반말 (Sin honoríficos) - Jinkook

XII

Capítulo especial - 4902 palabras.

Feliz navidad ♡

PDV DE SJ:

Un par de semanas pasaron luego del vídeo reacción que habíamos hecho y yo estaba totalmente indefenso en cercanía a Jungkook. La decepción invadía mi ser, dado que me había masturbado pensando en él. Simplemente no podía mirarlo a los ojos. Recuerdos llenos de vergüenza venían a mi mente cuando intentaba poner la cabeza en alto. Para mi suerte, ni siquiera lo había notado. O al menos eso creía yo.

Luego de que el álbum hubiese salido y las presentaciones hubieron terminado, teníamos unos días para descansar.

-¡Hyung!- podía reconocer la voz de Tae desde la sala de estar - Hazme algo de comer ¡jebal, jebal, jebal!* - me rogó.

-Aish... jinjja- me quejé - Creí que yo también podría relajarme- suspiré, finalmente aceptando que nunca tendría un día libre mientras conviviese con todos ellos. -Araso, ¿alguien más? - pregunté, inútilmente esperanzado en que nadie más estuviese hambriento. Pero supe que eso no era posible.

-¡Yo! - la voz chillona de Jiminnie vino del mismo lugar que la de Tae hacía unos segundos.

-Yo también- un Yoongi vago murmuró. Hubiese sido imposible escucharlo si hubiera estado en otra habitación.

-¡Ya!- Joonie regañó a los menores - Dejen a hyung descansar. Él está exhausto, como todos ustedes - vino a rescatarme.

-Gracias, Joonie. Está bien. Cocinar algo rápido no me hará daño.

-Bueno, déjame ayudarte, hyung- se ofreció. Como dije antes, él era torpe y usualmente no me molestaba si rompía un par de platos pero con todo lo que estaba pasando, no quería levantar sospechas.

-No, está bien. Yo puedo sólo - me negué suavemente. Además, Joonie haría estallar toda la casa tan sólo abriendo el grifo para lavar una taza.

Fui a la cocina y comencé a buscar los ingredientes. Desafortunadamente (o mejor, para mi suerte) no había nada. Abrí la última puerta de las alacenas donde guardamos la comida instantánea y solamente encontré unos fideos. Si se los ofrecía, sin kimchi* y sin arroz, ellos terminarían por cenarme a mí.

-Muchachos, literalmente no hay nada para hacer una comida medio decente. Sólo unos fideos instantáneos y de todos modos no alcanza para todos. ¿Quieren que ordene unas pizzas? - pregunté, mis ojos todavía en las alacenas, asustado de sus miradas hambrientas.

-¡Vayamos a comer afuera!- Hoseok propuso -Preparémonos y mañana vamos a hacer las compras.

Silenciosamente agradecí a Hoseok por la propuesta. Sin embargo, no estaba hambriento, así que rechacé ir con ellos. Además de no tener hambre, el solo pensar en comer afuera con los muchachos y Kookie estando allí, no me agradaba. Por lo menos no hasta saber que era lo que sientía en verdad por Joonie y Kookie. Yo sólo quería la casa para mí por una noche y ser capaz de relajarme y reflexionar un poco.

-Hyung, ¿no te vas a preparar?- Yoongi preguntó, confundido. Soy conocido por mi apetito en esta banda, no ir a comer, era como si Yoongi no quisiera dormir. Totalmente raro pero intenté de que lo dejara pasar.

-No, Yoongi, voy directo a la cama, estoy muy cansado - respondí, fingiendo una voz sin fuerzas.

-Está bien, hyung. Me aseguraré de que te traigan algo para después - me prometió.

-Sí, eso sería genial. Gracias - terminé de decir mientras marchaba para mi habitación.

Media hora había pasado y yo estaba escuchando música con los audífonos puestos. No eran míos, eran de Joonie. Los míos se habían roto antes de una presentación mientras practicaba una de nuestras coreografías con ellos puestos y cayeron al piso. Sí, no era de los audífonos similares a pequeños tapones y sabía que no debía bailar con ellos pero lo hice de todas formas. Mala elección. Por lo que me vi obligado a pedir prestados los de alguien más. Los de Yoongi eran preciados para él, así que no. Taetae siempre los estaba usando, así que no. Hoseok no tenía audífonos grande y a los pequeños los había perdido, otro no. Y era muy cobarde para pedirle a Kookie los de él. Los de Jimin tampoco tenía permitido tocarlos, también no. Y mi último recurso eran los de Joonie, así que fui a por esos.