La carta

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Tristeza, felicidad, o quizás miedo. No sabía lo que sentía en ese momento, sentía que en mi interior tenía una bola de sentimientos extraños dentro de mi,vme fuí a mi cuarto y dejé caer mi cuerpo sobre la cama, no me encontraba bien. Era invierno, hacía frío y no había nadie en casa. Escuchaba el sonido de la lluvia contra el cristal de la ventana, pensé en lo bonito que sería ver las calles vacías y mojadas por la lluvia..pero yo no podía ver nada, yo soy ciega y jamás he visto ni la forma de una simple flor,en ese momento me preguntaba si la luna es tan bonita como dicen, o si el cielo es tan grande y tan estrellado una noche de verano, esto son cosas simples y sin sentido para los que tienen la gran suerte de ver, sin embargo yo..daría lo que fuera por ver. Me encantaba ese sonido de la lluvia, me relajaba y me permitía pensar en ciertas cosas de la vida, cosas que no todos entenderían..Me limité a escucharlo durante un largo tiempo hasta que me dormí. Mis padres y mi hermano ya habían llegado a casa, cenamos todos juntos y después decidí salir al jardín de mi casa como de costumbre, me gustaba mucho el olor de las calles que había mojado la lluvia. Pasado un rato empecé a escuchar pasos al otro lado de la puerta del jardín, alguien estaba en la calle ,la puerta del jardín no es muy alta y desde la calle se pude ver perfectamente el jardín desde fuera ,alguien estaba allí y sentía como me miraba, yo no le podía ver,pero no me resultaba alguien muy desconocido ya no me puse nerviosa y tampoco decidí preguntar quien era. Sentía su mirada, no era una mirada desconocida, después de un rato entre a casa, esa persona seguía allí, pero ya era muy tarde y estaba muy cansada, mañana tenía que madrugar ya que tenía que ir a clase.
Viernes ,8:30 de la mañana ,papá me llevó al instituto como de costumbre y me reuní allí co mis amigos, sonó el timbre y entramos a clase. Al sentarme en mi mesa, encontré una carta en la cajonera, me resultó muy raro ya que yo nunca había recibido una carta de nadie. Abrí la carta, puse mis dedos sobre el papel y empecé a leer antes de que llegara el profesor, en la carta ponía:" te ves preciosa bajo la luz de la luna..." No entendí nada ,la carta era de alguien anónimo.Después del instituto me fui a casa, comí rápido,y me fui a mi cuarto. Intenté saber de quién sería la carta, llamé a mi mejor amigo para contárselo, ya que podría ayudarme a encontrar a aquel "anónimo".Llegó la noche, cené y volví a salir al jardín para despejarme un poco. Un rato después, empecé a escuchar los mismos pasos que ayer, pensé que sería la misma persona de ayer, sentía como me miraba. Pregunté;
¿Quién eres?.. No obtuve respuesta.
Decidí volver a preguntar y tras un largo rato le respondió una voz tranquila, serena y muy masculina;
-"Eres preciosa bajo la luz de la luna.."
En ese instante me empecé a poner nerviosa, esta misma mañana me llegó una carta con la misma frase. Ya supe quién era mi -anónimo-
Empecé a escuchar sus pasos de nuevo, se estaba alejando y yo entré a casa. Encontré a mi hermano despierto y decidimos ver una peli. Yo soy ciega y para ver una película necesito que alguien esté  comigo para contarme lo que ve ,yo solo me limitaba a oír y a entender lo que me estaban contando .No hay nada mejor que pasar el rato con manta y peli en una noche de invierno...

No hace falta ver para sentirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora