Dos Corazones Rotos - 2da Temporada/Jos Canela {TERMINADA}

Capitulo •55•

–____, no has comido nada– Regañó mi madre al ver la charola de comida intocable.

–Lo siento mamá, pero la comida de aquí sabe horrible.

–Pero es lo único que hay, así que te lo tienes que comer– Viré mis ojos, mi madre siempre con las mismas frases.

–¿Oye y cuando vendrá mi papá a verme? ya es mi tercer día que desperté y él ni siquiera ha llamado.

–Hija, ya sabes que él..

–Que él tiene mucho trabajo– La interrumpí imitando su voz –Pero no sabía que el trabajo estaba primero que la salud de su hija, siempre es lo mismo, nunca tiene tiempo para Megan o para mi– Me queje y mi madre sólo me miró triste, a ella le afectaba mucho que me expresara así de él.

Dos golpecitos se escucharon en la puerta y después esta fue abierta dejando ver a Freddy y a dos personas que moría por ver.

–¡Sarah! ¡Alan!– Grité emocionada, Sarah se acercó a mí rápidamente y me dio un fuerte abrazo.

–Te extrañe tanto _____– Dijo al separarse de mi –Perdon por venir hasta ahora, pero de verdad no quería llegar antes y verte con Bryan.

–No te preocupes Sarah, te entiendo– Dije para animarla.

–Mi turno– Escuché decir a Alan  detrás de Sarah, se hizo a un lado para darle acceso a Alan de acercarse a mi, el cual me dio un gran abrazo tambien –Nos diste un susto muy feo _____, pero me alegra verte sana y salva.

–Gracias, gracias a los dos de verdad– Ambos me miraron con una linda sonrisa.

–¿Pueden quitarse? Yo también quiero abrazar a _____– Reí al oir a Freddy.

–Tu siempre tan educado Alfredo– Se quejo Sarah mientras le daba espacio a Freddy.

–Hola mi niña bella– Me saludo tiernamente mientras besaba mi frente –Te tenemos una sorpresa, ¿por cierto porque se demorará tanto?

Caminó hacia la puerta y soltó una risa, no entendía el porqué.

–Te dijimos que compraras el grande, no el extra grande– Dijo Freddy entre carcajadas.

–Cállate y ayúdame– Escuché la voz de Jos y sonreí ampliamente, él estaba aquí.

Por la puerta aparecieron miles de rosas rojas, y después note a Jos quien las cargaba pero me era imposible ver su rostro debido a la cantidad de rosas. Las colocó sobre mi y después me sonrió.

–Espero te gusten– Dijo.

–Jos, están preciosas– Dije sin dejar de observarlas –Gracias.

–No hay de que– Dejo un beso en mi mejilla y después la acaricio –¿Como te sientes?

–Bien, y ahora que estás aquí, mejor– Respondí, ambos nos mirábamos fijamente a los ojos con una sonrisa.

–De acuerdo par de tórtolos, es muy linda su escena y todo, pero Jos ya dile la noticia– Dijo Sarah interrumpiendo el momento.

–¿Que noticia?– Pregunté confundida y Jos tomó mi mano.

–Bueno, hablamos con el doctor y con Julieta y nos dijeron que mañana mismo en la tarde podrás irte a tu casa– Lo miré con asombro.

–¿De verdad?– Preguntó mi madre acercándose un poco a nosotros y Sarah asintió.

–¡Por fin!– Exclamé feliz.

–Pero..debes de seguir reposando y tomar unos medicamentos que te daran– Explicó Freddy.

–Y yo te cuidare– Indico Jos.

–Por cierto ____, ¿ya resolviste lo de tu padre?– Me preguntó Sarah y fruncí el ceño.

–¿A que te refieres?

–Pues..sobre lo que nos había dicho a nosotros días después de tu accidente, que en cuanto despertaras.. te llevaría de regreso a Wisconsin, quieras o no– Negué con la cabeza rápidamente, esto no me gustaba para nada.

–¿Es eso cierto mamá?– Pregunté mirándola y ella asintió bajando la mirada –Pe..pero él no me puede hacer esto, mamá tienes que hablar con él..

–No puedo ____, él quiere hacer esto por tu bien, piensa que aquí corres mucho peligro.

–¡Pero no es asi!– Grité.

–Tranquila ____, te hace daño alterarte– Jos comenzó a acariciar mi brazo para tratar de tranquilizarme.

–Mamá.. por favor, no me hagan esto– Pedí al borde del llanto.

–Lo siento hija, pero tu padre ya tomó una decisión.

–Lo único que van a lograr con esto, va a ser que ya no quiera verlos jamás– Deje caer una lágrima –Hazme el favor de irte de aquí, solo quiero estar con gente a la que en verdad le importo– Dije fríamente.

Mi madre me miró dolida y después salió de la habitación. Trataba de no llorar pero me fue imposible cuando Jos me abrazó.

–Déjenme a solas con ella un momento por favor– Pidió, los chicos asintieron y salieron de la habitación, pero antes, Freddy se acercó a mi para darme un ligero beso en la mejilla, lo cual me hizo sonreír, después de eso, salió de la habitación.

–No entiendo cómo mi papá quiere alejarme de todo esto– Limpie algunas de mis lagrimas.

–Ya no hablemos de tu padre ¿si?– Pidió ayudándome a limpiar las lagrimas de mi rostro  –Quiero que hablemos de cualquier otra cosa, menos de esto, porque no me gusta verte así– Se subió a la camilla y se recostó junto a mi –Quiero verte feliz.

–Para ser feliz solo te necesito a ti Jos– Recargue mi cabeza en su pecho.

–Pero también necesitas a tu familia– Comenzó a acariciar mi cabello –Y yo estoy dispuesto a irme contigo a Wisconsin, si es lo que quieres– Mis ojos comenzaron a arder, de nuevo quería llorar, pero esta vez era de felicidad al saber que tenía en mi vida a alguien como Jos.

–De verdad que eres maravilloso– Dije –Pero no, no me quiero ir de aquí, no podría dejar tampoco a Freddy y Sarah, y te juro que me encanta vivir aquí.

–¿Estas segura?

–Si.

Cerré mis ojos un momento mientras aspiraba su aroma, ese rico aroma que me volvía loca. Disfrutaba este momento, hacía tanto tiempo que no tenía a Jos recostado junto a mi, yo recargada en su pecho, y el acariciando mi cabello, era la mejor sensación tenerlo a mi lado.

–¿Te dormiste?– Preguntó en voz baja.

–No..– Contesté riendo levemente.

–____..

–¿Si?

–¿Que..que somos?– Preguntó nervioso.

–Amigos, claro, ya que no me has pedido algo más– Dije burlona y volteándolo a ver.

–Me gustaría hacer algo especial para cuando te pida eso, ¿me darías un tiempo?

–Si, pero que no sea mucho– Soltó una pequeña risa y después se fue quedando serio.

–¿P..puedo besarte? Te juro que muero por probar de nuevo esos labios– Lo mire perpleja.

–Claro que si..

Sus manos se posicionaron alrededor de mi rostro y poco a poco me fue acercando a él, sentí el roce de sus labios y cerré mis ojos, acortó la pequeña distancia que quedaba entre nosotros y me beso de una manera tan tierna. Y con ese beso, me pude dar cuenta de lo mucho que nos extrañábamos el uno al otro.

••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••