Nos vemos a escondidas

Aceptó

Carlos río.
- Es broma ¿no? - me dijo.
- No - respondí.
- ¡Me estás pidiendo que te comparta! - me miró serio.
- Estoy confundida - respondí.
- ¿Y por eso yo tengo que verte a escondidas? - me preguntó.
- Piénsalo - fue lo último que dije antes de ponerme de pie y salir del restaurante.
Llegue a casa cansada, comenzaba a creer que mi idea de salir con ambos era un grave error y que mejor debía evitar cualquier tipo de sentimiento hacia ambos, no sé en qué momento me sucedió esto de enamorarme de ambos.
Salí de tomarme un baño y me coloqué mi pijama, estaba muy pensativa, y es que si a mí cualquier de ellos me pidiera eso pensaría que está loco y no aceptaría eso, no sé porque lo hice.
- ¡___________ te buscan! - gritó mi madre.
Baje y vi en la puerta a Carlos, estaba mirando al piso y se veía indeciso.
- ¿Qué sucede? - pregunté.
- ¿Puedo hablar contigo un segundo? - me preguntó.
Salimos de mi casa y nos sentamos en las escaleras, ninguno pronunció ni una palabra y esto comenzaba a hacerse muy incomodo.
- ¿Me dirás qué pasa? - pregunté después de unos minutos.
Me miró a los ojos, sabía que algo estaba pasando pero no podía entender claramente que era, comencé a ponerme muy nerviosa.
- Acepto - respondió.