SHORT HAIR| kim taehyung| español

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Me di cuenta que estaba en una situación incomoda así que sentí que debía intervenir.Pero justo cuando iba a hablar el me miró a los ojos y habló.

-Estaba diciendote lo que más me gusta en ti.

Nuestras madres se miraron no entendiendo a lo que se refería, pero por otra parte yo sabía perfectamente lo que quería decir.

-Bueno, no necesito que lo digas.- dije severamente.

-Niños...¿de qué están hablando?- mi madré preguntó mirandonos. Su madre igual nos miraba confundida.

-Algo que no es importante.- dije y el tosió.

-De todos modos, creo que perdí el apetito. Por favor perdonenme.- dije mientras me levantaba y salía de la puerta con todos mirandome.

Salí de mi casa mirando hacia el cielo el cual estaba osucro. Tomé mi celular y le mandé un texto a Yura sobre el tipo que vino a mi casa. Ella me respondió preguntando que hacia el ahí asi que le conté que su padre era amigo del mío y todo eso.

La puerta se abrió y lo miré caminando fuera de la casa. Di un largo quejido y me dirigñi a la puerta para entrar pero el me tomó del brazo.

-Hyeri, espera.- el dijo y yo intente soltarme, pero era imposible así que solo lo dehe.

-Mianhae, tu mamá me dijo que viniera a pedirte que regresaras.- El dijo mirandome con una expresión preocupada. Soltó mi brazo para después poner su mano en mi hombro.

-No me toques.- moví mi hombro bruscamente para mover su mano de mi.

-Lo siento...-el dio un paso hacia atrás.

-No tienes porque disculparte.- dije mientras arreglaba mi blusa, sintiendo como la briza chocaba con mi piel. -A parte...tampoco tenías que venir. Puedes entrar o solo irte a casa. No me importa.

El no dijo nada, solo me miro y se dió cuenta que estaba temblando demasiado.Se quitó la chamarra.

-Tienes frío. Úsala.- el dijo.

-No la quiero.- la mire y luego a el. -¿No oíste lo que dije? Vete a casa.

Después de un momento mirandome y sin decir nada el dio un paso hacia delante y puso su chamarra en mis hombros, dejandome sorprendida.

-Se que tienes frío, así que la necesitas.- el susurro, su voz se oía realmente suave.

-Nunca te la pedí.

-Pero la necesitas.- yo rodé los ojos.

-¿Puedes dejar de mirarme así? Es muy espeluznante.- Dije pero lo el lo siguió haciendo

-¡Ya!- pero el seguía.

Saque mi celular y tome una selca en frente de el. Se la mostré y el la miró confundido.

-¿La quieres? Puedes tenerla como fondo de pantalla en tu celular.-el solo me miro asustado.-Oh, ¿no la quieres Entonces la borraré.- guardé mi celular y el empezo a murmurar.

-¿Qué dices?- pregunté, esto era realmente divertido.

-No la quiero.- el dijo.

-¿Arasso? ¿Entonces por qué me sigues mirando sin decir nada?

-Porque me gustas.- el soltó.

-¿Waeyo?- dije cruzando mis brazos. Ya sabía que le gustaba por la manera tan rara que me veía pero estaba sorprendida por lo rápido que lo dijo.

-Porque me gusta cuando sonries. Te hace ver linda.

-¿Cuándo me viste sonreir?- pregunté y el hizo una mueca.

-Esta mañna...cuando estabas con tus amigas.

-Ya veo...pero, ¿por qué piensas eso?- fruncí el ceño.

-Porque creo que cuando sonries te vez más hermosa que cuando no lo haces.

La mirada en sus ojos era de sinceridad y honestidad, así que no pude reñirme demasiado por la situación.

-Bueno, que mal. Creo que debería gustarte otra chica. - dije y sus ojos se abrieron.

-¿Waeyo?

-Porque no creo que sea el tipo de chica que debería gustarte.- dije bajando la voz mientras me acercaba más a el.- No sonrío mucho, de todos modos.

-No vas a dejar de gustarme.- el se encogió de hombros.

-Lo que digas. Te puedo gustar lo que quieras, pero tu eres el que va a salir con el corazón roto. Solo te lo advierto.- le dije mientras guiñaba un ojo.

-Estoy listo para el reto.- dijo con determinación en su voz mientras ponía sus manos arriba.- Haré lo mejor para ganar tu corazón.

-¿Eso que?- dije cubriendo mi boca con la mano para no reír. ¿Qué estaba haciendo?

-Prometo pelear por ti y hacerte mi novia.- El dijo como si fuera un soldado diciendo que protegerá y amara a su país mientras se incaba.

Miré hacia abajo y muchos pensamientos vinieron a mi cabeza. ¿Qué rayos esta haciendo?

-Ya te lo dije. No me vas a gustar. Pero haz lo que queiras. Puedas intentarlo pero no ganaras.- dije con poco interes mientras nos dabamos la mano para cerrar el trato.