Sensación

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Con un poco de entusiasmo comienzo a hurguetear los utensilios para buscar uno de mi agrado mientras Estigma se recuesta en su propia cama observando el techo del que colgaban delgadas lianas de sauce dándole la sensación de verdaderamente vivir en el tronco de un árbol

-Nidae fue a comprar comida para que no te debilites, ya que sólo tenemos comida ligera en esta casa como semillas y cenizas de sésamo- me dijo

-Gracias por tu preocupación amigo- respondí – después de todo yo no he hecho nada por ti, me siento algo desagradecido

-No te preocupes, tenemos una promesa ¿no es así?- me voltee para mirarlo y ví sus ojos impregnados en mí

-Por supuesto- seguí buscando y tomé con ambas manos un extraño paraguas tan pesado como el acero

-Elois..escucha...lo que acaba de ocurrir es que..¿recuerdas a mis compañeros de grupo?¿los de la formación?- asentí con la cabeza- pues...ellos de alguna manera y convencidos de que eres una amenaza para nuestra existencia han abandonado sus puestos de trabajo para...-se quedó un momento en silencio- terminar lo que Línoa había tratado de hacer

-Por eso quieres que elija un arma rápido, ellos vienen a aniquilarme...¿Por qué?

-No comprendo bien que fue lo que los motivó tan determinadamente a hacer eso, ellos saben que al dejar sus puestos dejan en peligro a todos los habitantes de la isla incluyendo a los iluminados, no logro descifrarlo

-¿Tan importante son los iluminados para ustedes, que incluso asesinan a medio mundo por proteger de ellos?- sin pensarlo dos veces Estigma respondió como si se tratase de un discurso habitual

-Si lo son, son la poca esperanza que tenemos de prevalecer el orden ya que son los últimos puros que quedan, en un principio todos los habitantes de la isla incluyéndome éramos como ellos pero lentamente nos hemos transformado en seres con comportamientos alejados a los iniciales y es por eso que los pocos que aún se mantienen intactos han sido enclaustrados en unas fortalezas al lado del océano no muy lejos de aquí, pero ya basta de hablar de estos temas sin importancia a nuestra situación ahora debemos concentrarnos en crear un plan para evadir a los muchachos

Las horas transcurrían y yo seguía buscando algún utensilio de mi interés mientras mi amigo dibujaba en unas hojas con una pluma un estilo de mapa que sólo él entendía. Después de mucho pensarlo me quedó agradando una cadena que brillaba de lo pulida que estaba y que tenía dos pequeños ganchos en cada extremo

-Me quedo con esto- dije, mostrando el arma con delicadeza

-Buena elección , esa cadena es muy similar a la que yo ocupaba cuando oscurece pero esa es más larga y pesada, perfecta para la batalla, aunque su uso requiere de mucho tiempo y dedicación, cosa que no tienes así que te aconsejo escoger algo más a tu nivel

-No, me quedo con esto- refuté

Estigma algo risueño deja de escribir para acercarse a mí y colocarse al frente

-Ya veo, tienes una arma en tus manos y ya crees tener control sobre los demás, veamos si eres capaz de usarla-de repente él saca sus patas arácnidas y se pone en posición de ataque- tenemos muy poco tiempo para que aprendas a defenderte, por lo menos con que sepas golpear me conformo- con todas sus energías da un salto y se aferra al tejado para moverse más libremente- escucha Elois, la mejor manera de aprender rápido y correctamente algo es por las malas, así que no tendré tanta compasión cuanto empiece el entrenamiento- tomé la cadena con todas mis fuerzas y comencé a girarlas para que fueran más mortales ya que yo tampoco iba a retenerme con él- ahora, iniciamos

Estigma comienza a caminar rápido apoyándose de algunas patas y las otras las mantiene abajo para herirme, veo que una se acerca a mi rostro y retrocedo involuntariamente para esquivarlo pero otra de ellas se clava en mi abdomen hiriéndome profundamente haciéndome agachar de inmediato

-Rayos- dice el rubio mientras se baja a inspeccionarme- creo que me sobrepase, ¿estás bien?- en ese leve descuido tomo la cadena y con uno de los ganchos le rompo parte del brazo, mi socio al notarlo en vez de asustarse se ríe con entusiasmo- BIEN, así se hace, debes aprovechar cada instante- mientras decía eso otra pata me atraviesa parte de la espalda- pero nunca debes gritar tu victoria antes de tiempo

Pese al dolor que sentía no se comparaba en nada a lo que había experimentado cuando Estigma dormido me había atravesado el pecho y por eso deduje que aquellos golpes no me habían afectado como realmente deberían haberme hecho. Nuevamente apreté la cadena pero esta vez me acerqué a mi compañero haciéndola girar para que se alejara de mí, éste aun riendo se escabulle con movimiento casi fugases y cada vez que se acercaba a mí me hería lo que podía con rasguños tanto superficialmente como mortalmente, me encontré al medio de una gran estampida de ataques que sencillamente no me dejaban ni siquiera mirar que ocurría alrededor sólo escuchaba pasos y visualizaba leves siluetas de lo que debería ser su cuerpo, llegó un momento en que comencé ha hartarme de sus movimientos y de mi insignificante contrataque haciendo que una extraña sensación en mi pecho comenzara a emerger, describirlo era casi imposible se podría decir que eran todas las emociones existentes unidas en una sola y que me hacía sentir verdaderamente cómodo, de repente sin pensarlo demasiado lanzo la cadena con todas mis fuerzas hacia atrás y realizo un movimiento ondulado de tal forma que Estigma además de ser lastimado gravemente en la cabeza es capturado por mi arma quedando de rodillas frente a mí

-¿Qué tal lo he hecho?- dije con una sonrisa, la sensación antes mencionada ya había desaparecido. En vez de alegrarse Estigma me mira extrañado y preocupado

-¿Cómo...como lo hiciste?- dijo mientras me miraba atentamente- ¿no sientes dolor acaso?..date un vistazo- miré mis brazos y casi me voy de espaldas al notar que todos mis brazos estaban con rasguños profundos, parecían unos exóticos tatuajes color rojo. Suelto la cadena de mis manos y rápidamente busco en mi bolso la rosa blanca para curarme

-Alto, no uses eso- me interrumpe Estigma- ya te he dicho que esa planta es muy valiosa, no debes desperdiciarla en heridas como esas yo tengo medicinas que pueden curarte de inmediato

Fui obligado a permanecer sentado en su cama mientras él buscaba los medicamentos en el piso de abajo- este es el momento- pensé- ahora puedo preguntarle sobre el diario, haré como que recién lo acabo que encontrar y no tendrá otra escapatoria que explicarme su vida- me acerco a donde estaba el diario para comenzar mi plan, pero éste había desaparecido

-¿Te gusta el sabor de limón o el de calabaza?- me pregunta a la distancia

-Limón- le respondo mientras busco entre los muebles el diario, cajón con por cajón reviso cada rincón pero ni rastro de él, me agacho para revisar debajo de la cama cuando un tosido me interrumpe la búsqueda

-¿Buscas esto?- escucho, me levanto para observar a Estigma y éste llega con una canasta repleta de pequeños frascos en la mano izquierda mientras que con la derecha levantaba su propio diario revelando que sabía que yo tenía conocimiento de él


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