1

10.9K 556 39
                                    

Lanzó el despertador al otro lado de la habitación, ya estaba harta de ese espantoso aparato, y seguramente debería comprar uno nuevo como lo había hecho mil veces antes.

Puso un pie en su mullida alfombra y luego el otro mientras se estiraba para levantarse de la cama.

Su pelo completamente enmarañado le indicaba lo fantástico que había sido su sueño y mientras pensaba en que quería seguir durmiendo se levantó para desayunar.

Eran las 5:30 de la mañana en Manhattan y le gustaba tomar una taza de té rojo mientras se sentaba frente a la venta principal en la sala de su ático, ubicado en una pequeña pero lujosa torre de apartamentos en nada más y nada menos que Upper East Side.*

Su ducha de hidromasaje la ayudo a despertarse por completo y una vez vestida y calzada salió con un moño muy desordenado hacia su oficina.

-Buenos días señorita Black -saludó Margaret, una señora algo regordeta que trabajaba de recepcionista en la torre de oficinas donde se encontraba su trabajo.

-Hola Maggie -respondió con un cálido y delicado tono de voz sin detener su andar hacia el elevador. -Nos vemos a la hora de la comida.

Subió quince pisos y llegó al fin a su oficina, que en realidad era una pequeña pero acogedora habitación dentro de la gran oficina de su jefa, Jennifer Adams, la mejor publicista de Nueva York.

Su trabajo era apoyar en todo a Jennifer, como recién egresada de la carrera de relaciones públicas por Columbia y con 24 años, fue un regalo -casi literalmente – estar en ese puesto, asistente de la Relacionista pública de una empresa de marketing, sin duda un gran trabajo.

Cuando salió de su puesto quince minutos después de haber llegado y puesto sus cosas en orden, se encontró a su jefa hablando por teléfono en chino.

Cuando colgó se dirigió a ella y la llamo para que se sentara en una de las sillas frente a su escritorio.

-Scarlet, cerramos el negocio con Sekemoto -su voz era la de una niña que acababa de recibir el mejor regalo e navidad.

-¡Fantástico! -respondió la joven mientras sacaba su móvil del bolsillo de su saco -¿Le aviso al dueño de una vez?

-No, espera un momento. -Jennifer reviso su agenda unos minutos y luego volvió a mirarla - ¿Crees que se pueda organizar una cena con los accionistas esta noche?

Scarlet se quedó pensativa y luego asintió mientras tecleaba algo en su móvil.

- Me parece que Mr. Jason si puede, de eso me encargo yo y por Cameron y Jason Jr. no te preocupes, les pediré a Lina y Susy -sus secretarias- que cancelen sus citas para esta noche, tendrás a todos los accionistas para darles la noticia.

-Entonces manos a la obra, es una noche muy importante para todos en esta empresa, encárgate de eso y antes de que te vayas a comer me comunicas con Aitana Mirak, la gerente de Publishing Inc.

-Si jefa -hizo un saludo militar - ¿Algo más?

-No por ahora Scar, gracias.

-No hay de qué.

En cuanto puso su cuerpo sobre su cómoda silla de trabajo empezó a mover todo para la cena de la noche, encontrar un buen restaurante y, sobre todo, una reservación con tan poca antelación era muy complicado en aquella ciudad.

Una hora más tarde había reservado en un restaurante cerca del edificio de oficinas y había logrado contactar a la señora Mirak.

Empezó a trabajar en su proyecto de aplicación para una maestría sobre relaciones internacionales, sería mucho trabajo, pero valdría la pena pasar un par de años más en la escuela, ese master lo valía todo.

"Toc, toc, toc"

Se escuchó en la puerta y ella hizo pasar a su visitante con un simple "adelante"

-Hola hermanita. -su ceño fruncido dejaba ver que no solo venía a hacer una visita a su hermana. - ¿Qué tal todo?

-Todo perfecto – miraba al hombre trajeado frente a ella - ¿A que debo el magnánimo honor de tu visita?

-Bueno, me han avisado que quieres que cenemos juntos esta noche y de verdad quiero saber por qué no te consigues un novio que te acompañe a todas esas choradas de cenas de negocios.

Scarlet explotó en risa, amaba a su hermano mayor como loca, pero no podía evitar burlarse de su comentario.

-Bueno, pero prefiero ir con mi hermanito consentido que con alguien que pueda poner sus sucias manos sobre mí -dijo secándose una lágrima de risa y poniendo cara de inocencia. -Pero si prefieres puedo ir con un hombre que no seas tú.

Sabía que su celoso y sobre protector hermano no permitiría eso, así que cuando hizo cara de espanto no se sorprendió.

- ¡Para nada! -dijo él poniendo una mano dramáticamente en su pecho como gesto de ofendido - ¡Iremos juntos! Ningún sucio rufián pondrá sus manos encima de mi hermanita.

Y de nuevo la risa, Scarlet no aguantaba más y salió corriendo al baño, dejando a su hermano con una gran sonrisa y un gesto de resignación en la cara.

-Buenas noches -hablo Jennifer mientras levantaba una copa de vino y se ponía de pie. -Es para mí un honor anunciarles a ustedes y sus acompañantes; que cerramos el trato con la firma de ropa de Hiro Sekemoto, su marca es nuestra y la llevara Marketing In Pro.

Todos en la mesa aplaudieron y brindaron en honor al nuevo negocio, los accionistas de Marketing In Pro. habían anhelado esa marca desde hacía mucho tiempo ya, y Scarlet en particular se sentía orgullosa de esa cuenta, ya que ella había apoyado a Jennifer en todas las negociaciones.

Mr. Jason se puso de pie y vio a sus hijos, los cuatro compartían el total de acciones de la empresa, 25% cada uno y en su área todos trabajaban para que la empresa saliera a flote.

-Quiero hacer un brindis por ustedes -dijo inclinando una copa hacia cada uno -Jr., Cameron y mi pequeña florecilla, Scarlet, ustedes son los pilares de esta empresa que algún día quedará a su cargo completamente, salud.

Scarlet brindo con su padre, con Cameron a un lado como acompañante y viendo como su madre limpiaba una lágrima de su mejilla.

-Yo quiero aprovechar esta oportunidad de celebración -habló el mayor de los hermanos Black mientras tomaba la mano de su novia y ambos se ponían ahora de pie. -Para anunciarles que Jen y yo nos vamos a casar.

Los padres del novio se quedaron atónitos, pero solo se podía distinguir la emoción y el orgullo en su mirada, mientras tanto los más jóvenes y revoltosos -Cameron y Scarlet -saltaron gritando de alegría.

No podía estar mejor, todo iba viento en popa para los Black.
















*Barrio en el distrito metropolitano de Manhattan, en la ciudad estadounidense de Nueva York. Se encuentra ubicado entre el Central Park y el río East River; este barrio acoge a los neoyorquinos más adinerados.

Lady EscarlataWhere stories live. Discover now