Tiempo

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Scorpius Malfoy caminaba de un lado a otro en el pasillo de Gryffindor, esperando que su hermano saliera, estaba desesperado por contarle lo que le pasaba, se sentía frustrado, todo ese curso había pensado en cómo decirlo y a quien decirle.

-Hola Scorpius.-Sonrío Anastasia hacia él y Scorpius se estremeció.

-Hola...

-A quien esperas?

-A mi hermano.

-El se fue hace tiempo, creo que los Gryffindor nos levantamos más temprano.-dijo Anastasia sonriendole y comenzando a brincar por el pasillo.

-Gracias.-gritó Scorpius, cuando se iba a encaminar hacia el gran comedor una voz lo detuvo.

-Para que quieres a Colín?

-Hermanita.-susurro divertido.

-La misma que ha hecho que a papá le de un infarto

-Aún no lo puedo creer, es tan raro ser el único Slytherin.

-Bueno, somos nuevas generaciones, tal ves eres demasiado idéntico a mamá, pero el sombrero creyó que estarías bien en Slytherin por qué seguirías a tu corazón.

-No sé de qué hablas.

-Sabes por qué tío Harry entró en Slytherin?

-Por qué el sombrero lo metió?

-Por qué siguió a su corazón tonto.-dijo Hydra dándose un golpe en la frente.

-Lo sé, me se esa historia, pero yo...

-Rose Weasley no podía quedar en ninguna casa que no fuera Slytherin y todos lo sabemos, así que tu corazón te llevo a Slytherin.

-Y a ti qué te llevó a Gryffindor?

-No lo sé, aún estoy por averiguarlo.-Scorpius regresó al presente o al menos al momento en el que estaban, estaba tomado de la mano de Rose y todo eso lo había llevado a recordar, ese momento en el que su hermana hace apenas unos días lo había hecho darse cuenta de lo cobarde que estaba siendo.

-Que hacen aquí, contesten.

-Estábamos estudiando

-Estudiando?.-preguntó el chico.

-Quienes son?

-Tio, digo hola, este ya nos vamos.

-Me dijiste tío?.-preguntó Colín mirándolos con el ceño fruncido.

-Que haces ahí.-escucharon resonar la voz de alguien conocido por todos en las paredes.

-Encontre a unos chicos.

Draco Malfoy entró a la biblioteca y sus dos hijos sonrieron, su padre era el mismo, solo que un poco más Calvo.

-Señor Malfoy.-dijo James y Albus le dio un codazo

-Señor?, quienes son.

-Soy tu hijo.-soltó derrepente Scorpius y todos lo miraron con el ceño fruncido, Draco lo miro un momento y se acercó a él.

-Vengan conmigo.-todos lo siguieron, Colín iba a su lado y sonreía.

-Es cierto lo que dice mi papá, tío Colín adoraba a Tio Draco.-dijo Hugo sonriendo.

-Llegamos.-Draco susurro unas palabras y se abrió una puerta.

-Necesitamos veritaserum.-dijo Draco haciendo entrar a todos los chicos.

-Tio Snape está idéntico.-dijo Rose cruzándose de brazos.

-Tio?,

-Si también a mí me dijeron Tio.-dijo Colín encogiéndose de hombros.

-Digan todo lo que tengan que decir, ahora.-dijo Snape y todos comenzaron a hablar a la ves.

-Obviamente uno a la ves, si es verdad estoy seguro que estos dos son de Potter.-dijo Snape apuntando a James y Albus.

-Y este es el de Draco.-dijo Colín apuntando a Scorpius

-Eso no se debe ni preguntar

-Y ustedes, adivinare, tú eres de Parkinson.-dijo apuntando a Rose.- Y tu claro debes ser de Ron, lo recuerdo así de pequeño, y como Molly lo sobre protegía.

-Si estoy seguro que es de Ron, espero que sea mi ahijado.

-De hecho tú ahijada soy yo.-dijo Rose sonriendo.

-Diablos, Ron lo hizo

-Se casó con mama.-dijo Rose con la frente en alto.

-Bien bien, ahora alguien hable.

-Lo haré yo.-dijo Colín sonriendo a su tío.

-Este es de Granger, se nota.-dijo Snape haciendo una señal con la mano para que continuara, Draco lo miro atentamente.

-Papa.-dijo Colín mirando a Draco.-Ella se casó contigo, yo me parezco a ambos por eso no se nota de quién soy hijo, Scorpius es el mayor, luego yo y despues está Hydra.

-Vaya Draco.-dijo Colín que miraba con atención a todos.

-Llevo tu nombre.-dijo mirando a Colín con tristeza.

-Pero yo... Por qué?

-No lo sé.-dijo Draco mirando a Colín, claro que lo sabía o por lo menos lo imaginaba.

-Y yo llevo el suyo.-dijo Albus mirando a Snape.

-Potter.-susurro Snape con una media sonrisa.

-Eso quiere decir que yo....-dijo Snape mirando a Draco

-No, usted no murió.-Se apresuró a decir Scorpius

-Y tu, por qué no les pusiste mi nombre?.-dijo Snape golpeando a Draco

-Ay no lo sé Tio,

-Yo me llamo Scorpius Sirius.-dijo Scorpius recordando las historias de la golpiza que le dio su tío a su padre por ponerle el nombre de su otro tío.

-Continúa.-dijo Snape viendo a Colín.-Tu eres mi padrino.-dijo Colín.-En fin existe una profecía, yo tengo que derrotar a la oscuridad, y ella va a venir a matarlos a ti y a mamá para que yo no nazca, ustedes entrenaron a Scorpius para que luchará contra eso por qué siempre creyeron que él era el elegido pero resulta que soy yo y todos los que estamos aquí tenemos algo que cumplir, menos Aurora que se esconderá aquí hasta que todo acabe, tenemos que ir tras ella.

Draco, Colín y Snape miraban sorprendidos al chico cuando una luz resplandeció en la sala.

-Hola tio.-dijo Draco, un Draco Maduro y sonriendo.

-Esto no puede ser

-No debería verte!

-Tranquilos.-dijo Snape y apuntó su varita a Draco.-Colín llévalo con Hermione y cuídalos.

-Que hará?

-Detendremos a la oscuridad.-dijo Snape viendo a su sobrino, que parecía tener unos 30 años, se sintió orgulloso y pensó que si su destino era morir por la causa por lo menos ya habría conocido a su sobrino mayor, a sus pequeños sobrinos nietos y a la mujer con la que el se casó, aunque ya lo sospechaba, Hermione estaba tomada de la mano de Draco y lo miraba con cariño, un cariño que el solo había visto en Molly y Narcissa, ese amor incondicional, alejo ese pensamiento inmediatamente, ese no era el momento de cursilerías ahora debia ser fuerte y ayudar a su familia, la única familia que había tenido de verdad.

La oscuridad ataca HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora