Ochenta y cuatro.

605 50 34
                                    

N/A: LEED EL FINAL.

-¿Fotos para la revista del padre de Wesley? - Preguntó Juanma.

- Ajá. - Asentí.

- Con que  no cambies y te hagas una pija de papá lo aceptamos. - Dijo Alfonso.

- Eso nunca. - Reí.

[...]

Me puse el primer vestido para la primera parte de la sesión. Me maquillaron, me peinaron y me puse delante del fotógrafo, el cual me está intimidando un poco. ¿De dónde le han sacado? Es demasiado serio para ser fotógrafo de una revista en la que siempre salen tias en ropa interior.

Luego me coloqué el conjunto veraniego para la segunda parte. Lo mismo, me maquillaron, me arreglaron, me dieron un granizado de limón para hacer que estoy en medio de la playa y encima tengo que poner cara de que este refresco me está gustando cuando es todo lo contrario.

Y la tercera parte, en ropa de baño, estaba claro... me coloqué el bañador en intenté de que acabaran rápido con esta parte ya que me estaba poniendo demasiado nerviosa.

Al terminar pude ver todas las fotos y he de decir que son geniales, creo que las voy a poner de poster en mi habitación.

- Tienes futuro. - Dijo mi futuro padre.

- Em... gracias. - Dije poniéndome colorada.

- Estoy deseando verte en esa revista hermanita. - Dijo Wesley con cara de pervertido.

- Idiota. - Me burlé. - Y no me llames hermanita, apesta.

- Al fin y al cabo es lo que seremos. - Sonrió. - Podré verte todos los días al salir de la ducha.

Puse cara de asco y me separé de él, me están dando arcadas, no bromeo, como se puede ser tan asqueroso.

- ¡Chicos! - Grité cuando llegué a la playa.

Me senté encima de Calum y les conté toda la experiencia, las partes buenas y las malas.

- Juro que si esas personas te hacen adelgadar y cambiar tu forma de ser, les mataré. - Dijo Calum en mi oído.

- Te quiero. - Dije levantándome para separarnos un poco de todos.

- ¿Te pasa algo? - Le pregunté.

- Te siento más distante de mi. - Dijo seco.

- Estos días nos estamos viendo muy poco tiempo pero eso cambiará cuando las cosas estén en normalidad en mi familia, lo prometo. - Sonreí.

- Me da miedo que Wesley pueda a llegar a ser alguien para ti.

- Mira, solo llegará a hermanastro y aún así me dan naúseas de pensarlo.

- Ven aquí. - Me abrazó.

- Te quiero, Rubio.

- Yo más a ti, morena.

Sonreí al recordar todos esos días en los que nos saludábamos con esos adjetivos, era nuestro nombre de pila.

- Estoy deseando ver las fotos. - Sonrió.

- Han quedado muy bien. - Me emocioné.

- Recuerda lo que te dije antes.

- Que si, pesado. - Le di un codazo.

[...]

- ¿Un viaje a dónde? - Sonreí. - ¿Vuestra luna de miel?

- Si, cariño. - Dijo mi madre. - A los Ángeles.

- ¿Bromeas? - Salté. - Amo Los Ángeles, traedme regalos.

- Trato hecho. - Respondió Rodrigo.

- Mientras os quedaréis con tú tía. - Me miró mi madre. - Espero que os porteis bien.

- Claro que si. - Dijo Wesley. - Me lo pasaré bien con mis hermanitos y mi primo preferido.

Samu y yo nos miramos mientras poníamos cara de asco. Porque es lo que da, dice cosas que intimidan y apestan.

******
Es corto, lo sé, pero siento que ya no leen muchas personas... ¡Qué hago! ¿acabo la novela ya?

Miénteme si no me amas -Calum Heaslip.Where stories live. Discover now