Capitulo V

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Era lunes por la mañana. Louis se encontraba en su primera clase del día, aun tenia sueño y seguía pensando en Harry, en su cuerpo y en esa pequeña sonrisa que le dio cuando se estaba masturbando. Nunca podría olvidarlo, había sido, ¡Increíble! Aunque un poco extraño. El castaño sonrió bajo mientras recordaba ese momento. Aun se sentía un poco avergonzado.

Las clases transcurrieron de lo más normal. Louis seguía siendo invisible para todos gracias al cielo. No quería llamar la atención y tampoco quería ser reconocido por ser el "hijo de la directora" por suerte solamente los de su clase sabían su identidad y por ente no se mentían con él, aunque no faltaba el tonto de turno.

Después de un largo día, Louis regreso a su habitación sintiéndose un poco incómodo ¿Qué le diría a Harry? ¿Tocarían el tema de anoche? ¿Pensaría Harry que era un pervertido por verlo masturbar? Louis se mordió el labio inferior y abrió la puerta sintiendo como su corazón se agitaba.

Lo primero que vio al entrar fue a Harry sentando en su silla mirando un libro con tranquilidad, Louis trago saliva y cerro con cuidado la puerta. Camino hacia su cama, dejo su mochila y se quitó la sudadera. ¿Qué debería decir? El silencio era muy incómodo.

Louis aún no estaba familiarizado con hablarle a otras personas, ni siquiera sabía cómo comenzar una conversación. El castaño saco algunas de sus libretas con toda la intención de hacer sus deberes.

—Deberías acomodar esas cajas, en la mañana me tropecé con una de ellas—menciono Harry sin dejar de mirar su libro.

Louis miro las cajas que un día atrás Liam le había llevado, era verdad, solamente las había dejado ahí botadas.

—Lo hare—susurro Louis caminando hacia ellas un poco apenado.

El castaño reviso la primera caja observando que contenía, casi nada se había salvado del incendio, ni siquiera su ropa, al menos tenía un poco para sobrevivir. Louis se quedó admirando aquellas cartas que había escrito para Harry, también había fotografías impresas de él, y muchas cosas más. Louis la cerro rápidamente y se maldijo en sus adentros, si Harry veía eso pensaría que era un enfermo o algo por el estilo.

Louis tomo la caja entre sus brazos y decidió colocarla en la parte superior del closet, donde se suponía que debía ir su maleta, ahí nadie nunca jamás la vería ni tendría por qué abrirla.

El castaño abrió con muchos trabajos la puerta del closet y de un movimiento rápido intento subirla, pero su estatura se lo impedía. Louis se maldijo en sus adentros, pensó que podría alcanzar, ahora tendría que subirse en una silla para acomodarla de mejor manera. Pero antes de que Louis pudiera bajar la caja, un fuerte brazo la acomodo en el sitio que correspondía.

Louis se quedó helado. Podía sentir a Harry demasiado cerca de él. Su trasero estaba chocando contra la parte más intimida del rizado. El de ojos celestes dio un respingo al sentir la mano de Harry tomándolo de la cintura.

—¿Por qué no me pides ayuda? —susurro Harry en el oído del menor.

—Gracias—sonrió bajo Louis mordiéndose el labio de manera lenta.

Harry respiro el dulce aroma de Louis y se acercó aún más al oído del castaño, podía sentir el cuerpo de aquel pequeño temblar por estar tan cerca.

—¿Por qué te pones tan nervioso? —pregunto con una pequeña sonrisa el rizado—¿Qué sucede?

Louis intento respirar de manera tranquila, pero sentía su corazón latir a mil por hora.

—N-No—susurro Louis intentando sonar tranquilo.

—¿Seguro? —el rizado se ayudó de su mano para comenzar a girar a Louis haciéndolo quedar frente a él.

Strange Love- Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora