Capitulo veintidós

3.3K 243 14
                                    

–¿Bucky? El jamás haría algo así. Lo conozco... –menciona Steve, completamente seguro–. No! no no no, el no es así.

–No había sido así. Después de nuestra existencia el era otro.. –dice Tony–. además.. ¿como podrías asegurarme que el no le haría daño a Georgie? –le cuestiona dejándolo sin palabras–. eso pensé... –murmura, mientras decide darle la espalda y seguir con saber cómo encontrarla–. Jarvis! –exclama, algo así como en una orden–. inicia con el rastreo del auto donde Georgie ha subido.. debemos saber dónde ha sido su última parada..

–Tony! hay riesgos–. menciona el coronel.

–Le prometí a su padre que siempre la cuidaría. No me quedaré aquí como un cobarde ocultándome de ellos y haciéndome creer que nada de esto pasó.

 No me quedaré aquí como un cobarde ocultándome de ellos y haciéndome creer que nada de esto pasó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

(Narra Georgie)

Comencé a despertar, suficiente movimiento me frustraba bastante. Así que me senté con dificultad, cuando recordé tener las muñecas y los pies amarrados con una soga, mientras que la boca aún la tenía cubierta. Me encontraba completamente desaliñada, aún tenía los tacones y el vestido que me había puesto anoche, pero lo que no había visto era tenerlo un poco sucio, empolvado... después de todo eso era lo de menos. Al ver a mi alrededor, se me perdía la mirada por ver todo muy oscuro, y sólo una pequeña luz que colgaba del techo de esa habitación.. no tenía fuerza, no había comido desde hace más de 15 horas.

El lugar tenía un  pacífico silencio que me ocasionaba un poco de pánico, tenía frío, mi piel se erizaba con la más diminuta oleada de aire que me rozara. Empecé a forzar para soltarme, quería salir de ahí, ese lugar me ocasionaba ansiedad, y cada vez eso me lograba quedar más preocupada. Entonces, lo vi salir apenas donde la luz podía iluminar.

–¿Tienes miedo? –dice Bucky mientras caminaba hacia mi en pasos bastante lentos–. Quisiera quitarte esa cinta y oírte responderme, pero... me gusta más verte así. –susurra, mientras va hechandome una pequeña sonrisa–. ¿no quieres saber que haces aquí? –finge esperando mi respuesta con un poco de sarcasmo. De pronto se lanza encima de mi, logrando recostarme en el frío piso que me erizaba la piel en un instante. Pataleaba para quitármelo de encima, pero con su peso encima quizá sería algo que no lograría hacer. Me quejaba aún con la boca tapada intentado hacer escuchar un grito detrás de un pedazo de cinta, pero yo misma me lastimas haciendo eso–. hey hey! no te haré nada, al menos yo.. –me mira atentamente dejándome quieta–. no esperes a que tu querido Stark venga a salvarte–. me responde mientras se pone de pie.. demonios! ¿como rayos me ha leído la mente con mi pregunta?– ese Tony nunca cambiaría. Preferiría a una rubia antes que a ti; preferiría tener sexo justo en este momento antes de venir por ti.. ¿y aún tienes la esperanza de que vendrá a salvarte? –ríe–. TONTERÍAS! –exclama, casi con la voz en alto, mientras después de haberlo oído no aguante ni un segundo comenzar a llorar en silencio–. no llores, hermosa! –dice, en un tono frío, sin haberme importado que me pidiera no haberlo–. todos sabíamos que el nunca te merecía; pero debes saber que vales mucho más de lo que crees–. comienza a rosarme el pulgar por la mejilla recorriéndo después a la mandíbula, enseguida al cuello y para terminar pasa lentamente por mi escote, logrando sacarle una sonrisa pícara. Se asoma para observar y por más ver que no haya abalanzándose sobre mi me suelta y se marcha, dejándome desconcertada. Lo último que pude oír decirme fue.. -No lo esperes-

Aún hice el esfuerzo de levantarme pero era más que inútil, apenas reconocí llevar una cadena en mi tobillo derecho, el cual comenzaba a arder. Pase ambas manos por debajo para llevarlas hacia mi pie e intentar quitarlo, pero sólo pude conseguir otro fracaso. Lo único que se conseguía oír en aquella habitación era la cadena contra el suelo y a mi, jadeando por el dolor que esta me provocaba. Me limpié el sudor de la cara con el brazo mientras ahora lograba levantarme de poco a poco, cuando de pronto oí un inesperado golpe detrás de la puerta. Me sobresalte y nuevamente caí al suelo, asustada. Al principio pensé en que era Tony, pero... consideraba más convincente lo que Bucky me había mencionado.



Iron Man mi Guardaespaldas ❨sin editar❩Donde viven las historias. Descúbrelo ahora