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La misma rutina día con día, me levanto, me doy una ducha, bajo al comedor y en la puerta principal ya se encuentra otra carta.

Con pereza la recogí y la abrí para subir a mi habitación y ahí leerla.

Querido "nadie":

Soy Jos men- dije lanzándome a la cama.

Hoy mi mamá me mando a conseguir trabajo, ¿para que mierda quiere que consiga un trabajo?. Preferí no discutir y salí sin ganas. Camine por varias cuadras y no encontraba ningún local en el cual quisiera trabajar. Seguí cambiando y me tope con la enorme plaza de la ciudad, aunque en realidad esa plaza no me trae recuerdos muy lindos.

¿Por que será Joven Villalpando?- me sentí como un psicólogo de preparatoria, de esos viejos arrugados que se meten en tu vida.

Crei que sería bueno entrar y buscar trabajo, por más de 10 minutos que no encontré nada que me llamara la atención. Me senti agotado así que decidí descansar un poco en una banca de aquella plaza. Alze mi vista y me encontré con un lugar de ropa, en la puerta decía "Solicitamos empleado, mayor de 18 años, con muchas ganas de trabajar, informes aquí". ¿Con muchas ganas de trabajar? Yo ni ganas tengo, pero así complaceria a mi mama por lo menos en algo, desde que me volví tan deprimente mi mamá solo quiere lo mejor para mi, así que esto seria bueno.

Con tal de darle gusto a la mamá, pues chido- dije riéndome de mi comentario.
En realidad está carta no le estaba tomando seriedad.

Me adentre al local y pregunte al chico del mostrador sobre lo del empleo.
El me sonrió y me informo todo sobre el, inmediatamente acepte solo tenia que vender. No es tan difícil.
Termine de hablar con el chico que al parecer me contó que el era el dueño del local. Se llama Bryan. Es buen muchacho. Así que hoy hice un nuevo compañero de trabajo.

Genial Alon,  vamos progresando- dije doblando la carta, para después meterla al cajón en donde tengo las demás cartas.

🔹Letters -JV-🔹Where stories live. Discover now