- Debe ser realmente hermosa para poder robar el corazón de mi pequeño - bromeó.

- Sí, es el ser humano más majestuoso del mundo- suspiré, pensando en mi hyung. Espera un momento, ¡¿qué?! ¿Qué estoy diciendo? Él era atractivo, sí, pero no más que eso. Sólo un muchacho muy guapo. Por amor a Dios, Jungkook ¡detente ya!

-¿Quién es?- preguntó, sus ojos puestos en los míos, esperando mi respuesta. -¿Es de algún grupo de chicas? O famosa ¿tal vez?

-Sí- Por fin pude decir algo. - Su nombre es....- Su nombre es... - IU - Kim Seokjin. De acuerdo, yo era el único que sabía que en realidad no estaba pensando en ella. Pero ella era bonita, por lo que no estaba mintiendo después de todo.

-¡Ah! - mi papá se veía satisfecho con la muchacha que había elegido - Sabía que tenía que ser alguien hipnotizante. Ella es hermosa, hijo. Buena elección - me felicitó - pero no le digas a tu madre que acabo de decir eso, me matará - ambos nos reímos entre dientes.

- De acuerdo, appa. No le diré a nadie si tu tampoco lo haces, ¿trato hecho? - lo reté.

-Hecho. - terminó. A decir verdad, no había mentido pero por alguna razón me sentía culpable.

A la mañana siguiente, me desperté con el dulce y suave olor del desayuno de mi mamá.

- Eomma, ¡huele delicioso! - le dije mientras me frotaba el estómago, éste ya reclamando la deliciosa cocina de mi mamá.

- Buenos días, adeul*. Ven y siéntate, te serviré enseguida - me ordenó y yo hice lo que debía

Luego de haber terminado con el exquisito kimbab que habíamos hecho el día anterior y algunos aperitivos caseros (para ser honesto, no los comí, los tragué), recibí un mensaje de texto de Jimin diciendo que estaba a una cuadra de mi casa. Rápidamente ayudé a mi madre a levantar los platos y me dirigí a las escaleras para cambiarme. Unos minutos después, el timbre sonó y yo corrí hacia la puerta, encontrando un Jimin sonriente al otro lado.

-¡Nos vemos esta noche! - grité, ansioso de pasar el día entero con mi mejor amigo.

-¡Cuídense, niños y no lleguen tarde a la cena! - mi eomma nos adviritó.

Asentí y me dirigí afuera. Una vez en el patio delantero, Jimin saltó a mis hombros. 

-¡¿Estás listo?! - gritó, casi rompiendo mi tímpano - ¡Tenemos un largo día hoy, Kookie!

- Aish... - me quejé de su manera de actuar tan infantil. Todavía me tenía atónito qué tanto se parecía a un infante sabiendo que era más grande que yo - Sí, ¡lo estoy! ¡Gabsida! - dije mientras me lo sacaba de encima.

Fuimos de compras. Pensamos que sólo sería justo comprarles regalos a nuestros hyungs, dado que nosotros dejamos de ensayar y nos quedamos una semana con nuestras familias, mientras ellos seguían practicando. Nos fue muy difícil encontrar un regalo para Namjoon y para Hoseok, pero eventualmente les encontramos objetos perfectos.

Compramos un Kumamon de felpa tamaño real para Yoongi, visto que amaba cualquier cosa que viniera de ese personaje.

Compramos un Kumamon de felpa tamaño real para Yoongi, visto que amaba cualquier cosa que viniera de ese personaje

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
반말 (Sin honoríficos) - JinkookWhere stories live. Discover now