quedar DI-VI-NA- dijo haciendo incapié en la última palabra.

Me puse el otro vestido y los zapatos claros, ella me maquilló ya que yo soy pésima para esa actividad y me hizo un rodete flojo con unos mechones al costado de mi perfil.

-Wooww, las dos están muy guapas.- confirmó Oliver entrando a la habitación- Creo que es la primera vez que veo a Emma debajo de un vestido.

-¡Son las 8 tenemos que irnos!- apura Keiel.

Mis padres habían salido a cenar con Theodoro. Volverán tarde pero por las dudas dejo a Oliver en casa para cuidarla y cubrirme cuando ellos lleguen.

Keiel, Oliver y yo bajamos las escaleras y nos encontramos con un Jamie vestido con un esmoquin. ¿Él también va a la fiesta?, cierto, él también es de quinto y es popular.

-¿Qué haces vestida así? Estás castigada, no puedes salir- me dice Jamie.

-¿Sabes las veces que te cubrí cuando saliste? Ahora es tu turno.

-Te vas a arrepentir cuando entres a esa fiesta- me dijo él.

Suena el timbre y mi mellizo va a atender y allí está el hermano mayor de Oliver,
Alexander Thiny.

Se estrechan fuertemente las manos y se palmean las espaldas. Ni siquiera pone un pie en la casa y se queda mirándome atónito.

-Woooww, Jay, ¿Ella es tu novia?

Oliver y Keiel se ríen.

-Es mi melliza, idiota.

-Es la criatura más hermosa que he visto en toda mi vida.

Si no fuera por el maquillaje mi cara estaría toda roja.

-Alex, ES MI HERMANA. No te dejo tocarla ni con la uña del dedo meñique.

-Mmm, eso está por verse. No sabía que tenías hermana, mucho menos que fueran mellizos. ¿Tan ignorante soy que no conozco a tu familia?

-Justamente por esa razón no te dejé conocer a mi hermana.

Oliver subió a mi cuarto.

Alexander nos llevó en su auto rojo descapotable.

-Seguro que no te importará ser mi acompañante, ¿no Jamie? -le dice Keiel.