Manto rojo

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Nidae tratando de protegerme se puso en posición de querer lanzarse hacia su presa mientras Estigma cambiaba la forma de sus patas a unas más puntiagudas y mortíferas, la leoparda empezó a gruñir muy roncamente mostrando sus colmillos para tratar de intimidar a su contrincante pero éste sin inmutarse la ataca sin compasión atravesándole parte de la costilla, ella sin titubear lo muerde mortalmente en el cuello pero sin tener resultado alguno, a continuación veo que la sangre empieza a emanar muy fluidamente de la piel del animal haciendo que llegara hasta mis pies, yo levantándome lentamente pienso en escapar, pero dejar que masacraran a mi acompañante era un acto demasiado cobarde incluso para mí así que seguí buscando una solución con el poco razonamiento que me quedaba

Mientras estaba en esto Estigma clava una pata con mucha fuerza en su ojo causando más maullidos de ira y desesperación

-YA BASTA- grité sin pensarlo, mis palabras al parecer surgieron efecto dado que el chico se detuvo al percatarse de mi presencia- DEJALA AHORA- obedeciendo a mi petición arroja al animal contra la chimenea dejándola inconsciente mientras se quemaba lentamente con las brasas, Estigma me rodeó con todas sus patas para que no pudiera escapar y con una extraña voz metálica dijo

-Este es el precio que debo pagar por tratar de oponerme a mi misión- sus dientes triangulares me hacían temblar cada vez que se mostraban- no creas que lo disfruto

Yo que en ese entonces estaba fuera de sí, trate con toda mi voluntad permanecer cuerdo para seguirle la conversación ya que su presencia al estar demasiado cerca de seguro hacía orinar incluso al más valiente

-Deja de asesinar- dije casi en un susurro- sus ojos eran tan intimidantes que mi cuerpo empezó a temblar solo

-Se me ha dado la labor de exterminar a todo ser viviente una vez mi lado oscuro se despierte, pero ....- me miró como si yo fuera un insecto insignificante y empezó a retirar lentamente sus extremidades- tengo el control suficiente como para no matarte

-Entonces si posees control sobre ti porque....

-Porque si me detengo los entes matarán a todos los iluminados de la isla- caminó hacia la salida para continuar con su masacre- dale al animal un pétalo de seguro la sanará, si es que aún vive- salió del refugio dándose impulso con las patas grises lanzando tierra por doquier

Corrí hacia Nideae que estaba repleta de quemaduras y le puse en la boca uno de los pétalos que me había dado Ros y moví su boca para que pasara por su garganta, ella con la poca conciencia que le quedaba la masticó y se la comió muy lentamente. Me aparté de ella para mirar hacia afuera ya que no quería quedarme con los brazos cruzados mientras algo tan sádico ocurría ante mis ojos, salí de la pocilga y caminé hacia la calle con pasos lentos pero decididos, la tierra parecía estar pintada con enormes manchas rojas y cuerpos sin vida en un estilo de manto infernal, a lo lejos estaba Estigma jugando con un corazón completamente negro pasándola de una mano a otra, eso me hizo recordar lo que Estigma me había dicho en un principio "todos tenemos el corazón negro" ¿acaso sabrán que tengo el corazón rojo? ¿es por eso que me llaman Mictian y quieren llevarme a la capital? eso me hizo pensar que mi llegada estaba premeditada desde hace mucho tiempo y si esa era el caso esta gente iba a retrasar mi vuelta a casa

El sol empezó a salir del horizonte anunciando el fin de esta pesadilla, Estigma deja caer el corazón para luego pisarlo descaradamente, esconde sus patas y su apariencia vuelve a ser la de antes, incluso las manchas de sangre en su ropa desaparecen

-Es hora de irnos- dice sin siquiera mirarme dándome a entender que ya sabía que lo vigilaba- dile a Nidae que nos retiramos- avanzó por el camino dejándome totalmente solo entre la evidencia del genocidio. Me doy media vuelta para buscarla pero a lo lejos veo a la leoparda caminar hacia mi con suma precaución, sus heridas ya habían sanado del todo y su expresión era similar a la que le conocí

-Menos mal ya amaneció- dijo con un intento de sonrisa

-Yo...no lo entiendo, él dijo que sólo cambiaba una vez y era después del contagio

-Eso fue sólo para tranquilizarte o ¿acaso crees que te hubieras quedado con nosotros si te hubiésemos dicho la verdad?

-Aún no me la dicen en su totalidad- dije algo deprimido

-A veces es mejor vivir con el menor conocimiento de las cosas, te ahorras un mal momento y en la mayoría de los casos mantienes la comodidad entre la sociedad

-Sabes que tarde o temprano sabré todo

-Por supuesto- caminó al frente mío rozando su cola en mi rostro- Y cuando eso suceda serás tú el que determine nuestro futuro sea para bien o para mal

-OIGAN APUREN EL ASUNTO-gritó Estigma, éste se encontraba en la salida del pueblo

-Es mejor que le obedezcamos o ese trinca nos arrancará las vísceras- ella siguió caminando hasta donde estaba Estigma pero yo me quedé unos segundos intacto para pedir por las almas de los fallecidos "perdónenme por no haber hecho algo para impedir sus muertes, pero soy solo un débil ser humano que quiere dejar este lugar a toda costa para vivir y realizar sus futuras metas, tal vez es un deseo egoísta pero al fin y al cabo ¿no todos los seres vivos pensamos así? La ley del superviviente más apto siempre está presente....y yo no soy la excepción" no pude resistir a sonreír mientras pensaba en ello

-Aaa....yuuu...da.....-se escuchó decir, me quedé perplejo ante el llamado ya que todos a mi alrededor estaban muertos, de repente veo que uno de los presuntos cadáveres empieza a mover unos de sus brazos- ¡Aquiiiii! ......- era el tipo de la carreta que había sobrevivido al esconder la mayor parte de su cuerpo a excepción de las piernas en el carro, me acerqué rápidamente a él y le regalé un pétalo para que sobreviviera

-Coma esto señor, a lo mejor sobrevive- ese "a lo mejor" lo decía en serio ya que ambas piernas estaban prácticamente desgarradas de su cadera

-Que Mormo el grande te bendiga jovencito- me respondió mientras se lo echaba a la boca

-ELOOOOIS- escuche decir atrás mío, dejé al pobre hombre en su escondite y caminé hacia donde mis acompañantes

-¿Qué estabas mirando tanto?- me pregunta Estigma mientras se sube al lomo de Nidae

-Le dí a una de tus víctimas una segunda oportunidad de vivir- el rubio sin responderme espera a que me siente atrás de él y ordena al animal a continuar con el viaje

ConexiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora