Cato y Clove . Una Historia Especial!

Capítulo 16 • Arreglos y Llegada

La mañana era calurosa, por lo que me vestí con un short azul cielo, una blusa blanca y zapatos blancos.

Mi recogí el pelo en una coleta, mientras buscaba algún signo de arrepentimiento de mi papá sobre una carta o algo.

Un olor a canela inundaba la cocina, pero no logre identificar de dónde provenía.

Después del ligero y pequeño desayuno que ingerí, lave mis dientes, pero de todos modos, tomé una manzana para el camino.

Y cuando apenas iba a dar el primer mordisco a la fruta, vi a una chica acercándose a mi con el rabillo del ojo.

-Clove- canturreó la chica, mientras agitaba sus manos hacia mí.

Llevaba un lindo vestido verde floreado, con un sombrerito parecido y zapatos bajos del mismo tono.

-Hola Jessy- sonreí.

-¿Cómo te va?-inquirió, sonriéndome.

-Hasta ahora, todo va perfecto-.

-Oh, genial- dijo, balanceándose de un lado a otro- Entonces, te quería proponer, que está semana fuera para nosotras ¿que te parece?-.

-¿Qué?- reí.

-Tú sabes, me dijiste que me dejarías llevarte a más tiendas del otro lado. Que recurrirás a mí para tu ropa-.

Mi estómago dio un vuelco.

-Cierto...- Demonios- Pero, creo que con la pierna me será difícil ir-.

Agh, ¿porqué no se me ocurren más excusas?

-Oh, no tienes que preocuparte por eso- dijo, guiñando el ojo- Mi papá tiene algunos contactos con agentes de la paz, que seguro nos prestan un auto-.

Rayos.

-¿De verdad? Me parece genial-.

-Bueno, en ese caso- se volteó, contoneándose hacia su casa- Nos vemos luego. Me avisas cariño-.

Sonreí. No podía decir que no al fin y al cabo.

☸»☸

Con un casi tropezón frente a la puerta, me colgué de la cerradura para entrar.

Y cuando lo hice, todo estaba iluminado.

Las ventanas redondas dejaban entrar más luz de la que antes había visto.

Las armas estaban en sus lugares, el perchero arreglado, todos poniendo moños blancos en las esquinas...

¡¿Qué le pasa al mundo el día de hoy?!

Sin saber muy bien que hacer, me dirigí a las gradas, y vi a Cetria corriendo como de un lado a otro.

La alcance con un poco de dificultad y le seguí el paso, pues todavía corría:

-Hola-.

-Oh, Clove- aminoro la marcha- ¿Cómo estas? Espero que bien- río.

-Lo estoy- me confundí, llevaba flechas en sus manos- ¿Que haces con eso? O... ¿Qué hacen todos?-.

Jadeó, habíamos llegado al puesto de los arcos, Cetria dejo flechas en su lugar.

-Todo se adelantó- volvió a jadear- El chico nuevo, llegara hoy. Bueno, vendrá con unos compañeros-.

-Puedo ayudar. ¿Qué hago?-.

-No lo se. Pregúntale a Kate- Y señalo a la jefa que traía

-¡No coloquen los moños muy juntos!- gritaba.

Me acerqué con lentitud hacia ella.

-¿Kate?-.

Se volteó hacia mi:

-Ah, ¿puedes ayudar llevando estas mantas con Lavinge? Está preparando la mesa-.

-¿Mes–

-¡Vamos, vamos!- me empujo al otro lado.

Vi a Lavinge colocando una pequeña mesa redonda en frente del puesto de las hachas.

-Hola- salude, mientras dejaba la tela detrás sobre la mesa.

-Hola- respondió, dándome una pequeña sonrisa.

-¿Que harás con esto?-pregunté, mientras desdoblaba una manta que tenía pinta de ser mantel.

-Umm, colocaré unos vasos- comentó en un susurro, riendo un poco- Ya sabes, para los invitados-.

Reí:

-Entonces... ¿Planeas conquistar al nuevo?-pregunté, con un toque de picardía en la voz.

Me miró y me lanzo una mirada provocativa:

-No lo sé- suspiro- Todo puede pasar. Pero no significa que sólo con llegar estaré con él-.

-Seguro que te lo querrás amarrar en minutos.

-¿En serio?

-¿Crees que no te conozco?- me acerqué a ella- Eres lo suficientemente zorra para andar con todos aquí.

-Gracias- se ruborizó- Tomaré eso como un cumplido.

Negué, divertida.

-¡Atención chicos! ¡Están por entrar! ¡Vengan aquí!- gritó Kate, llamando la atención de todos.

Dejamos todo como estuviera, y nos amontonamos detrás de ella.

Por la pequeña entró un hombre calvo, con una chamarra de cuero y unos pantalones grises.

Y unos segundos después 3 chicos, bastante bien físicamente, entraron tras él.

Traían los uniformes reglamentarios:

Ropa de entrenamiento (deportiva) negra, que se ceñían a sus musculosos cuerpos.

Parecían conformes con la decisión de unirse a nuestro lugar.

Pero sólo uno.

Un chico castaño con los brazos cruzados, daba la impresión de querer morirse antes de quedarse con nosotros.

Holi! 🐶

*inserta la voz de Sid*
¡Ya volvió por quien lloraban! 🙌💃
Okno 😂

Bueno, he podido escribir el capítulo con un poco más de velocidad :>

Espero les guste y vamoh! n.n9
Que estamos por llegar a los 2K Yay! 🎉🎁

Mushas gracias por todo 😭😋💞

Y también a @music2112 por haber comentado el capítulo anterior :3

Gracias de nuevo!
Y disfruten el capítulo 😘

Hasta la próxima!

Shau! 🐶🍹❤️🎉😎💞😉