My Puddin

Vive

-Doctor Cooper, me alegro tanto de verle.- Sonreí. Su cuerpo se movía y pronunciaba palabras que no entendía gracias a la mordaza en su boca. Posé uno de mis pies en la cuerda floja y luego comencé a caminar hasta llegar al centro donde se encontraba mi antiguo colega colgado.- Estaba usted equivocado. Resulta que a Mr J le gustaban las chicas como yo, bueno no como la doctora Quinzel, sino como Harley.- Reí descontrolada.- Y yo tenía razón. Los bocazas culo gordo no le gustan.- Me incliné en la cuerda.- Ni a mí tampoco.- Le quité la mordaza.
- ¡Estáis enfermos! ¡Siempre supe que estabas loca! ¡Completamente loca!
- Pero pensabas que era una loca con un buen culo. Y tenías razón.
- Harley, baja de ahí, no tengo tiempo para tus juegos.- Oí la voz de Mr J desde abajo. Se me ocurrió una idea genial.
- ¡Cógeme Mr J! ¡Atrápame!- Me puse de espaldas a él, cerré los ojos y... me dejé caer.
Abrí los ojos mientras caía y reí al ver mi pelo volando por encima de mi cabeza, estar de vuelta era tan divertido...
Noté la falta de aire al chocar contra algo frío y ardiente al mismo tiempo, empapándome entre los fuertes olores y sentimientos contradictorios que sentía.

-¿Confías en mí?- Me susurró en el oído. Yo aspiré su aroma. Asentí convencida.- ¿Pero morirías por mí?
- Sí, te quiero puddin.- Sonrió en mi oreja y se apartó unos centímetros.
- Demasiado fácil.- Yo cerré los ojos.- ¿Vivirías por mí?
- Sí.- Mi pulsó se aceleró, miré hacia atrás, yo estaba en el borde y, bajo mí, a metros de distancia, tanques de los que salían gases y pompas. Mr J se acercó a mí y me acarició el rostro.
- Dilo. Porfi, porfi, porfi.- Tomé aire.
- Viviría por ti.- Se acercó a a mi.
- Pues entonces, vive.
Sentí el suelo abandonar mis pies y el viento golpear mi cuerpo durante la caída. Pensé que moriría, que todo había acabado, y por último, vi la cara de mi puddin con expresión de fastidio antes de tirarse a por mí, de lanzarse al vacío por mí.
El dolor fue indescriptible, mi piel se abrasó en un fuego que creía imposible de extinguir.
No podía respirar, no podía moverme.
Y luego todo mejoró. El ardor y las llamas se convirtieron en un extraño frescor y sentía placer al contacto del ácido con mi cuerpo.
Sentí unos fuertes brazos agarrarme y los jirones de mi ropa empapados contra mi piel.
Sobre el ácido blanco flotaba en una mezcla de colores los pigmentos de mi ropa creando un colorido remolino a mi alrededor. Sonreí y alcé la vista.
Su pálida piel y su eterna sonrisa, alcé mi mano para acariciarle el rostro, ahora éramos iguales, la misma incolora piel, hasta mi cabello había perdido el color.
Su mirada se volvió salvaje al ver mi sonrisa y desgarré los jirones restantes de su camisa.
Sin esperar su aprobación me acerqué a su boca y capturé sus labios entre los míos.
No tardó en responder, brusco, pero con la diversión que le caracterizaba. Mordí su labio y recibí un gruñido en respuesta.
- Bienvenida Harley.

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El primer beso de Jarley!!! ( O el primero que ha aparecido)
Y un poquito del pasado de Harley.
Os prometo que pronto vendrá más diversión.
Votad y comentad porfisss 😘😘😘