Feliz cumpleaños Draco

Que pretendes Malfoy parte 2

PARTE 2

DRACO

Seguí caminando hasta llegar a los terrenos de Hogwarts sin poder evitar que las imágenes de mis pesadillas invadieran mi mente. Tuve que cerrar los ojos y respirar hondo cuando de repente sentí como unas manos me tomaban de los brazos, abrí los ojos y vi como los de Slytherin me llevaban bien sujeto, empuje a uno haciendo que cayera pero el otro me dio un gancho en el hígado haciendo que perdiera la respiración, luego fui tumbado en el suelo y otro de los 5 me dio una patada en el estomago, me encogí con impotencia, odiaba estar tan indefenso, para evitar otro golpe tuve que utilizar magia no verbal y pude lanzar a 2 por los aires quedando levemente noqueados pero aún quedaban 3 más, si lo que ellos querían era una pelea pues eso exactamente iban a obtener

-       ¿Qué Malfoy ahora te gusta andar con las sangre-sucias y los traidores a la sangre?—dijo uno
-       ¿Qué pretendes eh Malfoy?
-       Vamos Malfoy pelea a lo muggle
-       No mereces empuñas varita

Me lance a golpes limpios a por uno pero ellos no jugaban limpio qué bueno que yo tampoco pensé con ironía dejando inconsciente a uno con una patada en el estomago pero uno de ello lanzó un crucciatos que pude esquivar lástima que no vi el que uno de los que lance por el aire al principio me lanzó por la espalda haciendo que cayera de rodillas y me encogiera, apreté fuerte mi mandíbula no les iba a dar a estos bastardos el gusto de oírme gritar, no señor.

Sentía como si el dolor hubiera estado conmigo durante años

-       Ahora Malfoy veremos a que le temes—dijo el que parecía el líder mientras sentía como quería derribar las barreras de mis mente, que bueno que Snape mi padrino me había enseñado ese hechizo
-       ¡QUE RAYOS!—Dijo al cabo de un momento cuando lo que quería hacer conmigo se le devolvió atrapándolo en su propia mente--¡AYUDENME!—Grito sosteniéndose la cabeza y cayendo de rodillas
-       ¡QUE LE HICIESTE MALFOY!—Dijo otro tomándome por la camisa del cuello y partiéndome el labio, sentí el sabor metálico de la sangre pero al verle a los ojos solo sonreí y le escupí—Bastardo—me dijo con la mandíbula apretada.
-       Expulso—dijo una voz familiar y luego vi como el que me sostenía era lanzado por los aires, para entonces yo estaba sin fuerzas así que solo me derrumbe en el suelo—No es momento para una siesta amigo mío—me dijo la voz arrogante de Theodore Nott sonriendo irónicamente, no sabía que había vuelto a Hogwarts.
-       No te hubieras molestado—trate de decir con sarcasmo pero la tos me impidió hablar como era decido.
-       No te esfuerces guárdate las energías las vas a necesitas dijo poniéndose entre mí y los otro 3 que acababan de llegar—3 contra uno me gusta eso—dijo sonriendo.
-       No te metas en esto Nott o también acaremos contigo
-       Por favor no me reír—dijo Theodore sonriendo más ampliamente
-       Me la vas a pagar Nott—dijo el líder—Sabes no hará falta usar varita contra ustedes no se merecen el desperdicio de nuestra magia
-       ¡PAR DE TRAIDORES!

Y con ello 2 se le lanzaron a Theo mientras el líder reía y se limitaba a ver.

Vi como peleaba contra esos 2 gorilas pero entonces...

-       ¡CRUCCIAT...--empezó pero
-       ¿Qué está pasando aquí?—esa era la voz del semigigante Hagrig—Petrificus totalis—dijo contra los Slytherin
-       ¡OH POR DIOS!—Esa era la bella voz de Hermione--¿Estas bien Draco?—dijo acercándose a mí--¿Puedes ponerte de pie?—pregunto cuidadosamente, esto no era nada los de padre solían doler más,  yo asentí a su pregunta y con su ayuda me ayudo a ponerme de pie
-       Ven yo te ayudo—dijo la voz de Potter a Nott pero este lo rechazo
-       Yo puedo solo Potter—si definitivamente Nott era uno de los chicos más populares de la casa de las serpientes pero a pesar de ello se mantenía reservado, un chico misterioso que enloquecía a las chicas ¿Cuándo me iba yo a imaginar que terminaría con la Lunática? Siendo él como era. Tal vez y también tuviera que abrirle los ojos para que en su futuro aparecieran esas niñas rubias gemelas que vi eran sus hijas y de Lovegood.
-       Y un cuerno tienes la pierna destrozada—dijo Ginny sacando a flote su temperamento—Ayúdale Harry—cuando Theo iba a replicar vi como ella le lanzaba una mirada castaña de -cállate no quieres conocerme- y no le quedo más remedio que aceptar a regañadientes la ayuda de Potter.
-       Vamos apóyate en mí—dijo Hermione mientras Hagrig levitaba a los Slytherin hacia el castillo, por lo menos les habíamos dado una buena paliza.