ONE SHOTS - ziam, sterek, etc

STEREK: Fue como una descarga

Me retumbaba la cabeza y la oscuridad se disipaba mientras intentaba abrir los ojos, trate de mover mis manos pero el golpe del metal me avisaron que estaba capturado y atado, gruñí de impotencia, cuando tuve la visión del lugar no pude notar algo en específico ya que todo estaba oscuro, las luces apagadas y yo estaba totalmente acostado sobre una cama, lo deduje por la suavidad de las telas en mi cuerpo, jadee y gruñí al darme cuenta de ese punto que no me había percatado, estaba totalmente desnudo, moví mis piernas pero estas también estaban atadas con metal duro y frio, observe a mis costados pero no veía nada que me ayudara a escapar.

Podía sentir el frio recorrer mi cuerpo y entendí del porque fue tan fácil ser secuestrado, eran las doce de la noche y había eclipse lunar, por lo cual estaría débil por una hora, intente moverme de nuevo pero todo era en vano.

Mi cuerpo se estremeció cuando una mano recorre mi brazo derecho, observe a mi costado y no podía descubrir quién era aquel hombre que me tocaba.

--¿Quién eres?—pregunte gruñendo.

--alguien que te hará gemir y disfrutar—todo mi cuerpo reacciono ante esas palabras pero ya sabía de quien se trataba y me sentí un poco confundido.

--¿Pero qué mierda Stiles?—dije forcejeando y escuche una leve risa--¿Por qué me has secuestrado, atado a tu cama y desnudado?

Otra vez una risa que calo hasta lo más profundo de mi cuerpo.

--Creo que ya sabes la razón por la cual estas desnudo—por supuesto que lo sabía pero no lo diría en voz alta—y te he secuestrado porque nunca me has dejado ser quien manda en la cama y quiero probar cosas nuevas.

--espera...--me atragante con mi propia saliva--... ¿de qué carajo estás hablando? ¿Qué significa eso?

--también tienes la respuesta a esa pregunta—Stiles me susurró al oído mordiendo mi lóbulo y haciéndome gemir—hoy seré yo quien te haga el amor de una manera que sentirás que tocaras el cielo con las manos y que veras el sistema solar en tu cabeza por la excitación.

Ya de por si estaba excitado pero eso tampoco le diría a Stiles, por primera vez me sentía impotente al no poder defenderme y tampoco es que tenía tantas ganas de hacerlo, pero lo que si me descontrolaba un poco era lo que Stiles me quería hacer, llevaba dos meses quizás pidiéndome ser el que va arriba por supuesto que lo ponía arriba pero para que se empalara el mismo, pero ahora viendo el brillo en su rostro, es diferente, además que es eclipse lunar y he perdido mi fuerza.

Me estremecí al sentir la respiración de mi pequeño en mi entrepierna, su lengua se movió por la ingle y fue subiendo hasta mi pene, su lengua recorrió toda mi longitud, hasta llegar al glande y lo engullo todo, había practicado mucho tiempo para poder comérselo todo, su cabeza subía y bajaba y sentía como sus labios hacían presión, sus manos masajeaban todo lo que tenía a su alcance de mi cuerpo.

--Más que sea puedes prender la luz—gruñí.

--no—su aliento choco contra mis bolas haciéndome extasiar.

Volvió a su trabajo de succionar mi pene pero sus manos ya no estaban en mi abdomen, más bien estaban acunando mi trasero, en eso no tenía problema siempre los tocaba cuando hacíamos el amor pero cuando su mano incursiono en medio de ellas fue cuando jadee, su dedo dibujaba círculos alrededor de mi entrada y me sentía un poco incómodo, nadie había tocado esa parte de mi cuerpo, su saliva caía por mis bolas hasta mi entrada donde su dedo se lubricaba, me sentí más incómodo cuando hizo presión con su dedo.

Abrí mucho mis ojos cuando su dedo entro en totalidad en mi entrada, tal vez era la excitación que no sentí dolor, empezó a sacarlo y meterlo con lentitud al mismo tiempo hacia movimientos circulares, yo me encontraba en estado de shock, y de un momento a otro ya no tenía solo un dedo dentro mío, tenía ya tres de sus dedos jugando con mi virginal entrada. El sexo oral que me practicaba me hacía sentir millones de cosas pero que juegue con mi recto de esa manera tan erótica, que quizás lo aprendió de mí mismo cuando le hago a él tales cosas, me hacía excitar tanto que podía sentir mis ojos acuosos.