Fobias [EunHae + 18]

18. Un nuevo logro.

POV Compartido

Siento la lluvia estrellándose con fuerza contra la ventana y contra toda la casa. El impacto del agua logró despertarme, pero aún no pienso despertarte a ti. Quiero disfrutar de sentirte cerca, la cama de mi primo se siente bastante confortable, aunque creo que esa sensación tan agradable es porque estás tú conmigo, ya que si bien siempre se siente increíble estar bajo las sábanas cuando llueve, he descubierto que en tu presencia es aún más memorable, como si al tenerte tan cerca y entrelazado a mí estuviera sosteniendo mi pequeño tesoro, tú eres lo más preciado que tengo y en cada pequeña situación vuelvo a confirmarlo. Creo que estoy muy lejos de llegar a acostumbrarme a la felicidad y el orgullo que me embargan porque eres mi pareja, siento ganas de presumir de ti con todo el que quiera oírme y es muy poco probable que pare si no me callan. Quizá podría decirse que mi amor por ti hace que te idealice, pero estoy seguro que todo quien te rodea concuerda con que eres una persona asombrosa y admirable por no rendirte a pesar de tus fobias y de haber perdido a tu madre.

Te acerco más, aprisionándote con cariño, lo que provoca que tu rostro quede hundido en mi cuello y tu pelo y tu nariz me hagan cosquillas. ¡Dios! parece que esa parte de mi anatomía hubiera sido creada para que tu te acomodes ahí, calzas perfectamente y sonrío al mismo tiempo en el que mi nariz queda idiotizada con el aroma de tu cabello y ese algo característico tuyo. ¿Es posible amar de esta manera? Apenas con este contacto tan sencillo mi corazón se siente explotar de dicha. Incluso aunque quiera contenerme no puedo, el amor que siento por ti se desborda y no duda en salir a la superficie, necesito demostrártelo y dejo besos casi imperceptibles en tu cabello. Te remueves pero sin dar muestra de que has abandonado a Morfeo. Me conformo con acariciar tu espalda en círculos, y con mas delicadeza aún, tu pelo, creo que tu no eres el único que disfruta cuando recibes estas atenciones, a mi me contenta y relaja tanto como a ti proporcionarlas, y más aún porque sé que es algo que te gusta recibir, desde el primer momento en que nos conocimos he querido complacerte, no sólo porque fui criado así, sino porque había algo extra que me empujaba a querer hacerlo más que nunca, quizá mi atracción e interés por ti siempre fue mucho más fuerte de lo que había imaginado y ahora parece que nunca es suficiente, que siempre quiero y necesito hacer más cosas por y para tu bienestar y felicidad. Sé que no es nada del otro mundo, yo diría que la mayoría de la gente enamorada siente estos impulsos, pero me gusta pensar que nuestro amor no es común, no sé si será muy creído de mi parte, no obstante yo diría que nuestro amor raya en lo inusual y extraordinario, aunque claro, es una opinión muy poca objetiva y aún así no pienso cambiarla.

—¿Hyukkie...? ¿Qué hora es?

Tu voz somnolienta, amortiguada por mi cuello, me trae de vuelta a la realidad. Estaba lejos, en mi propio mundo pensando en nosotros. Mis caricias deben haberte despertado o tal vez la lluvia. Mi tía estaba en lo cierto, comenzó a lloviznar cuando terminábamos de almorzar y ahora se desato el aguacero con ganas.