Con Sólo Una Caricia (Harry Styles fanfic)

Capitulo 15

HARRY

Estaba en casa tumbado en el sofá con la tele encendida, pero no la estaba viendo para nada. Creo que estaban echando la retransmisión de un partido de baloncesto. No lo sé. Lo único en lo que pensaba era en Maddie y en lo que había ocurrido. Pensando en las llamadas de Fiona a Maddie. ¿Por qué lo había hecho? No lo sabía. Pero lo que más me preocupaba era Maddie. ¿Cómo estaría ahora? Llevaba mucho tiempo esperándola (dos horas y media), ya que dijo que vendría porque teníamos que hablar. ¿Estaría descansando en su casa? Tenía que ser eso porque si no, me hubiese llamado, ¿no? ¿O puede que hubiese tenido un accidente de tráfico al venir hacia aquí? Eso sí que no lo soportaría. Ver a Maddie en el hospital me mataría. Estaba que no podía de los nervios, así que decidí llamarla al móvil

El teléfono al que llama está apagado o fuera de cobertura. Por favor, inténtelo de nuevo más tarde

"No. No puede ser"

La imagen de un coche destrozado y a Maddie sangrando y llena de cortes por todas partes me vino instantáneamente a la cabeza. ¿Y si era verdad y había tenido un accidente? Luego, me acordé que todavía tenía yo el móvil de Maddie en su bolso y me calmé un poco

"Idiota"

Sí, fui bastante estúpido. El miedo de pensar en ese accidente nubló mi sentido de la coherencia y la razón. De todas formas, estaba preocupado. Me hubiese llamado si hubiera pasado algo, ¿no?

-Llamaré a su casa -cogí mi teléfono

"¡Qué coño! Ve a su casa"

Sí, iría allí. Quería verla con mis propios ojos si estuviese allí. Quería verla y hablar de esas cosas que teníamos pendientes, aunque no quisiese

Cogí la moto y las llaves de casa y salí cagando leches hacia la de Maddie. No sabía si me iban a dejar entrar, pero sólo con que Enriqueta me dijese que había llegado bien, me conformaba

Mientras conducía hacia su casa, esa imagen de Maddie en el hospital se reproducía una y otra vez. ¿Por qué me preocupaba tanto por ella? Sé que ese pensamiento era sólo producto de mi puta imaginación, pero me traía de cabeza el saber que podía ser así. De hecho, me traía de cabeza todo lo que le pasaba a Maddie. Era como una extraña obsesión porque estuviese bien y a salvo, porque la protegiera de todo y de todos. Tal vez, podría describirme como un acosador en toda regla, pero es que no podía evitarlo. Maddie para mí era lo más preciado que tenía del mundo y moriría si la perdiese. Era lo único por lo que merecía la pena vivir, por lo que aguantaba esta mierda que tenía por vida y por la que daría todo. Maddie era lo único valioso y no lo perdería por nada del mundo. Ahora también parecía un posesivo con ella. Pero es que era así. Maddie era sólo mía, ningún tipo podía tocarla. Y en el caso que lo hiciesen, lo último que viesen antes de morir sería mi puño en su cara

Aparqué justo delante del edificio de Maddie. No sé por qué, pero los dos porteros que había en la puerta y yo íbamos a tener varias "diferencias" entre nosotros. Ojalá no acabase como con lo de la graduación de Maddie. Ahora sí que no tenía la pierna escayolada y estaba más fuerte que nunca. Me dirigí a la puerta, pero los tipos me miraron y apartaron la mirada hacia otro lado. O estos tipos eran buenas personas o no estaban controlados por la puta de Fiona. Me relajé cuando entré al ascensor. Sabía cuál era el número de la casa de Maddie porque una vez tuve que ayudarla a subir porque había bebido un poquito cuando estuvo de fiesta con Ailyn. Ella me llamó para que la trajese. Maddie no sabe beber y se emborrachaba con dos copas de más. Menos mal que no la pilló ni su padre ni Fiona. Llamé al timbre y abrieron enseguida la puerta. Era una mujer pequeña y regordeta, con el pelo castaño con alguna que otra cana, a juego con sus ojos, igual de castaños. Nunca la había visto en persona porque yo siempre me quedaba en el umbral, ya que la que salía era Álex, pero juraría que era Enriqueta