El amor puede doler

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Cuando al fin llego la tarde, ella estaba esperando a Phoebe en su casa, tendrían una tarde de chicas y después irían a la fiesta de Rhonda, para continuar más tarde en la casa de Helga la noche de amigas.

Helga tenía todo muy organizado, puso otro colchón en su habitación para que Phoebe pudiera dormir, pero sabía muy bien que n lo harían, ya que estarían hasta las tantas conversando sobre todo lo que les había pasado.

Helga está en su cama, leyendo un libro, mientras esperaba a que su amiga llegue. Siempre que empezaba un libro tenía la manía de fantasear cuando el libro está en la mejor escena romántica, algunas veces era con alguien inventado si es que realmente le gustaba y otras con personajes de series o películas que encontraba guapos. Pero algo en su fantasía había cambiado, hace mucho que no se imaginaba con Arnold, y sin darse cuenta se dejó llevar.

--------------------------------------------Libro (Fantasía)---------------------------------------

-puedes decirme lo que quieres pero eso no me alejara de ti.- contesto con amargura el joven 

-no digas estupideces.- le grito su pareja en la cara.- tu y yo no podemos estar juntos, mírame. 

- lo hago.- dijo sujetándola y mirándola de cerca.- no huyas de mi, no ahora por favor

- tu sabes que es lo mejor para los dos.- le dijo mientras tomaba su mano  y se acercaba .- no puedo estar cerca tuyo sin pensar en matarte.

Estaban solo a centímetros, podían sentir la respiración del otro. A pesar de que estaban al aire libre, no sentían el frió, ni la multitud que se encontraba cerca. El intentaba a cortar la poco distancia que los separaba pero ella solo la hacia mas grande.

-si realmente valoras la vida, debes alejarte de mi.- le dijo mirándolo seriamente, sabia que sus ojos habían cambiado de color, un color rojo, ya no eran los azules que ella tenia, ese azul cielo sino mas bien ese rojo sangre que ella tanto odia.- si no lo haces te matare, te lo aseguro.

- hazlo.- le contesto con ternura mientras se acercaba nuevamente tomándole su pequeño rostro en sus manos.- si eres tu, seria un privilegio morir en tus manos

- Arnold, por favor no digas eso.- sollozo entre sus manos....- Arnold? espera un momento tu no eres Vladimir.

----------------------------------- Fin de la Fantasía-------------------------------------

-Helga llego una amiguita, baja.- grito su madre, sacándola del trance que estaba

-si....- se sentó rápidamente mientras tiraba lejos el libro.- bajo en un momento

No tenía idea de que es lo que había pasado, fuese lo que fuese se le salió de las manos, hace mucho que no le pasaba eso, y sobre todo con Arnold, ella pensaba que realmente no volvería a pasar, se levanto con pesadez y fui directo a su cómoda donde estaba un gran espejo, fue solo un sueño o mas bien una fantasía involuntaria. 

-solo fue por que hable con el hoy.- se decía intentado creerse a si misma.- si debe ser, que más podría ser, estúpido cabeza de balón no permitiré que vuelvas a irrumpir en mi cabeza

Después de maldecir en voz baja por última vez bajo rápidamente y encontró a su amiga conversando con su madre.

- Phoebs que bueno que llegaste

- Hola Helga

- Helga querida tu amiguita se va quedar?.- le pregunto su madre

Stuck in love (Arnold y Helga)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora