outlasted spirit ⋄ stiles stilinski // 2

1. "Alternación"

La expectativa podía sentirse en cada partícula del aire. Los ojos de Stiles, Allison y Scott fueron desde el cuerpo de Ariel, a la figura entre las sombras de Derek. Su forma ya no mostraba nada sobrenatural. A decir verdad, no mostraba nada más que una expresión contrariada. Alzó su mano, pasando el dorso por su boca manchada, para luego observarla.

-¿Qué sucedió? -La voz intrigada de Scott fue la primera en romper el silencio.

Derek recobró la compostura velozmente. -Nada.

En cuanto regresó de la oscuridad de entre los árboles, nada en él parecía extraño. Sin embargo Stiles notó que, en una fracción de segundo, sus ojos desmintieron lo que acababa de decir.

-Hay que salir de aquí. -Derek volvió a hablar. -Si ella sobrevive, no es el mejor lugar para que despierte. -Su mirada severa se dirigió a Allison. -Mucho menos con cazadores.

-¡Ella debería ir al hospital! -Gritó Allison, acercándose a él, pero Scott la detuvo a tiempo.

-¿Y cómo demonios vas a explicar esto a unos simples paramédicos? -Rugió Derek en respuesta, señalando con su brazo toda la escena. -¿Cómo vas a explicar su herida sanando en menos de veinticuatro horas?

Él tenía razón, y los tres lo sabían. Stiles bajó su mirada hacia el cuerpo inconsciente de Ariel. Ahora su vestido tenía una rasgadura nueva, cerca de donde permanecía la flecha. La sangre parecía haber dejado de salir, pero ahora se veía aún más pálida, y su respiración continuaba saliendo irregularmente de sus labios azules por el frío. Un fuerte trueno resonó violentamente, la tormenta amenazando con empeorar de un momento a otro. Scott se acercó hacia Stiles.

-¿A dónde vamos a llevarla?

Una ráfaga de viento helado los envolvió.

-A su casa, supongo.

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Era algo extraño, estar en la casa de alguien, sin su dueño presente. Como si, de algún modo, el lugar no les diese la bienvenida. Derek recostó el cuerpo aún inconsciente de Ariel sobre el sillón del living. Su piel no se veía tan pálida en la luz cálida de la casa, y los largos mechones de su pelo oscurecidos por el agua de la lluvia ocultaban parcialmente su rostro.

También era extraño, para Stiles, el simple hecho de estar allí. Su mente todavía parecía desconectada del resto del mundo y de sí mismo. Se encontraba en el punto más alejado de la habitación, y desde donde estaba, Ariel casi parecía estar simplemente dormida. Exceptuando por la grotesca visión de la flecha que permanecía allí.

Las manos de Derek se cerraron sobre el metal oscuro, y antes de que alguien se pudiese oponer, la arrancó de forma limpia y rápida.

-Busquen alrededor de la casa. Necesitamos un botiquín de primeros auxilios.

No fue difícil encontrar uno, en el baño del segundo piso. Scott lo bajó de uno de los gabinetes blancos de la pared y lo revisó. Tenía todo lo que un botiquín ordinario contendría.

-¿Cómo demonios hemos llegado a esto? -Preguntó Stiles, frotando ambas manos sobre su rostro. Su voz sonaba amortiguada. -¿Cómo demonios...?

-Va a estar bien, Stiles. -Le interrumpió él, antes de que pudiera decir algo más. -Va a sanar.

Stiles cerró fuertemente los ojos, apoyando su espalda sobre el marco de la puerta. -¿Y qué si no lo hace? ¿Huh? Y qué si... si su cuerpo...

-Nosotros la conocemos. Sabemos que es fuerte, y probablemente más ruda que nosotros dos juntos. -Se encogió de hombros, esbozando media sonrisa. -Quiero decir, ¿La has visto allí en el bosque? Le disparó a Peter sin siquiera parpadear. Ella va sobrevivir.