-ιиvιsιblє [Justin & tú] TERMINADA

>>Capitulo 24

-______ - le susurré en el oído abrazandola desde atrás por la cintura una vez que bajé las escaleras y me dirigí a la cocina. Jake me dio una mirada y, negando con la cabeza, salió de la cocina.

-¿Qué quieres? - dijo ella, sin dirigirme una mirada y cogiendo los platos y basos de encima de la encimera.

-Perdóname.

Ella suspirando dejando el último baso sobre la encimera. Se giró para mirarme a los ojos, estaba más seria de lo normal.

-Me has hecho daño – me dijo.

Yo me golpeé mentalmente, llamándome de todo menos bonito.

-Lo sé, y lo siento.

-¿Por qué te has puesto así por una chorrada de ese calibre?

-No lo sé, simplemente -suspiré-. No lo sé.

-No quiero que siempre que haga algo, sea la tontería que sea, te pongas así y digas cosas que me afectan tanto.

-No quería decir eso, por favor, perdóname.

Nos separamos un poco y nos miramos a los ojos, ______ abrió la boca pero la volvió a cerrar pensando en lo que estuvo a punto de decir. La miré impaciente cuando volvió a abrir la boca para decir algo.

-Vamos a desayunar – susurró bajando la cabeza.

Mi expresión se volvió impasable, la solté y la seguí hasta el comedor donde nos esperaba un paciente Jake. No me miró, simplemente se puso en pie cuando nos sentamos ______ y yo. Cogió una paleta, poniendo unas torradas en el plato de ______ junto un zumo de naranja.

-Si quieres más dilo, hay más en la cocina -le dijo.

______ asintió con la cabeza. Jake me puso una porción a mi también pero no dijo nada, ni si quiera me dirigió una mirada. Me removí incomodo en mi asiento. Estaba seguro que sería un desayuno muy largo.

* * *

Como dije, fue un desayuno largo y incomodo, muy incomodo. Jake estaba lavando los platos en la cocina y ______ se dirigía al sofá. Me senté a su lado y ella se estremeció.

-______- dije, poniendo una mano en su mejilla.

-Justin – apartó su cara-. Por favor...

-Escuchame – la interrumpí.

Ella me miró y asintió, cediendome la palabra.

-Lo siento, ¿vale?. Se que lo que te dije te afectó porque, bueno a mi también me habría afectado. Por favor, perdóname mi amor. No sabes lo arrepentido que estoy de mis palabras. No quiero pasar ni un segundo más así.

-Justin...

-No -la volví a interrumpir-. Quiero pasar esta noche contigo, no alejado de ti.

-Justin...

-Perdoname, por favor. Dime algo.

-Justin...

-_____...

-¡Justin!- me interrumpió.

Enseguida cerré mi boca mir´andola serio, como un niño pequeño al que acaban de regañar.

-Tranquilizate, por Dios. Ni siquiera me has dejado decir nada más que tu nombre -suspiró.

-Lo siento-dije.

-Basta de lo siento. Te perdono, Justin. Ya esta, no hace falta formar un drama tan grande.

-Es que tenía miedo.

-¿Miedo de qué?

-De que no volvieras a hablarme.

Ella soltó una risita y me acarició el pelo.

-La próxima vez, piensa las cosas antes de decirlas, ¿entendido?

Yo asentí la cabeza sonriendo alegre. Con un movimiento rápido la cogí de la piernas y la puse sobre las mías. ______ comenzó a reír y yo la miraba desde abajo.

-No soy un bebé.

-Necesito saber que estamos bien.

-¿Como quieres que te demuestre que te perdono? - preguntó en tono de burla.

-Dime que me amas – le dije mirándola a los ojos.

______ frunció el ceño con confusión, pero no dijo nada, lo contrario, ni siquiera soltó un suspiro ni nada. Después de unos minutos llegué a la conclusión de que no lo diría.

-O nada, también me sirve – susurré con decepción en la voz, bajando la cabeza y aflojando mi agarre alrededor de la cintura.

Unos pequeños y finos dedos me levantaron la cabeza por la barbilla y antes de que pudiera decir nada unos labios se había posado suavemente sobre los míos.

-Te amo – susurró sobre mis labios.