Capítulo 9 |Mutuo|

95 14 3
                                    

  — Mi cabeza — suspiro despacio, temiendo que si hago un movimiento en brusco mi cerebro explote — Auch.

Intento levantarme pero mi cabeza da vueltas de una manera horrible y mi visión se nubla. Es solo cuando mi mentón toca el frío suelo que caigo en cuenta de que me he caido de la cama y al ver el desastre decifro que mis pies se han enredado entre las sábanas. Eres torpe Alara, muy muy torpe. Mis manos viajan directamente a la zona herida y musito por lo bajo una maldición, escucho pasos acelerados acercándose a mi habitación, se quien es así que me remuevo como loca para deshacerme de las sabanas pero acabo mucho más enredada. 

— Puedo jurar que escuche un estruen...— Theo me divisa y ríe. Música para mis oídos—   Ah, eres muy mensa ¿Lo sabías?— ruedo los ojos y él con delicadeza se acerca a mi y me ayuda a salir de esa tonta maraña de tela. 

— Con certeza te digo que si das un paso más, vomitaré sobre ti —  mi amenaza va en serio pues me siento muy mareada, él me ignora.

— ¿Que tal esa resaca, eh?— Mi mano lo golpea directamente en la cabeza y el se rasca la nuca, nervioso — ¿Recuerdas algo?— Si se refiere al beso, claro que si. Podré haber estado ebria pero se valorar los hermosos momentos que me regala el destino. Quiero jugar un poco con el.

— Claro— digo obvia

— Oh Dios mío.. Lara— su vómito verbal empieza y me río mentalmente.

— Obvio no, idiota. Solo recuerdo haber hablado con Allan— el da un suspiro — O...¿Pasó algo que yo no sé?

El niega rápidamente.

— Ah—  agrego con timidez —  Y recuerdo que nos besamos—   Mis mejillas queman y el abre los ojos, mirándome como si acabara de decir la peor barbaridad de todo el mundo.

— Mierda... Pensé que no recordarias—  estoy a punto de hablar y decirle de una maldita vez que eso tal vez y solo tal vez, provocó bonitas sensaciones en mi pero me interrumpe — Fue un error...Yo estaba un poco mal, y tu igual. Todo pasó tan rápido que en serio me arrepiento, eres mi mejor amiga y eso no debió haber pasado nunca— El nerviosismo en él es evidente, pero eso no evita que sienta una opresión en el pecho ya bastante conocida. Vaya, este muchacho sabe como matar al zoológico dentro de mi con unas cuantas palabras.

— Claro...Los mejores amigos no se besan—   Él me mira con pena pero desvío la mirada—Ahm, iré a arreglar todo. Nos vemos—salgo de la habitación con el corazón palpitando a mil y tragándome por ya no se cuantas veces, mis malditos sentimientos. Al llegar a la planta baja, un grito desgarrador sale de mi. Que ha pasado aquí.

Suspiro pesadamente y busco fundas para recoger todo este basurero. Pasan los minutos y ya me siento exhausta, como un respuesta ante mi cansancio, Theo baja y en silencio recoge todo. Internamente se lo agradezco pues no puedo con todo, pero eso no quita el hecho de que el ambiente está muy tenso. Con pesar, me resigno. Theo no es para mí, eso ya me ha quedado claro, debería superar mi tonto amor de una buena vez, porque a pesar de todo, el es uno de los únicos amigos que no quisiera perder nunca. Ha estado conmigo siempre, y no dejaré que mis tontos sentimientos dañen eso.

Subo las escaleras, cojo mi teléfono y una bocina pequeña, a la misma velocidad bajo y conecto mi celular. Todo bajo la atenta mirada de Theo, quien me mira confundido.

— Every time that you get undressed— La voz de Jason Derulo inunda la sala de estar y sonrío orgullosa al ver como Theo me mira ahora con una sonrisa—I hear symphonies in my head, I wrote this song just looking at you oh, oh. Yet the drums they swing low— La canto a todo pulmón mientras sigo limpiando—And the trumpets they go, and the trumpets they go.

—Yeah the trumpets they go — La voz de Theo se une a la mía y mentalmente me choco los 5. Pues he logrado que la tensión desaparezca casi por completo. Música variada se reproduce, la cual cantamos felizmente, mi cabeza duele un poco pero no me impide disfrutar este momento con mi mejor amigo. Pausamos un momento la limpieza y nos sentamos a comer algo, pues en serio muero de hambre, mi estómago me grita un gracias cuando pruebo un par de cerezas y otras frutas.

— Extrañaba esto...— suelta de repente. Yo asiento tristemente.

— Yo...también— la sinceridad entre lo que decimos es palpable.

— Te extrañaba a ti— suspira.

Mis mejillas se encienden y el nota.

— Me gusta que te sonrojes por mi, atarantada— ruedo los ojos ante su tonto apodo, uno nuevo a la lista.

— You say, you want all of me today, but tomorrow's not the same, my feelings never change— suena de repente, ambos nos callamos y la escucho analizando detenidamente la letra y sintiendo cómo encaja perfecto con mi vida en estos momentos— What do you want from me?— Theo me observa intentando descifrar que pienso, pero estoy muy distraída como para prestarle la atención necesaria.— What do you want?....I need to know, if this is mutual—De repente Theo cambia de canción y bufo.


— ¡Hey! ¡Ese era Shawn!— me quejo. El me ignora y seguimos limpiando, ahora al ritmo de Bruno Mars.

Los minutos pasan, yo tarareo la música e inconscientemente muevo mi cadera al ritmo de la dulce música. Paro en seco cuando veo que Theo me observa, me acerco a él para darle un zape por no estár trabajando pero mis cálculos fallan y tropiezo con la bolsa de basura a mi lado. Cierro los ojos esperando el impacto, pero nunca llega, en su lugar me encuentro con la mirada azul de Theo, con ese brillo en particular que me trae como una idiota.

— Grac-ias— bajo la mirada para evitar temblar ante el contacto pero me es imposible pues siento su respiración chocando con la mía y eso me pone los nervios de punta, obligando a mi corazón latir como loco. Intento separarme pero Theo intensifica su agarre en mi cintura, no pronuncia una sola palabra, solo me mira fijamente.  Siento mi respiración irregular y mi corazon golpeteando fuertemente, al ver que su pulgar viaja directo a mi mejilla— ¿Qué ha-ces?— musito por lo bajo.

— Creeme que no tengo idea— lo miro confundida. 

— Recuerda lo que dijiste hace rato—  Intento tener fuerza para no flaquear ante su agarre pero me es plenamente imposible, no tengo fuerza de voluntad si es de Theo Lahey de quien se trata.

— Tu crees que eso me importa en este momento— pregunta con obviedad, su aliento choca contra mi nariz. Theo es alto, y a comparación soy una enana por lo cual me siento en desventaja en este momento. El se da cuenta de cómo la cercanía entre ambos me afecta por lo cual sonríe— ¿Nerviosa?— siento que han pasado años cuando tan solo han sido un par de minutos.

— No-o— Alara, no tartamudees por favor.

— Uh huh— se acerca peligrosamente a mi y nuestros labios están a punto de chocarse, cortándome la respiración y puedo decir con certeza que mis latidos son tan fuertes ahora que siento que mi corazón se saldrá. No es broma.   

Cierro los ojos, esperando el beso pero en su lugar sus cálidos labios rozan los míos y se separan al instante pero es suficiente como para que todo mi sistema se alborote y me estremezca ante el contacto. 

— Si claro, nada nerviosa— su voz ronca retumba en mis oídos y me quiero dar un golpe por haber sido tan ingenua. El me suelta y yo sin poder evitarlo, salgo corriendo directo a mi habitación, me encierro en la misma y me boto sobre la cama sin arreglar.

— Necesito saber si esto es mutuo, antes de que me vaya y me involucre demasiado—  susurro para mi misma recordando la canción de hace unos cuantos minutos.





Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 02, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

FriendzoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora