Dos Corazones Rotos - 2da Temporada/Jos Canela {TERMINADA}

Capitulo •17•

Habían pasado ya dos meses desde que entré a la universidad, y el tiempo se me pasaba volando. Mi relación con Jos cada día estaba mejor, aunque claro, seguíamos teniendo esas pequeñas indiferencias entre nosotros, pero nada de que preocuparse.

–Entonces mañana vas a pasar todo el día conmigo de nuevo ¿cierto?– Me preguntó Jos mientras conducía de regreso a casa, habíamos ido al cine.

–Si mi amor– Contesté negando con la cabeza mientras reía.

–Perdón si suelo ser el tipo de novio que quiere estar las veinticuatro horas del día con su novia, pero es que te amo tanto que no puedo estar ni un minuto sin ti– Dijo tiernamente.

Le dediqué una sonrisa y seguí viendo por la ventanilla del carro. Estos últimos días Jos y yo habíamos estado más juntos de lo normal, quizá sea porque cada día nos queremos más.

–No puedo creer que ya vamos para los cuatro meses juntos– Comentó entrelazado una mano con la mía –Sin duda contigo se me pasan volando los días.

–Ha sido increíble estar contigo estos meses– Lo miré feliz.

Jos detuvo el auto en señal de que habíamos llegado a nuestras casas, él bajó primero del auto y lo rodeó para abrirme la puerta, me encantaba que hiciera eso.

–¿Y si duermes conmigo hoy?– Preguntó mientras me tomaba de la cintura y me pegaba a él.

–No lo sé– Sonreí de lado.

–Por favor, solo te has quedado una vez y dormí tan a gusto contigo– Besó mi mejilla.

–Bien– Solté un suspiro –Sólo entrare a mi casa por la ropa que me pondré mañana para ya no volver– Informé dando media vuelta para caminar hasta la entrada de mi casa y Jos me siguió.

Fui rápidamente a mi habitación por un cambio de ropa, lo puse en una mochila y regresé a donde estaba Jos.

–Listo– Dije al verlo sentado en una silla.

–Bien, vámonos a ser felices– Tomó mi mano y reí.

Llegamos a casa de Jos y estaba todo oscuro, al parecer Sarah ya se encontraba dormida. Caminamos en silencio hasta la habitación de Jos y cerró la puerta.

–Ire al baño a ponerme mi pijama, tu cámbiate aquí– Indicó caminando hacia el baño que tenía en su habitación.

–Jos espera– Lo llamé antes de que entrara –Olvide traer mi pijama– Choqué mi frente con mi mano.

–No hay problema, te prestaré algo– Abrió uno de sus cajones y saco una camisa gris –¿Te parece bien esta?– Me la mostró y asentí.

La tomé y Jos entró al baño. Me quite la ropa que traía puesta y me puse la cómoda camisa de Jos, me llegaba muy arriba de las rodillas y me sabía que me incomodaría mucho estar así frente a él.

–Que sexy– Murmuró Jos detrás de mi provocando que me pusiera nerviosa.

–¿No tienes una más larga– Pregunté mordiendo mi labio inferior.

–No, esa se te ve bien– Dijo sin despegar la mirada de mí.

–Ya hay que dormirnos ¿si?– Caminé hasta su cama y me acosté debajo de las cobijas, Jos hizo lo mismo y me tomó de la cintura.

–Me encanta estar tan cerca de ti– Susurró y pude sentir su fresco aliento sobre mi rostro.

–Te amo– Dije de la misma manera y lo besé.

Jos me siguió el beso y lo fue haciendo más profundo, se colocó arriba de mi pero sin poner todo su peso, sentí sus manos acariciar mi espalda por debajo del camisón. Sentía algo en mi que nunca antes había sentido. Me siguió besando y cuando sentí que subía el camisón lo detuve.

–No..Jos..– Agarré sus manos para evitar que siguiera –Perdon, pero aun no estoy lista para..esto– Dije y él se quito de encima de mi para volver a acostarse a mi lado.

–No tienes porque pedir perdón mi amor, te entiendo si no estas lista, yo te esperare el tiempo que quieras– Acomodó un mecho de mi cabello.

–Gracias por comprenderme, en serio eres el mejor novio– Lo besé suavemente.

–Buenas noches, te amo– Susurró y me abrazó a él para dormirnos.

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