Her name was Kylie |Suga BTS| #Wattys2016

Capítulo 19

Para mi suerte los coreanos no disfrutan mucho de ir al cine. O por lo menos no los martes. Compré los boletos por internet y aún habían asientos disponibles. Antes de entrar al lugar le mando un mensaje a Lin para que no se preocupe y para que no mande su spam.

Cuando entro al cine puedo distinguir a mi chico parado entre la multitud con muchas facilidad.

Trae puesta la misma mascada de la vez que lo encontré en Starbucks y su cabello se ve un poco diferente de la última vez. Tiene unos pequeños destellos turquesa. Se le ve muy bien.

Sonríe en cuanto me ve y viene hacia mí.

--Sugu--lo abrazo--. Ya te extrañaba.

--Hola.

--¿Estás listo para un poco de acción? Hoy es tu día de suerte--digo señalándolo.

Frunce las cejas divertido y su sonrisa se extiende.

--Confío en ti.

--Te lo prometo--camino hacia la sala y el me sigue--. Va a estar genial. La función está en inglés para que mi cabeza pueda entender algo. Espero que no te moleste. De todas formas tiene subtítulos en coreano.

--Me parece bien.

El día de hoy está muy callado. El Sugu serio ha vuelto.

--¿Por qué tan serio, amigo?

--Casi no me has dejado hablar.

--Creo que pasar tiempo sin mi te hace daño.

--Oh--pone una mano en su pecho--. ¿Ahora me llamas dañado?

Me río de mi misma. Oh Kylie, mejor ya cállate.

*****

Salimos de la función un poco después de dos horas. Vamos caminando por la calle principal y el clima no parece estar a mi favor.

--Para ser mi segunda vez en Daegu el calor ha empeorado. De haber sabido tal vez hubiera escogido otro lugar para pasar el verano.

--Entonces, ¿estás de vacaciones?

--Exactamente.

--¿Y qué te hizo regresar a mi ciudad?

¿Qué me hizo volver? Definitivamente no fue la calidez. Aún me ven feo cuando estoy sola en la ciudad solo porque tengo ojos redondos. Tampoco el idioma, por supuesto. ¿La comida? Tal vez. ¿La cultura? Puede ser. ¿El kpop? Es probable.

Pero no. No fue todo eso.

Después de mi diálogo interno y del silencio creciente entre nosotros decido acudir a mi mejor arma.

La honestidad.

--Tenía la esperanza de volver a verte--suelto de repente.

Siento su mirada. Sus ojos del color del chocolate sobre mí. Toda la vida me enseñaron que las verdades a medias no sirven. No tengo nada que perder.

--Quería estar contigo.

A veces eres muy melosa, Kylie.

Me muestra su sonrisa sincera, me ve un momento y no dice nada.

¿Por qué se queda callado?

Vaya. Un silencio de parte de Sugu se siente peor que un visto en Facebook.

¿Estará enfermo o algo así?

El calor aumenta en poco tiempo. Me agarro el cabello de forma improvisada con una pulsera cuando me siento demasiado sofocada y suelto un suspiro.

--¿Por qué no te has quitado tu mascada?--le pregunto.

--¿Debería?--responde con el ceño fruncido y sin verme.

--Sugu, estamos a más de treinta y cinco grados. Claro que deberías...¿Sugu?

Se ha recargado en una banca. Tiene una mano en su frente y sus ojos están cerrados con fuerza.

--¿Te encuentras bien?

Su brazo en la banca parece temblar.

--Rayos.

Lo ayudo a mantenerse de pie. Claro que no se encuentra bien.

--¿Puedes caminar?

Niega con la cabeza y respira con dificultad. Lo ayudo a sentarse. Toco su frente para ver si no tiene fiebre.

Casi me quemo.

--Insisto, deberías quitártela.

--No..

--Sólo quítatela, sugu.

Deshago el nudo y la aparto de su cuello. Y de haber sabido no lo hubiera hecho. No es muy notoria pero ahora sé por qué no quería quitársela.

Tiene una cicatriz que va desde su mentón hasta una de sus clavículas.

Mierda.

--Oh, yo... lo siento, no debí...

--Por favor--toma una respiración--, llama a emergencias.