Capítulo 12: Esto se esta saliendo de control.

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¡Donovan! Dijo ¿Donovan?

Me quede mirandola con los ojos muy abiertos y con mis manos echas puño, quería pensar que había oído mal, quería pensar que Mimi estaba teniendo un tipo de alucinación.

Pero no, yo no era ni sordo ni ciego. Y ella no estaba loca, quizas asustada sí, pero loca no.

Las lagrimas seguían cayendo por sus mejillas, y yo simplemente seguía en mi pequeño minishock al no poder creer lo que había dicho.

- ¿Donovan? Te refieres a Donovan Haynes, el idiota al que le derramaste el jugo y me golpeo - aprete los dientes con fuerza al recordar eso. Ella asintió mientras buscaba un pañuelo para limpiarse la nariz.

- Si..él.. él me sacó de ahí - dijo en un susurro.

Algo estaba mal, había algo que se me estaba saliendo de las manos, y algo que no recordaba ¿Pero qué?. Cómo diablos es posible que ese idiota estuviese en el bosque y saliera ileso. Como diablos el ayudo a escapar a Mimi de las garras de un lobo, como es posible que él estuviera ahí en aquel instante, y lo que es peor ¿Qué haría un adolescente normal en la mitad de un bosque por la noche? Pues nada a menos que no sea un adolescente normal, lo que me lleva a pensar en las posibilidades de que sea un vampiro, pero si hubiese sido así aquel día el hubiera estado tan jodido como yo en esa noche, y si fuera un licantropo estaría en su forma lobuna, ambas ideas estan descartadas por lo cual me queda una última, que él sea un brujo o un hechizero.

Entonces he llegado a la conclusión de que ese imbecil sí fue y de que el idiota de Lynch mintió al decir que no había estado en la fiesta. Al parecer a alguien no le dolió la paliza de esa noche y recibirá otra muy pronto.

- ¿Cómo sucedio? - pregunté. Tenía que saber todo, tenía que averiguar que es lo que había detras de el tal Donovan, porque a mi nadie me sacaría de la cabeza que él estaba aquí por algo, o quizas ... por alguien.

- Como te dije yo ... caí, mejor dicho tropece, mis lentes se cayeron y yo me di un golpe en la cabeza, todo se volvió borroso no sólo por los lentes si no que sentía que perdía la conciencia, lo último que recuerdo de aquel momento fue verlo a él y que me tomaba en su brazos- Agachó la mirada como si estuviera avergonzada.

- Entonces no estas segura de que fuera él, acabas de decir que te golpeaste la cabeza - intentaba buscar el punto en donde las cosas cambien, pero no fue así.

- No estoy loca Jaxon, se lo que vi, ademas... - se quedo en silenció, mirando sus manos.

- ¿Ademas? - inquirí.

- Él me dejo esta nota - se levantó de la cama y abrió un cajón de su escritorio. De este sacó una pequeña nota, y me la extendió.

《Esta pomada te ayudara a bajar la hinchazón.
No menciones lo de anoche con nadie.

D. 》

- Quizas era otro que su nombre comience con D, no se Dylan, Dakota, Diego, Daniel - ella frunció el ceño sabiendo que de nada serviría mis excusas.

- Prométeme que no se lo contaras a nadie - pidió.

Quizas no se lo contaría a nadie pero debía averiguar que estaba sucediendo, había algo detras de esto, algo muy oscuro y por alguna razón sentía que el pasado volvería a atormentar nuestro presente.

- No te preocupes. No diré nada.

Sin decir mas salí de su habitación, ahora mi única preocupación era averiguar sobre Donovan, y saber como esta mi chica.. dire Zoe.

Narra Kelsey:

Preocupación, eso es lo que estaba sintiendo en estos momentos. Jaxon estuvo a un pelo de averiguar todo, o mejor dicho lo de Zoe.

Jaxon LawrenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora