CAPITULO V. parte uno.

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Era sábado y la casa de los Nayar se vestiría de fiesta por la noche debido a que el día anterior Micaela había rendido la última materia de su carrera, aprobándola y convirtiéndola oficialmente en profesora de educación física. Era la segunda persona del grupo en haberse recibido (Paula fue la primera el año pasado) y todos estaban muy felices por ella, y ¿qué mejor que celebrarlo en la casa de los mellizos? Las chicas, más específicamente Florencia y Bianca, rápidamente tomaron la decisión de ser las encargadas de la decoración del lugar, y no tuvieron mejor idea que finalmente la fiesta sea de disfraces. Ese día a la mañana ambas fueron a un lugar donde alquilaban disfraces, acompañadas por Paio, luego de que él les insistiese mucho (tenía su niño interior a flor de piel). Allí luego de probarse, los tres, reiterados disfraces, terminaron eligiendo los nueve que más le gustaban para llevarlos a lo de los mellis y allí que cada uno de los chicos eligiese el disfraz que más le gustase. Luego, aprovecharon la disposición de Paio, y les sirvió de chofer para ir un lugar donde vendían cosas para fiestas. Bianca se dirigió al sector donde se encontraba la vajilla descartable, para elegir recipientes, platos y vasos. Florencia se encaminó hacia la parte donde estaban las cosas para decorar un lugar, con el fin de conseguir globos, luces y guirnaldas, entre otras cosas. Mientras que por su parte, Paio se dedicó a buscar en una zona de cotillón, todo lo que fuese espuma o serpentina en spray, también papel picado, etcétera.

Finalmente, al horario del almuerzo se dirigieron con todas las compras (y alquileres) a la casa de los Nayar. En el auto de Paio apenas cabían él, Bianca y Flor, debido a la gran cantidad de cosas que llevaban. Una vez que llegaron, Paula y Micaela, con guantes en las manos, fueron las que los recibieron, ya que habían decidido ser las encargadas de la limpieza de la casa.

-Che, este parece el auto de los payasos. –Bromeó Micaela al observar la imagen frente sus ojos. -No sé cómo hicieron para entrar ahí. –Señaló el auto.

-Hicimos magia por usted, profe. –Le devolvió en chiste Paio.

-¡Ay! –Chilló emocionada Flor. -No saben todas las cosas que trajimos.

-¡Sí! No saben los disfraces que elegimos. –Sumó igual de entusiasmada Bian.

-¿Consiguieron para todos? –Preguntó Mica, sonriendo ante la emoción de sus amigas.

-Sí. –Le contestó Bianca a Micaela. -Y vos Paula, tu novio parece de cinco años, no sabés lo embobado que estaba en el lugar de los disfraces. –Miró a la morocha.

-Tal cual. –Rió Florencia. -Parecía un nene en Disney.

-Me imagino. –Rió divertida Pau, mirando a su novio.

-Cállense, como si fuera que ustedes no estaban emocionadas, se probaron todos los disfraces conmigo. –Bufó Paio a sus amigas.

-Sí, claro. –Ironizó Bianca, riendo. -Ahora ayúdennos a bajar las cosas del auto.

Las chicas se sacaron los guantes y ayudaron a los demás a bajar todas las cosas del auto. Bianca se negó a mostrarles los disfraces hasta que estén todos. Una vez que metieron todas las cosas adentro, Paula y Micaela continuaron limpiando la casa. Mientras que Flor y Bianca sacaban las cosas de decoración para empezar planear y esquematizar como iban a adornar el lugar.

-Paio, atendé mi celular que está arriba de la mesa. –Indicó Micaela, al escuchar el sonido de su ringtone, ya que no podía atender por los guantes que ahora se había vuelto a poner.

-¿Hola? –Habló Pablo cuando atendió la llamada.

-¿Quién habla? –Preguntó la persona que llamó.

-Un secuestrador.

-Paio. –Dijo Nacho del otro lado de la línea, reconociendo el tipo de chistes que hacía su amigo. –Estamos afuera de casa, ¿nos podés abrir? Porque no tenemos llave.

Paio cortó la llamada y fue hacia la puerta para abrirles tanto a los dueños de casa, como a Gonzalo, quienes estaban del otro lado de la puerta con bolsas en sus manos, ya que ellos eran los encargados de la comida y las bebidas.

-Te dije que no cierres con llave. –Reprendió Nacho a Micaela.

-No me interesa, yo voy a cerrar con llave siempre, lo único que falta es que nos entren a robar. –Contestó Mica, sin mirarlo, mientras acomodaba una alfombra.

-¿Nos ayudan? –Preguntó Ramiro a Paio, Bian y Flor. -Hay más bolsas en el auto, packs de gaseosas y cajones de cerveza.

Los chicos ayudaron a meter todas las cosas en la casa, y cuando por fin terminaron, se sentaron todos a descansar en el comedor; Paula puso en bandejas unos sándwiches que habían traído los chicos para almorzar y con ayuda de Micaela las llevó a la mesa.

-¡Buenas! –Saludó Nicolás, al abrir la puerta de entrada, que al parecer, contrariando a Micaela, habían dejado abierta. -Ya conseguí el DJ para esta noche. –Avisó.

-Buenísimo Nico, vení que llegaste justo para almorzar. –Invitó Mica.

-Uh, menos mal porque me estaba muriendo de hambre. –Se alivió él. Se acercó a la mesa, depositó un beso en la cabeza de Flor y se sentó a su lado.

-Ahora que estamos todos, les podemos mostrar los disfraces. –Se levantó Bianca de su silla, y fue a buscarlos.

-Qué intriga. –Rió Paula.

-Este es mío. –Advirtió Bianca, agarrando un disfraz. -Creo que el verde es mi color, sin contar que los otros me quedan grande. –Agregó riendo.

-¿Hiedra venenosa? –Preguntó Gonzalo, a lo que Bianca asintió. -Está bueno. A ver los otros... –Se levantó de su silla para ayudarla a desembolsar los demás disfraces.

-Mirá este. –Le pasó Bianca a Gonzalo un disfraz.

-Flash. –Dijo Gonzalo, sacándolo de la bolsa. -Este es de Rama, sí o sí.

-Tal cual, me da miedo subirme a un auto con él de lo rápido que va. –Opinó Paula.

-Miren este que hermoso es... –Dijo Bian, sacando de la bolsa un disfraz de La Mujer Maravilla.



Borré esta parte y la volví a subir porque cada vez que refrescaba la página, no me aparecía esta parte no sé por qué 😭 espero que ahora sí se publique

¿Quéeee? ¡¿Cómo que la historia superó los quinientos votos cuando la última vez que publiqué recién había pasado los cuatrocientos?! Para mí es un montonazo; ustedes sí que saben como motivarme a seguir escribiendo :))))

Por otro lado estoy medio tristona porque se fue Nacho, yo ya sabía que si no ganaba los juegos la tenía complicada, pero igual me puse mal. Pero bueno, son sólo dos semanas que quedan, y espero verlo en la 7ma!! Por otro lado, ahora sí o sí quiero al verde campeón, y Micaela campeona absoluta. 

A pesar de eso, ustedes me hicieron feliz con sus votos. Mil millones de gracias a las lectoras que se suman, y a las fieles de siempre. Son las mejores!!!! Voten, comenten, lo que quieran. Besitos, hasta el martes 😘

Perks of being friends {Nachoela}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora