Luna Negra (EN EDICION)

Cap 5

                                                                     -EDITADO-

POV. ARLET

Sentí un dolor punzante en mi cabeza, cuando moví una de mis manos esperaba sentir el frío metal de las esposas en mis muñecas pero nada impidió que siguiera moviendo mis manos, en cambio podía sentir que me encontraba en una superficie blanda y cálida.  Con pesar intente abrir mis ojos, habia bastante luz de eso estaba segura ya que mis ojos fueron cegados en cuanto logre abrirlos por completo, lleve una de mis manos a estos para cubrirlos, con ayuda de mi otra mano me impulse lo suficiente para estar sentada en lo que ahora sabía era una camilla.  No habia ningún cable o aguja en mis brazos, eso era un alivio...todos los aparatos de hospital me traen malos recuerdos...dejando esos pensamientos de lado mire mejor el lugar donde estaba, una habitación color crema, dos mesas al lado de la camilla, en una habia una jarra con agua y un vaso, en la otra que estaba mas cerca de la ventana tenía un florero. La habitacion era bastante grande, cerca de la puerta habia un sillon para tres, otra puerta que podría ser alguna especie de baño y frente de la cama habia una television.

Un fragmento de la noche anterior llegó a mi mente como una exhalación, la pelea que tuve con mis hermanos y como Ceres habia atravesado mi abdomen,  lleve mi mano al lugar afectado, sabía que no tendria marca alguna pero era un reflejo.  Bien podría intentar escapar de nuevo pero creo que por ahora tanto mi cerebro como mi cuerpo estan deacuerdo en que no tiene caso el intentarlo,  sería lo mismo de anoche, y si mis hermanos habia peleado conmigo por detenerme estoy segura que terminariamos en otra pelea...y siendo sincera no me apetecía dejarlos fuera de servicio y todo por algo innecesario, así que por ahora hasta que alguien apareciera en la habitación me dedicare a pensar con la cabeza fría y ver todas las posibilidades. 

A estas alturas mi padre debe estar mas que molesto, posiblemente planeando la manera de matarnos el mismo si es que "estábamos vivos",  otra posible reacción de el seria que nos encerrará en cuanto supiera que éramos parejas de unos lobos, o aun peor nos quitará nuestra sangre para seguir haciendo sus experimentos. Ahora con mis hermanos está la parte de que Ceres por lo que vi ya ha aceptado el hecho de estar emparejado con una loba, Kayla no parecía tan convencida pero ayudo a dejarme inconsciente a si que igual ella lo ha aceptado. Será un problema... yo sigo firme con mi decisión de no estar con el idiota del alpha... y bueno creo que estoy mas confundida, estoy comenzando a cuestionarme el por que de nuestra lucha contra los lobos y las otras criaturas sobrenaturales, si se que algunos amenazan a los humanos pero también hay otros que no lo hacen, a si que por que matarlos a todos?

Me dejé caer de nuevo en la cama mirando el blanco techo de la habitación, es mejor no pensar tanto en ello, ya no es mi problema, no puedo regresar con los cazadores, claro está que no me dejaré atrapar, y por otro lado no me quedaré en esta manada, primero para proteger a mis hermanos ya que mi padre puede comenzar a cazarnos y separados podre llevarlo por otro lado y dejar que ellos formen una vida, segundo y no menos importante para alejarme del alpha antes de que el dichoso vinculo no se fortalezca y que me sea difícil el irme. 

Escuche como la perilla de la puerta era girada y luego unos cuantos pasos adentrarse a la habitación. 

-ya despertaste- El alpha estaba cerca de la ventana con los brazos cruzados sobre su pecho y mantenía su mirada fija en mi.

-ARLET!!- Kayla se lanzó sobre de mi sacándome el aire, sus brazos se adueñaron de mi cuello y su rostro lo oculto en mi cuello, sentí como la primera de sus lágrimas caían en mi piel y luego vi como su cuerpo tenía leves temblores.Lleve mi mano libre a su cabeza y la acaricié con cuidado, a su lado podía ver a Ceres que hacía lo posible por mostrarse firme; pero podía ver sus ojos irritados, estire mi mano en su dirección, el parecía dudar entre tomarla o no, lo  conocia a la perfección ninguno podía estar molesto con los otros no importaba lo que sucediera.