☣Dulce Veneno☣ [RiLen] ♢Segunda parte de "La Chica Contaminada"♢

¿Sinceridad?

Lo que nos decía Miku, más que aclarar nuestros pensamientos, los confundía; aunque por supuesto, no dejaba de desconfiar de la chica... Incluso si su expresión parecía sincera:

-Miku... Si lo que dices es verdad... ¿Por qué tienes una manta cubriéndote?- suspiré con confusión. -Que yo recuerde, saliste de la cabaña sin nada-
-¿No la trajeron ustedes?- preguntó la chica, mirándome a los ojos.

Pero aquella expresión, en ese momento se me hacía tan desagradable; como si fingiera ser inocente nuevamente.

-No Miku... Yo te encontré así- le respondió Gumo, restándole importancia al asunto... Algo que me enojó todavía más.

-Qué extraño...- susurró la de cabello turquesa. Ésta fue la gota que terminó por derramar el vaso.

-¡¿Qué extraño?! ¡¿Ahora vas a simular que no hiciste nada?!... Mira, no quiero sonar como Gumi, pero ¡Basta de mentiras!- exclamé, con una actitud más que molesta, sin embargo, en ese momento, Gumo se acercó a Miku.

-¡No le hables así! Estoy de acuerdo que todos debemos decir la verdad, pero si nos tratamos tan mal entre nosotros, la situación sólo empeorará- comentó el peliverde.
Algo muy razonable... Raro en su comportamiento.

-Bueno... Si de verdad quieren saber...- masculló la chica, con la mirada baja. -Lo haré, les diré todo...- entonces, ella comenzó a decirnos que era lo que pasó:

Mi amo antes trabajaba con otra persona, y tenían a dos sujetos de prueba muy similares entre sí, tanto en el físico como en las susceptibilidades... Por eso, los escogieron para desarrollar en ellos la enfermedad.
Sin embargo, la otra persona comenzó a desviarse del objetivo principal, y varias dificultades se presentaron en el proyecto.
Al final, mi amo y la otra persona disolvieron su sociedad, pero ambos siguieron trabajando en la bacteria. Cada quien por su parte, claro.
Mi amo por su parte, tomó a otros dos hermanos e intentó hacer lo mismo. Pero para su mala suerte, uno de ellos había desarrollado una inmunidad a la enfermedad. Entonces, mi amo tuvo que buscar a otra persona... Para comparar los resultados en hombre y mujer.
Y esa obviamente fui yo: rescatada de un destino "cruel" cuando mi amo hizo un trato con una prostituta, el cual consistía en que cuando yo cumpliera dos años, él me llevaría a su laboratorio.
Siguiendo sus órdenes, fui trasladada al instituto Rambura para aparentar ser alguien normal... Y posteriormente afectar al instituto. Hasta que llegó Rin.

Finalmente, lo que pasó esa noche en el instituto, fue que Rin tuvo una batalla conmigo, algo a lo que ambas estábamos preparadas. Pero ella ganó, así que como consecuencia, exterminó la bacteria de mi interior. Eliminó la competencia.

Después de su explicación, mis dudas no habían sido resueltas, así que tuve que hablar:

-Entonces, ¿Cuál es tu relación con tu "amo" actualmente?- cuestioné de forma directa. La verdad era que no me interesaba mucho su pasado, puesto que podía ser una farsa, y las otras cosas de las que había hablado, ya las sabía.

//Vean sus ojos... Sus beios ojos con pupilas dilatadas 🌚

-Ninguna... No quiero volver a ese lugar tan malo. Y tampoco quiero volver a ver a ese hombre. Tan sólo imaginarme su cabello rojizo hace que se me erice la piel...- comentó Miku, cruzándose de brazos entre escalofríos.

-Tranquila Miku, ahora nadie podrá hacerte daño. Y también, con la información que nos dijiste, podremos hacer más para resolver el problema- dijo Gumo con tranquilidad, acariciando la cabeza de la chica.

-En fin... Ahora deberíamos volver a la cabaña... Este lugar no es especialmente agradable o acogedor- sugerí, acercándome a la entrada de la cueva; pero en ese momento, escuché unos pasos provenientes del exterior.

-¿Será Gumi?- preguntó Gumo. Eso habría sido lo mejor, pero desafortunadamente no fue así...
Para nuestra mala suerte, quien estaba en la entrada de la cueva, poseía un arma potente. Y si no me equivoco, igual o por lo menos similar a la que tenía Neru cuando nos atacó.

-Apaguen sus linternas- susurré, pero cuando miré a mi alrededor, no estaba ni mi amigo ni Miku.

-¡Sé que estás ahí linda!- exclamó una voz femenina que hizo eco en toda la cueva.
Ante esto, yo sólo pensé en correr dentro de la cueva, en la total oscuridad.

-Jugar a las escondidas no resultará...- escuché decir a la voz, lo que me impulsó a correr más, hasta que me tropecé con una roca.

-Rápido, ven, por aquí hay una salida- murmuró Gumo, tomando mi mano e intentando hacer que me levantara.

-Ya, por favor salgan, la escucho cada vez más cerca-  Nos avisó Miku desde un lugar incierto, hasta que por fin, alcancé a ver la luz del exterior.

Salimos por un pequeño agujero, por suerte, la cueva no sólo tenía una entrada, sino también, una salida.

//Hi!!

Si preguntan donde estaba pues...
Estuve amasando pan, día y noche, sin descanso xd

Hacer pan de muerto no es tan fácil como parece :'v

En fin...

¿Por qué estaba una chica en la entrada de la cueva? ¿Hay algún plan más oscuro para llevar a cabo? ¿Len es más cascarrabias que antes?

Y....

¿A quién prefieren: a la Miku mala o a la buena? :3

Shao!!