Nos vemos a escondidas

Luis Fer y la canción

Luis Fer vivía enfrente de mi casa, su mamá siempre me había dicho que Luis Fer estaba enamorado de mí pero nunca le había creído, no hasta este día.
- Luis Fer! - grite a sus espaldas
- Madre mía! Me has asustado - comentó con una mano en su corazón
- Lo siento - lo abrace por la espalda y le di un beso en la mejilla
- Vale no importa, ven siéntate aquí, enfrente de mi - me dijo con su hermosa sonrisa
Lo mire y me di cuenta que tenía un brillo en los ojos, a él le encanta la música y supuse que había una sorpresa por la cuál debía emocionarme.
- Vale ya dime, ¿Porque tan feliz? - puse mi mano sobre su rodilla y lo mire
- Es que... Bueno yo... - dijo algo nervioso
- ¿Qué pasa Luis? - lo mire con un tono de preocupación
- Es que yo... Te escribí una canción - me dijo mirando al piso mientras se sonrojaba
- ¿Enserio? - pregunté emocionada - Vale, ¡quiero escucharla!
Tome asiento y lo mire, Luis Fer tocaba su guitarra y aveces alzaba la mirada y me veía a los ojos, una hermosa sonrisa estuvo todo el tiempo en su rostro mientras tocaba la canción, la letra era hermosa y no pude evitar sonrojarme con cada palabra de la canción y es que era una canción preciosa, tan preciosa que me la aprendí en seguida y pude cantar el coro con él: "Yo prefiero estar aquí, entre tus brazos domingo en la mañana, prefiero escuchar tu dulce voz, domingo en la mañana..." Termino la canción y lo mire enternecida.
- Vaya coincidencia, es domingo por la mañana - sonreí
- Si - No puedo evitar reír ante mi comentario
- ¿Qué hacen despiertos tan temprano? - dijo una voz a mis espaldas
Cuando me giré para ver vi a Carlos mi amigo desde la infancia, me pare y lo abrace, tenía una manera muy peculiar de abrazarme, siempre me atraía hacia él y me abrazaba con fuerza, cerraba los ojos y al soltarme suspiraba y me daba un beso en la mejilla.
- Le enseñe la canción que le escribí a _________ - respondió Luis Fer sonriendo
- Si, es hermosa, por cierto, gracias Luis Fer - le sonreí
- ¡Yo también quiero escucharla! - Apareció la mamá de Luis Fer por el patio
- No mamá que pena - respondió Luis Fer avergonzado
No puede evitar ver de una manera enternecida a Luis Fer y es que parece un niño chiquito cuando se sonroja porque algo le da pena.
- Venga pues, hice el desayuno y está listo, ¿Se quedan a desayunar? - nos miro a Carlos y a mí
- Claro señora, será un gusto, su comida es deliciosa - dijo Carlos mientras ayudaba a la mamá de Luis a cargar unas bolsas
Luis Fer dejó su guitarra en el césped y se paró.
- Bien, ¿Qué te pareció la canción?
Se acercó a mí y me tomo de la cintura, me puse muy nerviosa e intente retroceder pero fue un movimiento torpe, Luis Fer me atrajo más hacia él.