Bailo por las calles solitarias de mi mente.
Acaricio tu pelo mientras te ves callado,
y a la vez gritando a voz desgarrada.
Te canto una nana para dormirte,
y me caigo varias veces bailando sobre tu pecho.
Labios entreabiertos,
de los que siguen cayendo al vacío los versos.
La carretera se acaba,
y me zambullo en el abismo,
confiando que haya un seguro abajo
que en realidad nunca estuvo ahí.
Al final todos los caminos me llevaron a Roma,
y planto mi bandera en la cima del Coliseo.
Sigo cantando.
¿Qué tal si te cuento varias gestas,
te pinto varias constelaciones,
y observo los pétalos de las margaritas que ya no necesito?
Todo para que no te marches esta noche,
porque ya son las doce
y eres el deseo que sigo pidiendo una y otra vez a pesar de tenerte.
Entre tantas cosas que podrías haber sido,
eres mío.
Pero la guerra llega a su fin,
y llamo a los enfermeros para que vayan retirando los cuerpos de los que han caído.
Al final la tregua estaba en tus manos,
y sello la paz con mis labios.
Entre tan mío que eres,
elegiste ser la obra de arte más bonita del museo de mi vida.
Y ya puedes bajar del pedestal,
que he terminado de poetizarte.
Lo siento mi eterno trece,
siento si no fui suficiente.
Pero la noche me consume,
y esto es una despedida.
Por lo menos ahora puedo decir que te amé bien.
YOU ARE READING
Trece poemas de amor; Trece poemas de olvido ⚡️ @nymereida
PoetryEn trece días me enamoré de ti, y en trece días te olvidaré. @nymereida