Capitulo 1
Me desperté por culpa del maldito despertador, aun no se qué hago escribiendo aquí... Se siente raro que con 17 años siga escribiendo en una de estas cosas, pero bueno... según escuche escribir en un diario intimo ayuda a sacar un poco de "peso" de encima. Mire la hora, creo que ya se me hace tarde, mejor me voy a bañar y a hacer la estúpida rutina de siempre antes de que llegue tarde.
(...)
Hola, de nuevo. Salí del colegio, como de costumbre fue una completa tortura. No quiero que me miren. Esas miradas de asco, repulsión, de odio.... yo las odio.
-Flash back-
Entré al colegio y todo estaba vacío, si, para mi suerte por escribir en el estúpido cuaderno se me hizo tarde y no pude desayunar. Aunque.... pensándolo mejor, nunca desayuno, así que no es tanto el problema. Suspiré y comencé a caminar por el gran corredor. Llegué a mi salón y toqué la puerta.
-¿Otra vez tarde, Thompson?.-Preguntó el viejo regordete de Biología.
-Si, lo siento.-Traté de poner mi mejor cara de perro mojado.
-No funcionará esta vez, señorita Thompson.-Me advirtió, mis compañeros rieron divertidos.-Tendrá que quedarse fuera de clase, así aprende a no llegar a mis clases tarde.-Ordenó él mientras acomodaba sus gafas. Maldije por lo bajo.-Señorita Thompson, ¿Que es ese vocabulario?.-Preguntó impresionado.-De inmediato a dirección.-Me miró enojado y decepcionado. ¿Otra persona que se decepciona de mí? Bufé y caminé hasta dirección, primera vez que iba a dirección y creo sería la última.
Me senté en uno de los incómodos asientos a esperar, con la mirada en el suelo y acomodando, de vez en cuando, las mangas de mi remera. A unos cuatro asientos se sentó el chico que me había molestado desde que entré aquí, lo miré de reojo tratando de que no notara mi presencia, lo cual parecía podría lograr.
-¿Qué haces aquí, tonta?.-Preguntó el castaño de ojos verdes.
-Nada que te interese, estúpido.-Contesté con l mirada en una de las paredes, éste rió.
-¿Has hecho algo malo?.-Preguntó. Bufé, ¿Acaso ahora le interesa mi vida privada.
La puerta de la oficina de nuestro director se abrió dejándolo ver. ¿Cómo lo reconocí? Fácil, gran parte de su cabeza esta pelada, la otra parte tiene canas y, además siempre viste sus trajes "glamorosos".
-Señor Styles.-Suspiró y lo miró serio.-¿Es que acaso no puede pasar ni un día sin venir aquí?.-Preguntó frustrado.
-No, es que se que usted me extraña cuando no vengo.-Respondió sonriendo divertido.
-Hay Styles.. no tienes remedio.-Comentó negando con su cabeza, dirigió la mirada hacia mí y frunció su ceño.-Señorita Thompson, ¿Que hace aquí?.-Preguntó, lo miré por unos cuantos minutos sin decir nada.
-Le comieron la lengua los ratones.-Se burlo Harry antes de que pudiera contestar.
-¡Cállate!.-Ordené enfurecida.-Lo siento.-Dije al ver al director mirarme seriamente.-Dije algo... frente al profesor Wilson y me ordenó que viniera aquí.-Respondí, él asintió.
-Pasa.-Ordenó mientras se hacía a un lado.
Me paré lentamente de la silla y, antes de que pudiera decir por salir corriendo el estúpido de Styles me habló.
-No creo que quieras salir corriendo, rara.-Opinó, lo miré enfurecida y caminé hasta la oficina.
-Toma asiento, Thompson.-Comentó mientras se sentaba en su gran sillón.
Caminé lentamente y me senté en el sillón. Mis manos temblaban, ¿Que castigo me daría por esto? Digo... esto bajaría mis notas, aunque fuera mi primera vez en maldecir enfrente de un profesor.
-Cuénteme Thompson, ¿Que fue lo que dijo frente a el profesor Wilson?.-Preguntó con su ceño algo fruncido, temblé de nuevo.-Tranquila, solo cuénteme.-Trato de darme confianza. Suspiré y lo miré a los ojos.
-Maldije enfrente de él.-Dije casi en un susurro.
-Ohh... ya veo.-Comentó él, luego rió.-Tranquila Thompson, el castigo no será mucho , pero se les tendrá que avisar a sus padres.-Dijo él mientras buscaba algo en sus escritorio, bufé.
-Mis... mis padres no se encuentran en el país, ya sabe... viaje de trabajos.-Comenté con la voz temblorosa.
-oh, ya veo.-Comentó.-Bueno...-Dijo y se quedó pensativo.
-¿Afectara mis calificaciones esto?.-Pregunté nerviosamente.
-No, claro que no.-Suspiré aliviada.-Es la primera vez que hace algo malo, por lo tanto... creo que su castigo será limpiar algo o ayudar a algún estudiante con sus estudios.-Sonrió.-Luego le diré cual será su castigo.-Dicho esto se paro, indicándome que también tenía que hacerlo.-Puede ir nuevamente a sus clases.-Ordeno mientras abría la puerta, asentí y salí de allí suspirando aliviadamente.
-Rara.-Dijo Styles detrás mío, no me giré.-Oh, también eres sorda.-Comentó.
-Ya Styles, deja de molestarla y entra a la oficina.-Ordenó el director, Styles rió.
-Nos vemos más tarde, rara.-Comentó y luego entró dejando resonando en mi cabeza su "rara".
¿De verdad era tan rara? Digo... no creo ser un adefesio, pero tampoco una barbie. Entonces, ¿Que soy? Seré una clase de extraterrestre mutante o no... Kin kong. No, creo que ninguna de esas definiciones van conmigo, no porque no tengan cierto acierto, sino porque estoy ofendiendo a estos dos.
Suspiré nuevamente y comencé a caminar en dirección a mi salón, aunque, a mitad de camino recordé que no me dejarían entrar, por lo cual emprendí camino hacia el patio. Tranquilidad, al fin tranquilidad. El patio se encontraba vacío y aun falta mas de media hora para que el timbre del receso sonara, así que aprovecharía el tiempo que tenía para leer algún libro bajo el árbol. Busqué en mi mochila la novela que hacía unos días había sacado de la biblioteca y me dispuse a leerlo.
-¿El sin.... el sinsajo?.-Leyó raramente el simio de Styles. Bufé, pensé que tendría tranquilidad, ¿Y con que me encuentro? Con que al tonto lo habían dejado fuera de la clase, al igual que a mí.-¿Habla sobre los mutos y esas cosas raras, no?.-Preguntó. Levanté la mirada impresionada y asentí.-¿Estás segura de que no eres uno de esos mutos? He visto la primera película y creo que puedes llegar a ser uno de esos mutos.-Rió y mis ojos se aguaron. Mierda, odiaba ser tan débil.
Me paré rápidamente de donde me encontraba y corrí hacia el baño. Abrí la puerta de uno de estos y entré allí, cerré con seguro. Abrí la mochila y saqué el objeto filoso. Suspiré y, con lágrimas en los ojos, corrí las mangas de la remera. Miré el objeto filoso para luego deslizarlo unas veces por mi muñeca, me vendé y sequé mis lágrimas intentando que no se notara que había llorado.
-Fin de flash back.-
Aun no entiendo de qué me sirve escribir todo lo que me paso en el día de hoy, siento que no me sirve demasiado. Sigo sintiéndome sola, triste y queriendo cortarme nuevamente. Mi día fue un desastre. El almuerzo, cuando creí que podría descansar tranquila debajo del árbol las rubias huecas de mis compañeras llegaron y comenzaron a reírse de mí nuevamente para luego tirarme con sus refrescos. Ya lo sé, parece algo absurdo, pero para mí no lo es.
Hace unos minutos me percaté de que está obscureciendo, así que mejor me voy de éste estúpido parque. No porque piense que me querrán robar o algo por el estilo, sino que ya necesito irme a mi casa para poder descansar,
Bueno... espero les guste el primer cap. Si es así haganmelo saber dejando sus sensuales votos y comentarios! :3
