Reunión

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Me desperté a mitad de un extraño sueño donde caía a un negro precipicio sin fin la sensación de caerse me hizo levantarme de una salto, decidí salir de la cama he inspeccionar por mi cuenta el lugar. Abrí la puerta y noté que el sol aún no salía lo que me daba tiempo de mirar la aldea antes de encontrarme con los raritos, a pasos fuertes y decididos avancé por una prado verdoso que tenía huellas de haber sido transitada muchas veces, le seguí el rastro hasta llegar a un mini bosque con unos extraños árboles que tenían los troncos hacia todos lados menos en línea recta- ya casi nada me sorprende-pensé, estuve hací un tiempo hasta llegar a un tipo de poblado compuesto de muchas casitas distribuidas aleatoriamente pero para mi sorpresa estaban completamente deshabitadas, busqué por todos lados a los habitantes pero todas las casas estaban vacías- ¿Dónde están todos?- seguí avanzando y llegué a un estilo de pozo a mitad de una llanura totalmente abandonado-Sin guardias, ya me lo imaginaba- un rayo de sol llegó a mis ojos avisándome que la excursión había finalizado

Corrí a toda velocidad hacia mi cabaña retomando el camino que había tomado y para sorpresa mía veo a los seis afuera de la cabaña vecina mirándome extrañados

-¿Qué hacías allá?- me hablo primero Urso- Ros ¿acaso le dijiste que en este lugar solo viven los guardias nocturnos? Por favor no me digas que lo olvidaste, sabes el enorme riesgo que corre al rondar sólo por esos lugares

-Si se lo dije- gritó la niña- no me retes es él el que quería inspeccionar el lugar trate de detenerlo pero él insistía

-No mientas, tu no me lo dijiste- dije mirando muy seriamente a la pequeña- insignificante mentirosa -tenía mucha rabia con ella dado lo acontecido anoche y ésta inesperadamente se puso a llorar descontroladamente

-¿Es cierto eso renacuaja?- dijo Ari con aire amenazador-¿Por qué acabas de mentir? Tú sabes perfectamente que les ocurre a los mentirosos

-NO QUIERO QUE NERO ME CASTIGUE- gritó a todo pulmón- OTRA VEZ NO- diciendo esto corrió hacia los árboles hasta perderse en ellos

Los tipos al ver el escándalo comenzaron a entrar a la cabaña uno en uno muy tranquilamente, el último en quedarse afuera fue Estigma quien se acercó a mi lentamente y me hizo señales para alejarnos un poco de ahí, cuando estuvimos a una distancia prudente para que los demás no nos escucharan comenzó a hablarme

-¿Estás seguro que Ros no te lo dijo?, es extraño dado que ella nunca miente

-De lo poco que recuerdo no me lo dijo, pero ayer no me sentía muy bien así que en una de esas si me advirtió y yo no estaba en todos mis sentidos para recordarlo- Estigma se notó más tranquilo y cambié el tema para sacarme de dudas- a propósito ¿Cuál es la habilidad de esos tres sujetos? Es que no los he visto usándolos

-Que ellos mismos te lo digan, ven entremos a la guarida- con mucha rapidez agarré su hombro para que se detuviera y preguntarle

-Ahora que estamos solos dime ¿Por qué ustedes son distintos a los iluminados?-nuevamente su cara perdió todo tipo de emoción y quedo perplejo ante mi pregunta

-No entiendo lo que me dices

-No me vengas con excusas, deja de hacerte el tonto y dime la verdad, yo no he hecho nada malo para que me oculten las cosas de esta manera, yo solo quiero volver a mi casa- lo miré buscando alguna misericordia en sus ojos, mis ojos estaban vidriosos ya que la situación estaba empezando a desesperarme. Estigma mirando hacia ambos lados como para verificar que no había nadie cerca me responde resignado susurrándome muy despacio a mi oído "Pronto te diré, Nero nos vigila..los árboles son sus diligentes" diciendo esto comienza a reírse falsamente y me toma del brazo

-En verdad alucinaste toda la noche, hasta creas conspiraciones en tu mente, ven vamos a la cabaña los demás deben estar esperándonos y deben estar aburridos

La reunión resultó ser una presentación formal de cada uno de ellos, lo que logré entender fue lo siguiente, ellos eran miembros de un escuadrón especial en la isla su función era aniquilar y mantener alejados a los entes que pasaran el límite, éste se encontraba a un radio de diez metros desde el océano hacia la laguna en que aparecí. El primero en la formación era Ari y su función era ser el guía en las misiones, su habilidad consistía en poseer pequeños clavos en las palmas de sus manos y romper todo tipo de materiales con ellas. El segundo puesto lo tenía Línoa el tipo de la mascarilla, él poseía un machete con una característica particular, además de cortar fácilmente lo que sea el arma al tocar cualquier ser viviente garantizaba una gangrena mortal. Los demás no necesitaron presentación ya que algo los conocía le seguía Urso con su lápiz, luego Púa con sus pinches y por último Estigma con sus dardos ordenados en este orden en la formación, a ellos ya los había visto en acción así que no hablaron del tema al respecto

-Disculpen, la pequeña que se fue llorando ¿es la última en la formación cierto?

-Ella no es parte del batallón- dijo Urso algo entrecortado- verás ella es diferente a nosotros

No podía creerlo, más distinta a ellos ¿en serio? Qué clase de monstruo era Ros para que sus propios compañeros dijeran eso

-Es la hermana de Nero- dijo inesperadamente Púa que ya estaba harta de la asamblea- la pendeja consentida es también su aprendiz y a nosotros nos dio la estúpida tarea de cuidarla mientras él quien sabe que idioteces hace en la capital

-Últimamente hay muchos problemas internos con los líderes, están vueltos locos con la situación actual-dijo Estigma mirándome a los ojos

-Pero él no debería meterse en esos asuntos, le hace mal para su alma, al final terminara siendo un amargado sin vida- rio Línoa mientras afilaba su machete con una piedra

-Prácticamente ya lo es- exclamó Ari- quien tiene todas las habilidades para dirigir a la nación soy yo ya que nací para eso, no entiendo como lo líderes no se dan cuenta de mi potencial

-Tal vez lo notarían si empezaras a hablar de otras personas que no sean tú-respondió Estigma comenzando a enfadarse

-Por lo menos tengo oficialmente autoridad en el grupo

-Ya paren por favor- interrumpió Urso con amabilidad-¿o es que acaso nunca se llevarán bien ustedes dos?

La mañana transcurrió de lo más normal, me entretuve bastante con sus historias y peleas tanto que hasta disfruté de sus compañías, por un leve segundo olvidé mis problemas y los enigmas que ese bosque me daba sólo sentí paz y compañerismo, pero volví a la realidad cuando Línoa habló

-No quiero arruinar la fiesta pero...¿no debería ya haber llegado Ros?

-Pensé que volvería por su cuenta-refutó Urso asustado

Todos se quedaron mirándose las caras con cierta incertidumbre y salieron de la cabaña para llamarla, yo seguí los mismos pasos que ellos

-ROOOOOS....ROS VEN...ROSIIII ¿DONDE ESTAS?- gritaban, al no recibir ninguna señal por parte de la chica decidieron ir a su búsqueda

-Nos dividiremos en tres grupos de dos e iremos a buscarla si alguien la encuentra quiero que envíen un tipo de señal al cielo, debemos apurarnos o en serio tendremos graves problemas con el jefe- dijo Ari con firmeza

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