Capítulo catorce: Dark room.

5.1K 426 23
                                    

Al despertar mi cuerpo estaba entumecido, sentía mis manos aprisionadas y no podía moverlas, mis piernas me dolían a montones, sentía un líquido correr por mi cabeza, mis ojos estaban tapados con una venda.
Sacudí mi cabeza para que la venda cayese por mi rostro hasta mi cuello, y así fue. Me costó unos segundo que mis ojos se acostumbraran a la oscuridad de la habitación, ¿dónde estaba? ¿Qué había pasado?.
Miré mis manos, estaban atadas con cadenas, tiré de ellas sin que las moviera ni un poco.

Miré mis manos, estaban atadas con cadenas, tiré de ellas sin que las moviera ni un poco

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Miré mis piernas, estaba moreteadas y algo hinchadas. ¿Qué había pasado? Estaba hablando con Mason y luego...

Estaba en las taquillas esperando a Harry para irnos a su casa, hoy día tendríamos noche de películas y nos iríamos juntos a la universidad al otro día. Mason se acercó a mí, me molestaba estar cerca de él, no es cono si no me hubiera dado cuenta que anda trás de mi y que quiere hacer enojar a Harry.

—Hola lindura. —Bufé. — Sabes, lo siento, por atacarte cuando, ya sabes... —No podía creerlo, ¿Mason disculpándose?

Sonreí, a decir verdad era bastante guapo, sería divertido jugar un rato con él. Estuve algunos minutos "coqueteándole", haciendo que mi mano caminara seductivamente por su pecho, la verdad estaba bastante divertido hablando con él hasta que mi precioso novio se acercó a nosotros a pisotones haciendo que lo mirara y mostrara una enorme sonrisa sincera.

—¡Harry! —Anuncié feliz de verle, hace varias horas que no lo hacía.

—Hola rulitos. —Dijo Mason con una sonrisa burlona, algo tramaba y era obvio, quería hacer molestar a Harry.

—Vámonos Lou.

—Eeh... —Reclamé. — Pero estaba entretenido hablando con Mason.

—Solo vámonos Lou. —Me tomó del brazo y me sacó de ahí.

Como íbamos a su casa, Harry había traído su auto.
Me abrió la puerta y yo algo enfurruñado subí colocándome a regañadientes el cinturón, cerró la puerta con fuerza exaltándome y fue al asiento del copiloto.
Llegamos rápidamente a su casa, me abrió la puerta y bajé seguía enfurruñado porque no me había dejado terminar de hablar con Mason, subí a pisotones seguido y él me siguió, estaba molesto, pero no tenia planeado comenzar una pelea por algo así.

—¿Tan enojado estás porque no te dejé hablar con el tipito ese?. —Me di vuelta y lo miré con el ceño fruncido. Justo él empieza una pelea que no quería.

—No es eso Harry, no es solo con Mason, nunca me dejas hablar con ningún chico, quiero amigos señora diva, no quiero estar todo el tiempo contigo, ¡también quiero mi espacio!. —Estaba soltando todo y algunas cosas demás, me encantaba estar todo el tiempo con él, sería genial si pudiera pasar cada segundo de mi vida con mi novio, pero igual quería amigos.

—¡Ah! ¿Así que ahora es mi culpa? Las únicas personas con las que hablan son alfas y ¡Son los que andan tras de ti buscando estar metidos en tu culo! No quiero eso, por fin te tengo, se supone que no deberían acercarse a ti ¡¿por qué siguen haciéndolo?! —Se estaba exaltando y yo me daba cuenta de eso, esto no iba en un buen rumbo pero ya no podía parar, me había enojado.

—¡Puedo cuidarme solo! ¡No soy un niño!

—¡No me demuestras eso! ¡Cada vez que te veo con Mason están con una cara coqueta y por más que me duele pareces una...! —Se calló, eso me molesto, si iba a decir algo que terminara de decirlo, que no lo corte a la mitad.

—¿Como una qué?. —Estaba callado y me estaba exasperando. — ¡CONTÉSTAME HARRY!

—¡Como una perra!. —Se tapó la boca de inmediato, no podía creer lo que acababa de decir. Lágrimas comenzaron a caer de mis ojos, bajé la cabeza, en serio no podía creerlo, todo estaba tan bien entre nosotros, ¿por qué pasaba esto?.

—Te pasaste Harry, metiste la pata. —Decía entre sollozos. — La metiste hasta el fondo. —Me di vuelta dispuesto a irme. Me abrazó por la espalda. — Harry suéltame.

—No lo haré. —Furioso golpeé su entrepierna haciendo que me soltara.

—Esto acabo. —Y me fui sin más.

Salí corriendo, no quería verlo, con esa simple palabra mi corazón se había roto, pero por dentro no quería perderlo, él lo era todo para mí, lo amaba.
Seguí corriendo hasta donde mis piernas me llevaran, no me importaba mucho dónde llegara, solo quería estar lo más separado de él, mis gruesas lágrimas no dejaban de caer y salían disparadas por el viento que chocaba con mi rostro.
Dejé de correr unos 10 minutos después, sin aliento. Apoyé mis manos en mis  rodillas intentando recuperar el aliento, las lágrimas no cesaban, ya me ardía la cara de tanto llorar, respiré hondo y caminé, ¿dónde estaba? El lugar era muy oscuro y solitario, ay dios... ¿Dónde me habré metido?.
Encontré una banca, me senté en ella, levanté mis piernas hasta que mis rodillas tocaron mi pecho y escondí mi rostro en ellas volviendo a llorar, ¿por qué siempre me pasaban las peores cosas a mí? ¿Tenía que haber pasado esto? ¿Tenía que habérseme ocurrido jugar con Mason cuando sabía que Harry venía a buscarme para irnos juntos? ¿Tenía que haberle seguido el juego a Mason? ¿Por qué mi vida es tan difícil? ¡QUIERO A HARRY DE VUELTA!, voy a tragar mi maldito orgullo y volveré con él, estando solo me dan unas ganas de verlo inmensas, mayor que mi puto orgullo.
Me levanté decidido, limpié mis lágrimas e intenté descifrar por dónde había venido.
Sentí una mano taparme los ojos y otra me ponía una toalla con un olor extraño, forcejee lo que más pude pero el suelo me estaba venciendo, débilmente golpeé al que hizo eso y me quedé dormido.

Ahora lo entiendo, ¡Me habían secuestrado! Pero... ¿quién?.
Me removí nuevamente intentando soltarme sin éxito y mierda que dolía. Suspiré rendido.
El lugar en donde estaba parecía un sótano que no había sido visitado en años, las maderas de las paredes rotas y caídas, pedazos de madera rota tiradas en el suelo, polvo por todas partes, que asco de lugar.
Sentí una puerta abrirse, unas pisadas hacer rechinar las escaleras de madera mientras bajada, mi sangre se heló, comencé a sudar frío, ¿quién era la persona que estaba bajando?.
Mi mente quedó en blanco cuando lo vi, no podía ser, él era raro pero no pensé que llegaría a eso.

—Mason... —Dije en un susurro ahogado.

—Hola Louis. —Sonrió de forma sádica.

United by fate {Larry Stylinson/Omegaverse}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora