Evan Peters | One shots

3: Jimmy

Título: Despedida de soltera.

Pareja: Jimmy x Lectora.

Advertencia: No.

*********************

Tus amigas te han organizado una despedida de soltera. Aunque te opusiste a la idea, por temor a que tu prometido se molestara, entre las diversas opiniones la tuya fue de escasa importancia.

Todas las presentes parecen disfrutar de la celebración mucho más que tú. Ellas gozan especialmente de la comida, puesto que se llenan hasta reventar.

Tu hermana se aproxima a ti con una expresión entusiasmada. Esa no es una buena señal, normalmente no se entusiasma con nada. Una prueba de ello fue cuando le anunciaste que te mudarías a la casa de tu novio ya que te casarías con él. A diferencia de tus demás familiares y amigos, te miró para después decir, sin mostrar ninguna emoción: "Okay. Me quedo con tu habitación. Y no te lleves la cama, de todas formas en tu nueva casa tendrás otra para follar".

Que esa amargada se emocione es casi tan extraño como negar que pasará los próximos años de vida en su habitación, saliendo exclusivamente para alimentarse e ir al baño.

Ella se detiene en seco antes de chocar contra ti. Te da su más amplia y sincera sonrisa. Podrías jurar que está planeando algo.

— ________, ve a la habitación de invitados. Dejé una pequeña sorpresa, aunque de pequeña no tiene nada —enarca una ceja y se clava los dientes en el labio inferior—. Que la disfrutes —da una palmadita en tu espalda y va de vuelta a la fiesta.

Te sorprende que se haya tomado el tiempo de preparar un regalo. Dentro de ti, la curiosidad comienza a removerse y preguntarse que será tu dichoso obsequio.

Emprendes el paso hacia la habitación, recorriendo el largo pasillo que da con ésta. La música que antes sonaba estrepitosamente, disminuye a medida que avanzas, hasta esfumarse por completo. El único sonido que logras escuchar es el del roce que causa tu pomposo vestido amarillo al balancearse y chocar contra las paredes.

Al aproximarte a la entrada del cuarto, te das cuenta de que la puerta está abierta. Entras lentamente, dando pasos silenciosos y dudosos. Luego te encuentras frente a frente con el regalo.

Sobre la cama se encuentra recostado un chico provocadoramente sexy, que posa sus encantadores ojos en ti, mostrando interés. Con tan solo mirarte luce demasiado extasiado. Cuando prestas atención en sus facciones, algo se remueve entre tus recuerdos. Definitivamente él te parece conocido y es debido a que lo habías visto antes. Lo observaste en aquel cartel que anunciaba la llegada del novedoso espectáculo de fenómenos a tu ciudad.

Entonces él es un fenómeno.

Te percatas de sus manos, sus muy peculiares manos. Las ganas de reír invaden tu ser al pensar en el parecido que ambas extremidades tienen con una pinza o un dildo. Sin embargo, soportas la tentación y reflexionas acerca de la seriedad de la situación.

Diablos ¿Qué hizo tu hermana para que él se presentara aquí? Y más importante ¿Cómo se le ocurrió que podría ser un buen presente?

Por un momento aceptas la posibilidad de regresar a la despedida y hacer como si jamás hubieras visto ese estúpido regalo. Pero el desconocido te detiene dedicándote algunas sencillas palabras:

🌚💧

Es la mejor noche de tu vida, en la que el chico con manos de langosta te hace dudar sobre si el hombre con quién contraerás matrimonio es con el que quieres pasar el resto de tus días.

*********************

En medio de la edición del libro, esta notita se hizo kk 💩🙇. Puede que algunas otras también desaparezcan.

— biingsu.