Capítulo 10 primera parte

621 57 6
                                    


Esquivando las ramas sigo avanzando por el camino hasta llegar al bosque. Chuck me había citado allí por alguna razón. Era raro porque nunca nos reuníamos en ese lugar por el simple hecho de que tanto como mi padre como otros integrantes de la manada me podrían ver en esta situación, cosa que me perjudicaba a mí pero como quería información de parte de mi amigo no lo dude. Y ante esto me encontraba en lo profundo de la arboleda. El clima había cambiado, el viento soplaba con más vigor desencadenando que mechones castaños obstruyan mi vista.

Por alguna razón me sentía culpable, culpable de haberme ido de casa después de prometerle a mi padre quedarme en esta hasta que todo se apacigüe pero al mismo tiempo sentía que lo que hacía era lo correcto, mis amigos sufrieron un ataque y yo no pude estar ahí como ellos siempre estuvieron. De alguna forma debía estar para ellos y yo sentía que así era una forma de estar presente.

Al llegar diviso un tronco en donde me senté para esperar a mi amigo.



¡Juro que lo mataba! Veinte minutos esperándolo y el no aparecía por ningún lado. La temperatura bajaba cada vez más y el sol apenas alumbraba el bosque. Cuando note que estaba demorando decidí internar comunicarme con el pero el susodicho no contestaba el maldito teléfono. Realmente no sabía para que lo tenía si no contestaba las llamadas.

Odiaba profundamente a las personas que así.

—¡¿Dónde estas?! Juro que te matare cuando te vea. — dejo un mensaje en su casilla de voz.

—¿Estas esperando a alguien? —escucho una voz atrás mío.

Lentamente, y lamentándome por no prestar atención a mi entorno, giro hacia ver a un hombre de unos veinticinco años aproximadamente, cabello y ojos negros, y una sonrisa maliciosa.

No me daba buena espina.

—¿Quién eres? —pregunte.

—No se responde una pregunta con otra pregunta, pequeña. ¿Qué? ¿No me digas que no te enseñaron eso? —aquel hombre sigue con esa sonrisa maliciosa en su rostro provocándome un escalofrío.

Internamente debato si debo o no debo contestar su pregunta pero si quiero que el me conteste la suya debo contestar primero yo.

—Sí, espero a mi hermano. —miento.

Él no tendría que saber que mi amigo me dejo plantada y no tenía señal en mi móvil. Y que en teoría estaba sola con el en el bosque. 

—Ahora te toca a ti. ¿Quién eres? —reitero mi pregunta.

—Además de esperar a tu hermano ¿Qué haces aquí?

—No se responde una pregunta con otra pregunta. —contesto.

Aquel hombre, cuyo nombre todavía no sabía, rie sin humor ante mi comentario.

—Niña, niña, niña, se ve que no sabes quien dirige las cosas aquí. —murmura entre dientes.

—¿Cómo quieres que lo sepa si ni siquiera se quien eres? —pregunte.

Esto se estaba saliendo de las manos. No me agradaba este hombre para nada, por su mirada y sonrisa podía notar que no se traía nada bueno.

—Chica inteligente, me gusta. —asiente como si hubiera hecho una pregunta merecedora de un oscar. —Me llamo Zigor.

Asintiendo lentamente, me levanto del tronco donde estaba sentada. Necesitaba salir de aquí urgentemente y volver a mi casa con mi padre en donde estuviera a salvo de ese hombre.

—Bueno...debo irme Zigor. —comienzo a avanzar tratando de no tropezar con mis propios pies cuando me detuve a causa de que Zigor estaba al frente mío. Obstruyendo mis pasos.

Miro hacía donde estaba hacia un momento. ¿Cómo puedo moverse tan...?

Vampiro.

Solo yo me puedo meter en tantos problemas. Maldita seas, ¿Cómo mierda llegue a encontrarme con un vampiro? ¿Como no pude reconocer su olor? Idiota, soy una gran idiota.

—¿A dónde crees que vas encanto? —pregunta agarrando un mechón de mi pelo.

—A mi casa, debo que hacer cosas más importante que hablar con desconocidos. —aparto su mano de mi pelo con un manotazo.

Él me mira incrédulo por mi acción y de repente comienza a reír.

—Tienes agallas, me gusta.

Negando intento avanzar pero otra vez se mete en mi camino.

—¿Dónde crees que vas? —gruñe.

—¿Y a ti que te importa? —espeté.

—Háblame con respeto. —su ceño se frunce, aprieta sus puños y podía escuchar el rechinido de sus dientes.

¿Este quien se cree que es? ¿Mandarme a mí?

—¿Y si no qué? —pregunte con valor.

—Niña, te equivocaste de persona. —suelta antes de saltar sobre mi.





Hola people! como andan? aquí les traje lo prometido espero que les guste.

besos :*

Luna Llena. (LS #2) Where stories live. Discover now