Conexión

Cinon

-Pues si, perdón por revisarlo pero..yo realmente tenía curiosidad por conocer más de ti, tu no me hablas de tu vida personal ni de tu pasado ¿Cómo es que realmente quieres que confíe en ti?

En vez de enfadarse, Estigma me mira algo apenado y sólo atina a decirme

-Creo que, es mejor que las personas sólo conozcan el lado positivo de mí, si te pones a pensar yo solo hice lo que la mayoría hace, mostrar la faceta más moldeable y falsa al conocer a alguien para no ahuyentarle de inmediato

Mientras me dice eso se escucha que alguien abre la puerta de entrada, al rato llega Nidae algo agotada

-Dejé las especias en la despensa por si quieren sacar algo....¿PERO QUE DIABLOS LES HA OCURRIDO A AMBOS?- dice al notar todas mis heridas

-Estábamos entrenando- le dice el rubio

-¿Es que acaso están locos o qué?- sigue ella

-No te preocupes, Estigma ahora va a curar las heridas que nos hemos hecho

-Ay menos mal, en verdad no te mides en algunas cosas, típico de un trinca- le dice a mi amigo mientras se retira- iré a tomar una siesta en el primer piso, cúralo rápido antes de que anochezca

-Avísame un par de minutos antes de que ocurra para alejarme de aquí y ver como retengo el cambio

Al decir esto Estigma rápidamente saca dos frascos de la canasta y esparce los líquidos en mis brazos causándome escalofríos

-Con estas fragancias te curaras del todo en unos diez minutos, ten paciencia- me dice calmándome considerablemente para luego sentarse al lado mío y luego él también vacía sus contenidos en su brazo y parte de su rostro a las dos heridas que le había hecho. Mis rasguños ya se habían regenerado del todo cuando Estigma vuelve a hablar- ahora dime Elois, ¿Qué leíste de mi diario?¿acaso te asustó que...- se detuvo bruscamente- ESTUPIDA GATA...LE DIJE QUE ME AVISARA...¿QUE RAYOS ES ESTO?

-¿Qué ocurre?- dije mientras  me paraba de la cama

-POR ALGUNA RAZÓN...YO...YO- empezó a gritar cada vez más fuerte- LLEVATE LOS FRASCOS Y EL MAPA...HUYE LO QUE MÁS PUEDAS DE MI

Con mucha agilidad obedecí a todo lo que me había ordenado y antes de partir le doy una última mirada, se encontraba rodeando su cabeza con ambas manos

-VETE CON NIDAE..¡AHORA!

Bajé las escaleras sin mirarlas ya que de tanto caminar en ellas me había aprendido su patrón, tomé mi cadena la coloqué de forma cruzada en mi tronco afirmándola con mi hombro y luego busqué a Nidae en todos los pisos con mirada panorámica pero no la encontré en ningún lado. Salí de la casa y corrí hacia donde transitaba más gente, me sorprendió el hecho de que aún no era de noche y que Estigma hubiera cambiado de la nada  -¿y ahora qué?- pensé, había tantas personas en las calles pero ninguna estaba pendiente de la otra, ahora que lo pensaba era muy similar a un día normal en cualquier ciudad de mi mundo. De repente escucho gritos a la distancia y al voltearme veo a Estigma acuchillando a una señora en la garganta iniciando un caos que de alguna forma me ayuda a escapar y escabullirme más fácilmente. Mientras más avanzaba las calles se volvían más angostas y más repletas de gente por lo que decidí adentrarme en un estilo de almacén y esperar a que Estigma me perdiera el rastro,  me senté en unas de las sillas y me quedé tieso como un árbol

-¿Qué se le ofrece señor? Hoy tenemos zanahorias con champiñones como menú de preferencia- me dice una señora al rato

-Pues..yo..la verdad no quiero pedir nada

-Entonces debe retirarse, sólo pueden entrar aquellos que se servirán de nuestros...-de la nada Estigma aparece en la puerta y me mira con ojos de odio mientras la señora horrorizada muda del susto comienza a retroceder lentamente

Me levanté de la silla dejando a la moza a merced de mi amigo mientras me dirijo a la cocina descaradamente, una avalancha de insultos me llegan por parte de los cocineros pero sin tomar caso omiso a ellos sigo corriendo por los pasillos saltando las frutas que se encontraban en el piso hasta lograr visualizar una puerta a unos pasos de mí. Al abrirla me encuentro nuevamente en la calle, ésta vez decido correr en dirección contraria a la entrada de la ciudad cambiando de calles de vez en cuando para que me perdiera el rastro- debe de sentir mi corazón, eso es un hecho por eso sabe exactamente donde me encuentro pero ¿no se supone que tenía la cordura para no matarme?- debo admitir que la capital era enorme y sus calles no parecían acabar llegó un momento en que las casas se terminaron y comenzaban unas enormes construcciones de metal muy similares a edificios modernos. Estaba tan cansado que decidí preguntar a quién sea una manera de movilizarme más rápido, una señora fue quien me indicó que una posibilidad era montar un animal salvaje

-¿Sabe dónde puedo encontrar alguno?- dije suspirando del cansancio y de la rabia al pensar que en ese momento cuando más la necesitaba Nidae me abandonaba

-Al cruzar esa esquina ¿me sigues?- dijo señalandome con el dedo un estilo de callejón

-Muchas gracias- caminé hacia donde me había indicado y me encontré con un sujeto de bastante altura que poseía a cinco animales amarrados con una cuerda, éstos estaban muy quietos demostrando que estaban amaestrados y al parecer sin presencia de inconformidad

-Necesito usar uno de ellos- dije

-Son 8 onzas de oro

-En estos momentos no tengo pero yo...

-8 onzas...punto- me dijo muy secamente comenzando a desesperarme- a menos que tengas un poco de hierba, eso sí que se acepta de manos abiertas

-Puedo ofrecerte esto- le mostré un pétalo de la flor de Ros- puede sanar e incluso regenerar cualquier herida

-¡NOOO! posees la majestuosa rosa Rein, ¡no me lo puedo creer! ¿Cómo la conseguiste? Digo, hay muy pocas ejemplares...dicen que las únicas que llegan a crearse son enviadas al presidente para su uso personal

-Y...¿Qué dices? ¿es un trato?

-Por supuesto, elije la bestia que más te agrade- de entre los cinco se hallaban una gacela, un caballo, un avestruz, un coyote y un leopardo amarillo de manchas negras

-El leopardo por favor

-Eh eh...no te confundas viajero, éste es un guepardo el animal terrestre más rápido conocido hasta el momento, no lo confundas con esa bestia tan perezosa- soltó al gato de la cuerda y rápidamente se inclinó hacia mi

-Un gusto amo, mi nombre es Cinon y estoy a vuestras órdenes- me alejé con él unos pasos del vendedor para acomodarme en su lomo mientras el tipo reía y bailaba por poseer el pétalo haciendo que un tipo de ira comenzara a consumirme

-Escucha Cinon, yo te daré la orden para que comiences a correr hacia el sur- saqué las cadenas y comencé a darles impulso

-Señor hay un monstruo que viene hacia nosotros- escuché- viene a toda velocidad

-Espérame- sintiendo la emoción absoluta esta vez en todo mi tronco lanzo mi arma hacia el sujeto clavando en seco el gancho en el pétalo para luego arrebatárselo de las manos- AHORA AVANZA- el guepardo comenzó a correr rápidamente dejando al hombre aún procesando lo que había pasado. Su velocidad era mucho más veloz que la de Nidae además su agilidad para esquivar y doblar calles era inigualable. Guardé la rosa en el bolso, coloqué la cadena en su posición habitual y voltee para ver la ubicación de Estigma, para mi sorpresa su rapidez no se comparaba con la de mi nuevo animal por lo que quedó su buena distancia atrás

De repente siento que Cinon baja considerablemente su velocidad preocupándome al instante

-¿Qué ocurre?

-Mis patas señor, algo le ha lanzado a mis patas- me agacho para revisarle y encuentro dos dardos clavados profundamente- se me adormece el cuerpo, no creo que pueda seguir- me decía tristemente el guepardo