Proyecto Hestia: Peligro

Bianca

Cuando entró al recinto en el que se encontraba la pileta climatizada, Bianca se dio cuenta de tres cosas:

1-Augusto estaba en la piscina

2- Augusto tenía una habilidad extrema para aparecer en el momento y el lugar justo para encontrarse con ella.

3-Augusto no estaba solo .

Miró al pelinegro de arriba a abajo con una ceja arqueada, sorprendida por su aspecto. Tenía el típico bronceado de la gente que viaja mucho y los músculos del abdomen marcados.

Augusto le devolvió la mirada, sonriendo de lado. Abrió la boca para decirle algo, pero se vió interrumpido por Sofía.
-Bianca, dejá las toallas en alguna reposera. - dijo, mientras observaba con interés al chico de ojos verdes que se acercaba. Bianca lo reconoció de la fiesta y de cuando le había hablado en la galería , su nombre era Jacob.

Fue hacia una reposera y dejó la pila de toallas y la mochila con su ropa. Se sentó para ver quiénes estaban también en la piscina.

Sentado en una reposera estaba el chico rubio que había visto en la galería. Parecía nervioso e incómodo.
Luego estaba Augusto, que estaba conversando con Selene. La chica le hablaba sin parar, y él sonreía. Por último estaba Jacob, sentado con Sofía en el borde de la piscina. Él cada vez se acercaba más y ella movía su cabello de un lado a otro.

Bianca volvió a mirar al rubio y decidió acercarse, el chico se veía bastante solo, y ella sabía lo que era sentirse así. Se levantó de su reposera y se sentó en la de al lado de él.

-Hola.

El rubio se sobresaltó y la miró, parecía más nervioso que antes.

-Hola.-tenía el mismo acento que Jacob, pero menos marcado. Casi como Augusto.

-¿De dónde sos?

-Alemania.-el chico parecía más tranquilo, pero se lo veía tenso. No dejaba de mirar a Sofía y a Jacob.

-Supongo que venís con ellos.-dijo Bianca, señalando con la cabeza a Augusto y Jacob.

-Oh, sí.-el rubio la miró.

-Soy Bianca.- sonrió. El chico le caía bien, aunque casi no habían hablado .

-Niall.- esbozó una pequeña sonrisa.- ¿Las conoces?-dijo, señalando a Selene y Sofía.

Bianca las miró.

-Lamentablemente sí.-volvió a mirar a Niall, que la miraba, interesado.- Son mis hermanas. En realidad, hermanastras.

El chico arqueó las cejas.

-Mi madre murió cuando era bebé, un accidente de tráfico. Mi padre se casó con su madre -señaló a las hermanas - pero él murió cuando tenía diez. También en un accidente.-miró a Niall y se encogió de hombros - Así que vivo con ellas.

-Oh, lo siento.-el rubio bajó la mirada.

-Ya pasó mucho tiempo.-dijo ella.

Los dos callaron y Niall se quedó mirando a Sofía fijamente. Bianca arqueó una ceja.

-Por favor, no me digas que ella te atrae. Ya con uno es suficiente.

Niall abrió mucho los ojos y se sonrojó. Bianca soltó una carcajada.

-Está bien. Ya estoy acostumbrada a que a dónde vaya tenga a diez chicos que la sigan.

-No, no me atrae.-Bianca lo miró, acusativa.-Es en serio. No es... mi tipo.

Ella se encogió de hombros.

-Mejor.- lo miró de arriba a abajo. Niall era atractivo, rasgos finos y músculos marcados. Tenía unos ojos celestes bastante impresionantes, además de su cabello rubio.- Igual, si cambiás de opinión, vos si sos de su tipo.