Gracias Juán | Sebastian Villalobos

Capítulo 31: Bajo el Agua

La noche no demoró en llegar y mientras todos platicaban adentro Sebastian y yo fuimos a la piscina, la noche no podía estar mas presta para una noche romántica, mientras compartíamos un cigarrillo Sebastian y yo decidimos jugar un poco...

-¿Verdad o reto? –Aspiré profundamente

-Mmm verdad

-Bien. ¿Cuál es tu miedo mas ridículo?

-¡Oh no!

-Debes contestar

-Es la segunda ves que lo preguntas

-Ya sé jajaja es que es tan jajaja graciosa

-Ok nueva regla, ¡no se puede repetir las preguntas!

- ¡Responde!

- ¡Ush!... los gatos

-Jajajajajajaj ¿Cómo...?

- ¡No sé solo los odio! ¡Odio a los gatos! –Estalle nuevamente en risas.

-Esta será la última vez, lo juro

-Ok, es hora de mi venganza

-Adelante

-Te reto a que dejes de hablar con tu "amiguito" Mateo por... más o menos el resto de tu vida

-Es enserio –Lo miré con mi ceja arqueada, Mateo me cae bien, es un idiota si, pero estuvo conmigo cuando Sebastian se fue.

- ¡Auch!

-¡Oye! Si no me hubieras abandonado esa noche en la fiesta ni siquiera lo hubiera conocido

-¡Orgullosa!

- ¡Dramático! Elijo verdad –Le pasé el cigarrillo.

-Bueno –Aspiró- ¿Qué sentías al verme con Sofía?

-Eso sí que es un golpe bajo

-Dije que me vengaría, ¿Qué esperabas? -Miré al cielo, pero sentía el peso de su mirada, la ignoré y decidí sincerarme

-¿Alguna vez has sentido que el mundo se está rompiendo? Cuando los veo juntos siento que quiero correr, quiero gritar con todas mis fuerzas, quiero que mi alma vuelva a mi cuerpo, también quiero golpearte, pero eso no impediría que sean una pareja encantadora

-Siento algo parecido cuando el guapo de Mateo actúa como si fueras de su propiedad

-¿Verdad que está divino? –Se deshizo del cigarrillo y en una milésima de segundo lo tenía sobre mí. Delicadamente utilizó sus pulgares para abrir mi boca, suave y lentamente me pasó el humo del cigarrillo que culminó con el beso más apasionado que sirvió de apéndice para una mordida que me hizo estremecer de dolor.

-Tengo otra regla, si vuelves a mencionarlo te voy a castigar... y no será lindo

-Eso dolió demasiado ¿sabes?

-A mí me dolió mas

-Mateo está muy guapo... -Sus ojos se apartaron de los míos, levantó mis manos y las apretó fuerte contra el suelo, mi cuerpo empezaba a sentir una deliciosa combinación de frio y miedo, retomó su amenaza cuando sus labios se posaron a un lado de mi cuello, moví bruscamente mi cuerpo bajo el suyo al sentir como sus dientes desnudos dieron una mordida, sus manos apretaron con más fuerza las mías, su boca no dejaba mi cuello, y ente cada beso y mordida entendí su propósito

-Creo que me pasé un poco –Dijo mientras sus ojos me examinaban

-Solo un poco... verdad o reto