-No se que me hiciste.
-¿Por qué?-Pregunté riendo mientras veía su cara de preocupación.
-No me subiría a un avión ni por si mi vida dependiera de ello.-Me miró y tomé su cara besando sus labios.-Así se me pasa el miedo.
-Me alegra.-Sonreí.-Me gusta quitarte el miedo.
-¿Qué más te gusta quitarme?
-Pues aparte de la ropa y las ganas, no sabria que más.-Sonrió coqueto.
-Podriamos ir al baño...
-
Miré a mi alrededor, era de noche por lo cual estaban todos dormidos y como en primera clase habian menos de 6 personas no se nos haría difícil.
-Bueno.-Dije y sin más nos levantamos sigilosamente y entramos al baño.
Justin comenzó a besar mi cuello mientras apretaba mi trasero. Me pegó contra la pared y me subió un poco haciendo que enrollara mis piernas en su cadera y juntamos nuestros labios en un beso apasionado. Me sentó sobre el lava manos y llevó su mano a mi entré pierna, llevaba un vestido y debajo solo una bragas por lo que le fue muy fácil meter sus dedos en mi vagina.
-Estas húmeda.
-Tu me pones así, esto es por ti.
Seguí besandolo y llevé mis manos a su trasero para que apegara su creciente erección en mi entre pierna. Soltó un gemido en mi oído y tomé su cara para morder sus labios.
-Me encantas.
-Me recontraencantas.
Me subió el vestido y luego me lo quitó, desabroche mi bracier y sonreí cuando vi que su vista se iba directamente a mis senos.
-Son tan perfectos.-Respondi con una risita nerviosa y desabroche los botones de su camisa, pasé mi mano por su duro abdomen y baje el cierre de su pantalón, lo deje caer hasta sus rodillas y me baje del lava manos acachandome lentamente con mi camino de besos hasta estar frente a su gran miembro. Mordi mis labios y baje su boxer, tomé su pene en mis manos y me metí la punta en la boca. Su pene era tan rico, me encantaba. Sus gemidos me hacían hacerlo cade vez más rápido e ir metiendo cada vez un poco más dentro de mi. Llevó su mano a mi cabeza y la tiró para atrás.
-Preciosa, me encanta. Pero quiero correrme dentro de ti, no en tu boca.
Me tomo y me volvió a subir al lava manos, abrió con una mano mis piernas y me miró profundamente. Llevo su dedo a mi vagina y lo pasó por toda ella, haciendome gemir.
Se acercó a mi y puso su pene en mi entrada y me penetró suavemente, comenzó a moverse lento pero duro, lleve mi cabeza hacía atrás y mordi mis labios, comenzó a aumentar la velocidad y me acercó mas a la orilla para así moverse mejor. Con su boca comenzó a jugar con mis pechos y luego mordió mi pezón haciendo que soltara un pequeño gritito de placer.
-oh sí...ma..s..rápido..
Todo el lugar vibraba con nuestros movimientos, los espejos estaban empañados y nuestros cuerpos humedos por la excitación, Justin me tomó y me pegó contra la pared donde comenzó a moverse más rápido, ya no podía aguantar las ganas de gritar.
-Eh, disculpa, ¿esta todo bien allá adenteo?
La voz de la azafata nos hizo parar, calmando un poco nuestra respiración Justin se animó a hablar.
-Sí, solo estoy un poco descompuesto del estómago. No me pude aguantar la risa y solté un carcajada que el calló con sus labios.
-Te castigare por eso.
-Y, ¿como?
Me bajó y me dio vuelta, puso mis manos en l lava manos y me hizo abrir las piernas.
-Asi.-Dijo para luego entrar muy fuerte por mi trasero, me encantaba que fuera tan pervertido.
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Su madrastra. (Justin Bieber)
Teen FictionMi historia no es común, o al menos yo nunca la había escuchado antes. Me enamoré, pero ese no es el problema. Me enamoré de una hermosa mujer, de la mujer de mi suegro, la madrastra de mi novia. Jamás pensé que algo asi me pasaría y pero me pasó...