"Como conocí al idiota"[Editando]

26- "Tenemos que hablar"

Narra Rayan:

La gente que había en los pasillos fotografiando hace unas horas se había disipado como el humo.

Me alegro. Me da mucha rabia que la gente se entrometan donde no les llaman. Y no me habría gustado tener que patearles el culo si se hubiesen entrometido en esto.

Cuando llego a la puerta de la habitación de Kayla, toco la puerta dándole tres toques con mis nudillos.

Rápidamente meto mi mano en los bolsillos con nerviosismo.

Escucho como alguien que se quien es mira por la mirilla.

Después unos murmurios.

La puerta se abre. Esperanzado levantó la mirada. Pero no es Kayla, es una chica rubia ojos de color verde. Era la mejor amiga de Kayla, no recuerdo su nombre.

—¿Tu no eres...? —pregunta la chica cuyo nombre no se.

Escucho pasos que se acercan hacia nosotros desde el interior de la habitación.

La puerta se abre de par en par dejando me ver a una triste Kayla.

Tiene el pelo desordenado, la nariz roja y los ojos hinchados, supongo que de llorari. Y lamentablemente es por mi, por lo ocurrido entre nosotros. Me rompo por dentro. Va descalza y se a quedado petrificada al verme.

Entonces es cuando reacciono

—Kayla, enserio necesito... —la pelirubia levanta su mano.

Creo que ya sabe quien soy pero, yo sigo sin saber como se llama.

—Necesita que la dejes en paz. —dice esta de la forma más seca posible.

Frunzo el ceño ¿Pero quien coño se cree?

—Este asunto no es de tu incumbencia. Así que no tomes decisiones por Kayla. —gruño.

Esta cambia la cara de tranquila a malhumorada. Se le están empezando a poner coloradas las mejillas y eso me dan unas ganas terribles de troncharme.

—¡Soy su mejor amiga y puedo tomar sus decisiones siempre que quiera! —exclama.

Kayla despierta del trance en el que estaba.

Gruño, se está pasando le daría una paliza si no fuera porque es una mujer.

—Kayla sabe decidir sus... —me interrumpe.

—Rayan, largate. —dice de una forma tan seca que jamás pensaría que fuese salir de su boca.

Se da media vuelta y entra en casa.

—¡Kayla espera! ¡Tenemos que hablar! —exclamo apoyando mi mano en el marco de la puerta.

Kayla lentamente vuelve a la puerta donde la mejor amiga de Kayla y yo estamos.

—Hablaremos. Pero cuando yo esté preparada y tú dejes de ser un cabrón. ¿Sabes qué es lo peor de todo? —la escucho atentamente— Que pensaba arreglar las cosas contigo, por eso fui a tu habitación. Y creo que no me arrepiento ¿sabes? Ahora se que de verdad, necesito alejarme de ti. Por mucho sentimientos encontrados que hayan. —la miro fijamente. No puede estar diciéndome esto. Acaba de admitir que siente cosas por mi.

Entre cierra la ojos. Y sé que está dolida. La he cagado. Por eso estaba en la habitación.

¿Porque no cerro la puerta Caity?

Rayan, el único que no cierra las puertas para hacer sexo eres tú.

Vuelve a girarse para entrar en la habitación y desaparece.