Capítulo 6

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Sam salió de su clase de danza y se dirigió a la salida del edificio. Observó a Ashton doblar la esquina, con sus rizos alborotados y las manos detrás de su espalda, embozó una enorme sonrisa al ver a Sam, quien se la devolvió y caminó hasta él. Cuando se encontraron frente a frente, el chico le extendió una paleta.

-Para endulzarte el día. – Dijo.

-Gracias, Ash. – Tomó la paleta y lo besó suavemente. – Creí que estabas en el cine.

-Estaba. – Rió. – Cuando terminó la película le pregunté a Abby cómo llegar aquí para sorprenderte. – La besó. – Sorpresa.

-Eres tan tierno. – Sam jugó con sus rizos. – ¿Qué tal la película?

-¡Genial! – Exclamó. – Abby casi lloró del susto. No le digas que te dije, por favor. Ya estoy aprendiendo con quien no debo meterme para no terminar lastimado o humillado.

Sam rió.

-¡También eres listo! – Lo besó en donde se formaba su hoyuelo. – No debes hacerle daño a Meli, ni Helena, ni Oliver, especialmente.

-Ellos parecen ser inofensivos.

-Lo son. – Asintió. – Pero despertaras la sed de venganza de los demás. – Explicó. – Y eso es lo peligroso.

-Lo tomaré en cuenta. – La volvió a besar, esta vez fue más largo, suave y cálido. Sonreían en el beso, abrazados. – Sam. – Susurró en sus labios. – Tengo que preguntarte algo muy importante.

Sam sentía como su corazón saldría despedido de su cuerpo en cualquier momento, Ashton la miraba fijamente con ternura.

-¡Samantha! – Escuchó que su madre la llamaba por detrás.

-Me tengo que ir, lo siento. – Abrazó rápidamente a Ashton.

-No te preocupes. Intentaré liberarme mañana, tengo asuntos ¿Familiares? – Dijo no muy convencido de lo último.

-Está bien, adiós.

Se despidió con la mano y entró al auto de su madre.

-¿Quién es él? – Preguntó después de besar la mejilla de su hija.

-Un nuevo compañero de escuela. – Respondió. – Nos encontramos por casualidad.

-Es muy lindo. – Su madre sonrió y arrancó el auto.

-Sí, es algo lindo.
...

Oliver estacionó frente a la casa de Abby, esta se quedó mirando la casa desde la ventanilla del auto. Su hermana no contestaba el teléfono, era obvio que seguía con Michael. No quería entrar a su casa, no quería escuchar a sus padres. Dirigió su mirada al chico, que la miraba con el ceño fruncido.

-Oli. ¿Podrías quedarte un rato? – Preguntó sorprendiéndolo.

-Humm. Sí, seguro. – Apagó el motor y sonrió hacia ella. – ¿Estás segura de que no tienes nada que decirme?

Esta asintió con la cabeza y salió del auto. Dudó unos instantes antes de abrir la puerta principal deseando que sus padres no estuvieran en casa. Por desgracia, encontró a su padre sentado en el sofá viendo televisión.

-Hola, princesa. ¿Te divertiste? – Preguntó al ver a su hija parada en la entrada.

-Buenas noches, señor Lawrence. – Dijo Oliver entrando a la sala.

-¡Oliver! ¿Cómo está tu padre?

-Bien, gracias.

-¿Dónde está mamá? – Abby preguntó sin atreverse a cruzar la sala.

Thunder. (5sos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora